El titular de YPF, Horacio Marín, reconoció que Petronas está evaluando su permanencia en el megaproyecto de la planta de GNL que, con una inversión de U$S 30.000 millones, fue el caballito de batalla que usó el gobierno nacional tres meses atrás para presionar en favor de la aprobación del Régimen de Incentivo de Grandes Inversiones (RIGI).
Marín dijo: “En esta primera etapa, estamos trabajando sobre la ingeniería. Para mediados de noviembre tendríamos el valor de la ingeniería de detalle para los barcos licuefactores. Para el desarrollo de esa ingeniería se necesitaría invertir unos 200 millones de dólares. En ese momento, Petronas tiene la opción de continuar o no con el proyecto. Hay que desdramatizar la situación, son decisiones empresarias”.
De esta forma, Marín confirmó que la presencia de Petronas en el megaproyecto no está asegurada. En la mañana de este viernes, el periodista Marcelo Bonelli publicó en el diario Clarín que la petrolera malaya “evalúa desistir de invertir con YPF y que extraoficialmente ya comunicó esa posible decisión”.
A pesar de la sociedad que conformaron para la que sería la mayor inversión única en la historia del país, Marín aseguró que desconocía los planes de los malayos. “Yo no tengo información sobre cuál sería la decisión de Petronas. Es una de las mejores empresas de GNL del mundo y estamos trabajando muy bien con ellos”.
Al rescate de la planta de GNL
La eventual salida de Petronas llevaría el proyecto de una terminal de licuefacción de gas a un punto muerto. La planta de licuefacción en tierra era la tercera etapa, y la más cara, de un plan que incluía otras cuatro plantas flotantes (FSRU por su sigla en inglés) que se pondrían en funcionamiento antes y cuya construcción aun no empezó.
Pero dada la estrategia del gobierno, que aseguró que el RIGI impulsaría este proyecto, la salida de Petronas termina siendo una cachetada difícil de asimilar. En realidad, el proyecto está dando vueltas desde 2018 y durante el gobierno de Alberto Fernández no prosperó un proyecto de ley que proponía beneficios específicos.
De allí que Marín debió salir a defender la iniciativa. “Si Petronas no continúa, YPF va a seguir adelante. Es un proyecto que genera mucho interés. El proyecto no depende exclusivamente de Petronas. Pueden ingresar otras compañías”, agregó Marín, en entrevista con la radio El Observador.
Marín estuvo en Houston la semana pasada junto con otros petroleros del ámbito argentino y el secretario de Energía, Eduardo Rodríguez Chirillo. De allí se trajo la idea de que hay un interés por transformar el gas de Vaca Muerta en GNL. “Nuestro proyecto está instalado a nivel mundial. Más de 50 reuniones mantuvimos en ese marco”, subrayó.
Añadió que una indeterminada cantidad de consultoras internacionales han demostrado “que el proyecto Argentina LNG es más competitivo otros proyectos que se puedan a realizar Estados Unidos gracias al RIGI y a Vaca Muerta”.
Marín admitió que aún está verde el financiamiento, lo que equivale a reconocer que todavía está verde. “Hay que trabajar para lograr el financiamiento. El proyecto se financia en el mercado, toman riesgo contra el proyecto cerrado”.