El Partido Justicialista de Argentina y el Partido Comunista de China (PCCh, por sus siglas en español), como partidos políticos de gran importancia en sus respectivos países, han mantenido a lo largo del tiempo relaciones amistosas y cooperaciones estrechas en áreas de interés común frente a los desafios de un mundo altamente cambiante. En la dedicación en el crecimiento y desarrollo de cada país y cooperaciones mutuas, establecieron un paradigma de intercambio entre los partidos de izquierda de los países de los países en vía de desarrollo.
Incluso antes del establecimiento de relaciones diplomáticas entre ambos países, los partidos ya habían comenzado a interactuar amistosamente, lo que se reflejaba especialmente en la amistad entre sus líderes. Como líderes políticos contemporáneos de países del Tercer Mundo, el ex presidente Juan Domingo Perón mantuvo una amistad y correspondencia con el expresidente Mao Zedong.
En 1965, una delegación de jóvenes justicialistas en el marco de la «diplomacia entre pueblos» visitó China, cantando la «Marcha peronista» en la Plaza de Tiananmen como homenaje al pueblo chino. La delegación trajo la carta de Perón fechada en Madrid el 15 de julio de 1965, desde el difícil exilio en España. «Aprovecho la magnífica oportunidad que brinda el viaje de los jóvenes dirigentes peronistas del MRP [Movimiento Revolucionario Peronista], gentilmente invitados por Uds.», escribía Perón, en la que se dirige al presidente de la República Popular China, como «Mi querido presidente y amigo». «CHINA POPULAR», escribió así, con mayúsculas, es un «ejemplo» y la «base inconmovible de la Revolución Mundial», «su pensamiento y su palabra de Maestro revolucionario caló hondo en el alma de los pueblos que luchan por liberarse».
Perón era presidente, tras 18 años en el exilio, hasta su fallecimiento el 1 de julio de 1974. Dos días después, el entonces mandatario interino Dong Biwu y el primer ministro Zhou Enlai de China enviaron un telegrama de condolencia a la esposa de Perón, elogiando la vida del presidente Perón como «un destacado activista político que había trabajado activamente por la independencia nacional de Argentina y por fortalecer la unidad y la lucha contra la hegemonía del Tercer Mundo». Durante la visita de Estado en el 2022, el entonces presidente Alberto Fernández y la delegación visitaron el Mausoleo de Mao, continuando la amistad entre los partidos.
Contra el imperialismo
En la década de 1970, después de establecer relaciones diplomáticas entre China y Argentina, como partidos políticos importantes de los países del Tercer Mundo, el Partido Justicialista y el PCCh se apoyaron y se hicieron eco el uno al otro en la lucha conjunta contra el imperialismo.
Perón destacó con particular énfasis el significado de la solidaridad del Tercer Mundo contra la hegemonía: «Asimismo, se deduce la consolidación del Tercer Mundo, y la Tercera Posición como resultantes históricas definidas. La Tercera Posición como unidad conceptual, y el Tercer Mundo, como entidad política».
Durante su segundo mandato, lideró a Argentina en el establecimiento de relaciones diplomáticas con 23 países, la mayoría de los cuales eran países del Tercer Mundo de Asia, África y Latinoamérica.
Condenó severamente que en «nuestra época actual, dos colosos unidos entre sí por la conquista del mundo, pero observándose disimuladamente para aprovechar cualquier descuido, ejercen presión según sus características sobre los indefensos países en vías de desarrollo, buscando la materia prima y el alimento que necesitan para mantener su enorme poderío. Su avance es sumamente pernicioso para la vida de los pueblos que luchan con escasos recursos por su liberación política, social y económica en busca de su soberanía nacional». Con el lema «Latinoamérica es de los latinoamericanos», llamó a la unidad.
Argentina apoyó activamente a los países latinoamericanos en la protección de sus recursos naturales y la defensa de sus intereses económicos, firmó una serie de acuerdos económicos y tratados comerciales con Bolivia, Paraguay, entre otros, y puso énfasis en desarrollar relaciones con la Comunidad Andina. Las ideas políticas y los esfuerzos diplomáticos antes mencionados del PJ recibieron el apoyo activo y el sólido respaldo del PCCh.
En los ’90, con el regreso al poder del PJ, los intercambios amistosos entre ambos partidos se hicieron más frecuentes, beneficiándose de los crecientes lazos económicos y las visitas de alto nivel entre los dos países. Después de los sucesos de Tiananmen en 1989, el entonces presidente del partido, Carlos Menem, mantuvo una postura de no interferencia en los asuntos internos de China, enviando a su hermano, el presidente provisional del Senado, Eduardo Menem, a visitar China e invitando al presidente Yang Shangkun a visitar Argentina.
En mayo de 1990, el presidente Yang realizó una visita de Estado a la Argentina, la primera visita de un jefe de estado chino a ese país. Seis meses después, Menem visitó oficialmente China. Las visitas recíprocas de los líderes cobraron una importancia internacional notable, rompiendo el intentado aislamiento político occidental contra China y el primer acuerdo firmado sobre el mecanismo de consultas gubernamentales sirvió como un importante ejemplo a seguir para los países en desarrollo.
Malvinas
En el conflicto de la soberanía de las Islas Malvinas, China se manifestó firmemente en contra del colonialismo en varios escenarios internacionales, incluidos los foros de la ONU, apoyando la posición justa de Argentina en la defensa de su soberanía y la integridad territorial, y esperando que las partes resuelvan este conflicto histórico a través de negociaciones pacíficas.
Varios líderes del PJ, incluida la presidenta Cristina Fernández, en diversas ocasiones han agradecido a China por su apoyo a la posición argentina sobre la cuestión de las Malvinas. En el último día de la visita a China del presidente Alberto Fernández, ambos países emitieron la declaración conjunta sobre la profundización de la Asociación Estratégica. China reiteró su apoyo a los reclamos de ejercicio pleno de soberanía sobre las Malvinas, así como a la reanudación a la mayor brevedad de las negociaciones encaminadas a la solución pacífica de la disputa, de conformidad con las resoluciones pertinentes de la ONU.
Además del diálogo bilateral, ambos partidos también han fortalecido activamente la cooperación en plataformas políticas multilaterales, como en los contactos y colaboraciones entre la Conferencia Permanente de Partidos Políticos de América Latina y el Caribe (COPPAL) y la Conferencia Internacional de Partidos Políticos Asiáticos (ICAPP). Antonio Cafiero jugó un papel muy importante en el inicio de este tipo de cooperación.
En un vídeo corto de CCTV News, el 6 de febrero del 2022, después de la reunión entre el Presidente Xi y el Presidente Alberto Fernández, en el momento de la despedida, Sabino Vaca Narvaja, miembro del PJ y Embajador de Argentina en China, dijo en chino al Presidente Xi: «Sin el Partido Comunista, no habría nueva China». Xi, sonriendo, dijo: «¡Bien dicho! Gracias por su apoyo». Esta expresión se refleja en el reconocimiento de los aportes que el PCCh ha brindado para la independencia, el desarrollo y la prosperidad de China, y la cooperación con China puede ofrecer oportunidades de crecimiento para Argentina y la región de América Latina.
Medio siglo
En 2022 cumplió el 50º aniversario del establecimiento de relaciones diplomáticas entre China y Argentina. Durante este medio siglo, la relación bilateral ha logrado un desarrollo considerable. En el siglo XXI, la relación bilateral alcanzó tres hitos históricos: en 2000, Argentina apoyó la entrada de China a la OMC; en 2004, durante la visita oficial del entonces presidente Hu Jintao, Argentina fue unos de los primeros países de América Latina en reconocer a China como economía de mercado; en 2014, ambos países establecieron la Asociación Estratégica Integral.
Desde entonces, se ha mantenido la cooperación económica y comercial bilateral en el comercio de bienes y servicios, como el turismo: Argentina ha sido votada como el mejor destino de América Latina por los chinos durante varios años consecutivos; la inversión extranjera directa; la construcción de infraestructura, los intercambios culturales y educativos, y en el ámbito tecnológico.
En términos de comercio, los dos países disfrutan de una alta complementariedad. La nueva normalidad de China y su desarrollo sostenible reflejan una demanda estable de productos argentinos. Por ejemplo, desde 2018, China ha comenzado a organizar la Exposición Internacional de Importaciones en Shanghai, manifestando su visión de ampliar y aumentar las importaciones de productos de todo el mundo.
En diciembre de 2020, la Secretaría de la Pequeña y Mediana Empresa y los Emprendedores (SEPYME), en colaboración con la Fundación ICBC Argentina, la Universidad Nacional de San Martín y la Universidad de Estudios Extranjeros de Beijing, organizaron una serie de seminarios web sobre la promoción del comercio entre China y Argentina.
Desafíos
Como países en desarrollo, tanto China como Argentina enfrentan el desafío de lograr un desarrollo sostenible en el nuevo contexto mundial, y el consenso en cooperación y comunicación asegura que los problemas de la relación bilateral puedan resolverse.
Los intercambios entre los dos partidos no solo ayudan a enriquecer y compartir experiencias en la construcción de mecanismos e instituciones internas, sino que también son beneficiosos para el intercambio de prácticas de gobernanza nacional. Estas interacciones resultan ser mutuamente beneficiosas en búsqueda de un desarrollo sostenible bajo el marco de la “Comunidad de Destino Compartido para la Humanidad”. «
* Catedrática, Vice Decana de la Facultad de Estudios Hispánicos y Portugueses de Universidad de Estudios Extranjeros de Beijing y autora de «Estudio sobre el Justicialismo de Argentina», único sobre el peronismo escrito en China.
Rubén Francisco Macrí | Socio
1 April 2024 - 14:01
Destinos comunes ante el mundo neoliberal