“Yo hablo de mi historia y lloro porque estoy destruida por dentro. No me quiero imaginar el resto. Hace más de 35 años soy travesti. Cuando me echaron de mi casa, con mi carterita, me preguntaba dónde podía ir, que podía comer. Nunca proyectaba, sólo pensaba en sobrevivir. Tuve suerte porque me dieron una oportunidad y dije ‘esto no lo suelto’. Construí mi identidad travesti en un lugar profundamente binario. Gracias a Lohana Berkins podemos decir que queremos ser travestis, no mujeres”. Las palabras de Flor de la V resonaron en el auditorio de la universidad nacional de Luján, en el cierre del IV Congreso Políticas para la Igualdad Estado Presente, que organizó el Ministerio de Mujeres y Diversidad de la provincia de Buenos Aires.

El público acompañó con un silencio profundo y, al finalizar, con aplausos a rabiar la intervención de la conductora y columnista. Florencia exigió pensar “cómo las travas podemos ser parte de la sociedad. Espero que cuando nos pase algo, salgan a luchar con nosotras”.

El panel «Sentidos en disputa cultura y género ante la reacción conservadora” fue el cierre del congreso, que se extendió durante dos días y en el que participaron 2500 personas en mesas de debate y foros, de juventudes y de cumplimiento de las obligaciones alimentarias, entre otros temas. Estuvieron presentes colectivos de mujeres de distintos pueblos y ciudades de la Provincia, referentes de las áreas de género y diversidad de otras provincias, agrupaciones de las áreas de extensión de universidades y de espacios de cuidado de infancias y adolescencias.

“Nos atraviesan muchas emociones. Fueron dos días de intenso trabajo y llevó muchos meses llegar hasta aquí. Nosotras planteamos un feminismo popular”, afirmó Estela Díaz, ministra de Mujeres y Diversidad de la provincia de Buenos Aires quien abrió el panel. Díaz denunció el “ataque” a la ciencia y a la cultura que lleva adelante el gobierno de Javier Milei desde el 10 de diciembre de 2023.

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Dora Barrancos, Estela Díaz y Soledad Quereilhac.
Foto: Ministerio de Mujeres PBA

En esa línea, Soledad Quereilhac, doctora en Letras, investigadora independiente del CONICET y docente, precisó que el “ataque” del gobierno nacional es, entre otros espacios, a las universidades públicas y al Conicet. “El hostigamiento, además de económico, es simbólico: nos hacen pasar a los profesores como vagos. Para este gobierno no somos un país que deba tener universidades para producir conocimiento. Y el encarnizamiento es mayor con las ciencias sociales porque las humanidades y las artes desarrollan pensamiento crítico”, afirmó Quereilhac.

La docente se refirió al cuestionamiento del gobierno al libro “Cometierra” de Dolores Reyes, que sólo generó mayor interés y ventas y calificó la reacción de las autoridades nacionales de “tonta y mojigata”. Pidió también pensar en clave de resistencia y rechazó la idea que la sociedad se haya vuelto conservadora. En ese sentido, pidió seguir generando ámbitos de producción de conocimiento para pensar la soberanía.

Paulina Domínguez, docente y activista travesti por los derechos humanos planteó que la sociedad está “atravesando un contexto de quiebre”. “Quizás sea más fácil vencer al capitalismo que al patriarcado”, dijo con humor. “La idea de la precariedad de la vida a la que nos lleva el capitalismo tiene como consecuencia que nuestros cuerpos están más expuestos”, sostuvo, y dijo que es fundamental que continúe el cupo laboral travesti trans en el Estado pero también en el ámbito privado. A su lado, la ministra Estela Díaz aseguró que la ley de cupo trans en la provincia de Buenos Aires está vigente. “Y va a seguir hasta que la desocupación sea cero”, afirmó.

Dora Barrancos, socióloga e historiadora feminista, consideró que las luchas de los feminismos “están dentro de la lucha por la dignidad humana”. “La extrema derecha tiene terror a darse cuenta que son producto de la cultura. Y que el orden binario sólo existe en una concepción: la de ustedes. A las extremas derechas les decimos que las vamos a seguir irritando muchísimo”, planteó Barrancos ante los aplausos del auditorio.

En la misma línea argumental, Julia Mengolini, periodista y escritora, sostuvo que “la reconstrucción de la patria no la vamos a hacer apichonados”. Mengolini, creadora de la radio Futurock, contó que su formación feminista se inició con Lohana Berkins, militante pionera por los derechos de las mujeres travestis y trans, a quien conoció cuando ambas eran asesoras en la Legislatura porteña a inicios de los 2000. “Molestar con el lenguaje es un recurso retórico y político. Las personas trans nos enseñan a romper con la binariedad del patriarcado. Estamos bajo ataque”, planteó Mengolini.

La periodista destacó que, según distintos estudios de comportamiento electoral, hoy mujeres y los varones votan distinto. Así ocurrió en las elecciones en la Argentina, en Estados Unidos y en Alemania, donde la mayoría de las mujeres no votó por los candidatos de extremaderecha, que se terminaron imponiendo en las urnas. “Las mujeres no votamos a este payaso asesino que anda revoleando la motosierra por el mundo. El feminismo fue un antídoto antifascista y se lo vamos a tener que convidar a los varones”, consideró.