La música de fondo comenzó a inundar el Gran Palacio del Pueblo de Beijng cinco segundos antes de las 10 de la mañana, el horario previsto para el comienzo de la Conferencia por el 70º Aniversario de los Cinco Principios de Coexistencia Pacífica. A la hora señalada, el presidente chino Xi Jinping hizo su aparición y, tras los saludos protocolares de rigor, pronunció un discurso con un fuerte contenido político, en el que llamó a construir una comunidad de futuro compartido de la humanidad, destacó el rol del Sur Global en la búsqueda de la paz y sostuvo que el verdadero multilateralismo debe impedir que se imponga la voluntad de “quien tenga los músculos más fuertes”.

Ante la presencia de unos 600 representantes de más de cien países, Xi afirmó este viernes que los Cinco Principios son “antiimperialistas, anticoloniales y antihegemónicos”, pues permiten “abandonar la ley de la selva del militarismo y la intimidación del débil por el fuerte”, además de dejar sentada “una importante base ideológica para la promoción del orden internacional en una dirección más justa”.

“No pasaron de moda ni se decoloraron, sino que brillan con más fuerza”, advirtió.

“No se trata de levantar muros de hierro para confrontar, sino de abrir un espacio por el que corran caminos para la cooperación”, afirmó el secretario general del Comité Central del Partido Comunista de China (PCCh), en un pronunciamiento que muchos interpretaron como un evidente mensaje a un destinatario que no necesitó ser mencionado.

“Los asuntos del mundo – insistió – deben ser tratados por todos los países. No se puede permitir que quien decida sólo sea el que tenga los músculos más fuertes”.

“La determinación de China de seguir el camino del desarrollo pacífico no cambiará. Nunca seguiremos el viejo camino del saqueo colonial, ni el camino perverso del dominio nacional… Por cada punto que aumenta el poder de China, aumentan las esperanzas de paz mundial”, agregó.

Asimismo, Xi hizo un poco de historia y recordó que hace siete décadas el sistema colonial mundial se había desmoronado frente al auge global de los movimientos independentistas y de emancipación nacional.

“En un mundo ensombrecido por la Guerra Fría, la ley del más fuerte se convirtió en clamor, mientras los países recién nacidos aspiraban a defender su soberanía y a desarrollar su propia economía”, señaló.

En aquel escenario, indicó Xi, los líderes chinos definieron por primera vez los Cinco Principios de Coexistencia Pacífica, consistentes en el respeto mutuo por la soberanía y la integridad territorial, la no agresión mutua, la no interferencia en los asuntos internos de otros países, la igualdad y el beneficio mutuo, y la coexistencia pacífica.

Estos principios se convirtieron en la columna vertebral de las declaraciones conjuntas entre China, India y Myanmar, “y los tres países apostaron juntos por convertirlos en normas básicas para las relaciones entre los Estados”, según explicó Xi.

«A lo largo de los 70 años, los Cinco Principios de Coexistencia Pacífica han trascendido del tiempo y el espacio, y han superado el distanciamiento, demostrando su robusta resiliencia e importancia duradera. Se han perfilado como las normas básicas de las relaciones internacionales y los principios fundamentales del derecho internacional que son abiertos, inclusivos y universalmente aplicables», agregó.

Para el mandatario, una vez desafiada la cuestión histórica de «qué tipo de mundo queremos construir y cómo construirlo, China formuló la construcción de la comunidad de futuro compartido de la humanidad como respuesta de nuestro tiempo”, un concepto que precisamente se inspira en el espíritu de los Cinco Principios, según destacó.

Al respecto, indicó que esta virtual actualización de los Cinco Principios bajo nuevas circunstancias, “establece un nuevo ejemplo de igualdad y convivencia para las relaciones internacionales, corresponde a la corriente de nuestro tiempo caracterizada por la paz, el desarrollo, la cooperación y la ganancia compartida, e inspira nuevas formas de lograr el desarrollo y la seguridad”.

«En este momento histórico – insistió – en que la humanidad tiene que elegir entre paz y guerra, prosperidad y recesión, solidaridad y confrontación; necesitamos más que nunca hacer valer la connotación de los Cinco Principios de Coexistencia Pacífica y emprender incansables esfuerzos hacia el noble objetivo de la construcción de la comunidad de futuro compartido de la humanidad».

En este contexto global, Xi afirmó que “el Sur Global destaca con un fuerte impulso y ha desempeñado un papel sumamente importante para el progreso de la humanidad”, por lo que “debe avanzar de la mano con una visión más abierta e inclusiva, llevando la delantera en promover la construcción de la comunidad de futuro compartido de la humanidad”.

El presidente chino hizo un llamado al Sur Global para que “sea la fuerza incondicional de la paz, el motor central del desarrollo abierto, el equipo de construcción de la gobernanza global y los defensores del intercambio entre civilizaciones”.

Finalmente, para promover una mayor cooperación en el marco del Sur Global, Xi anunció que China establecerá un Centro de Estudio del Sur Global, ofrecerá 1.000 Becas de Excelencia de los Cinco Principios de Coexistencia Pacífica y 100.000 plazas de seminarios y capacitaciones a los países del Sur Global en el próximo lustro, además de iniciar un Programa de Líderes Jóvenes del Sur Global.