El presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, confirmó en sus redes sociales que habló con su homólogo francés, Emmanuel Macron, sobre el «despliegue de contingentes militares» extranjeros en Ucrania, propuesta planteada hace varios meses y que no ha sido descartada por la Unión Europea, pero que implicaría sin dudas una extensión de la guerra de Rusia contra la OTAN, algo que por el momento se mantenía disimulado. Por otro lado, el anuncio es una confirmación tácita de que carece de tropas propias para mantener la guerra contra Rusia, que el 24 de febrero cumplirá tres años.

«Abordamos los pasos prácticos para su implementación, la posible expansión y la participación de otras naciones en este esfuerzo«, dijo el jefe de Estado ucraniano, que señaló haber acordado «trabajar en estrecha colaboración con aliados clave para lograr la paz y desarrollar garantías de seguridad efectivas».

Zelenski explicó a través de un comunicado publicado en su perfil de la red social X que mantuvo «una conversación detallada sobre la situación en el campo de batalla y el progreso de las fuerzas ucranianas en la operación (en la región rusa de) Kursk».

Luego agrega: “Expresé mi gratitud al Presidente Macron y al pueblo francés por su apoyo inquebrantable, que no sólo ayuda a salvar vidas, sino que también nos acerca a una paz y una estabilidad duraderas en Europa. (…) Como una de esas garantías, analizamos la iniciativa francesa de desplegar contingentes militares en Ucrania. Abordamos las medidas prácticas para su aplicación, su posible ampliación y la participación de otras naciones en este esfuerzo”.

Macron no se refirió al asunto en sus redes, pero hace unos días se había reunido con el primer ministro británico, Keir Starmer y abordaron no solo el tema Ucrania sino Medio Oriente y seguramente cómo impactará en el continente la nueva presidencia de Donald Trump.

Unos días antes, Macron, había dicho que las autoridades ucranianas deberían ser «realistas» sobre la cuestión territorial y lograr así encontrar una solución que ponga fin a esta parte del conflicto, que cumplirá ya tres años el próximo mes de febrero.

En su discurso anual ante los embajadores franceses, Macron recalcó que «no hay una solución fácil y rápida en Ucrania«, a diferencia de lo que ha estado diciendo el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, de quien espera que pueda «convencer» a Rusia para que se siente a negociar.

ALG con Europa Press