El cineclub CPAU funcionó durante 7 años en la sede a que alude la sigla que lo identifica: el Consejo Profesional de Arquitectura y Urbanismo. Como sucedió con muchas otras actividades, debido a la pandemia el funcionamiento del club hoy es virtual. El material fílmico que, tanto en su etapa presencial como virtual, está compuesto por documentales relacionados con la arquitectura y el urbanismo y también por algunas ficciones. Las exposiciones siempre son seguidas por un debate y una entrevista a un director, realizador o protagonista.

Los documentales pueden verse de manera gratuita en el canal de YouTube de la institución. Algunos precisan inscripción previa por un tema de cupo.

Este año, el ciclo de proyecciones abrió el 24 de julio con la proyección de Método Livingston. La programación abarcará también los meses de agosto y septiembre.

El ciclo de proyecciones comenzó en 2012, con la coordinación de Ezequiel Hilbert, quien dialogó con Tiempo Argentino.

-¿Cuál fue el origen de este espacio?

-Comenzó por una iniciativa mía. Yo venía de hacer otros ciclos de cine y como por vocación me dedico a hacer documentales de arquitectura y, por supuesto, también a ver cine de este tipo. Yo trabajo en docencia, en la Maestría de periodismo documental en la UNTREF y también trabajo en la UBA. Por lo tanto, estoy muy en contacto con el cine documental y el documental arquitectónico es lo que más me interesa. En 2012 comencé con CPAU. Poco a poco empezaron a venir siempre los mismos espectadores y se transformó en un cine club. El proyecto fue creciendo a través el tiempo y para este año teníamos una programación muy buena. En el CPAU cada vez le fueron prestando mayor interés y le otorgaron más presupuesto y así pude acceder a más películas. Siempre hablo con los directores, se les pagan los derechos o se les ofrece hacer el subtitulado a cambio de los derechos de reproducción.

En este ciclo arrancaron con Método Livingston.

-Sí, es una película muy linda hecha por Sofía Mora que trabaja siempre con Néstor Frenkel y, además, son una pareja. Rodolfo Livingston es una leyenda de la arquitectura argentina por su mirada social. A diferencia de la visión de muchos otros arquitectos, su visión sobre la arquitectura es mucho más humana. Su práctica está basada en la arquitectura hogareña, en las reformas, en el día a día del hogar. Y eso es algo muy lindo no sólo en el campo de la arquitectura, sino también para comunicar. Además, tiene una personalidad muy especial. A la película le fue muy bien, tuvo muchos espectadores que podían participar con mensajes. Fue muy lindo, porque muchos de los que hablaban eran quienes solían ir al cineclub presencial.

-¿Qué aspectos de Livingston toma la película?

-Lo acompaña en su vida cotidiana y tiene momentos muy interesantes como cuando habla con una familia que le cuenta su intimidad para establecer lo que necesitaban modificar de su casa. Había una chica que necesitaba un cuarto grande para poder poner una cama doble para cuando se quedaban sus novios a dormir. La cámara registra en ese momento de qué forma Rodolfo arma sus proyectos, cuál es su proyecto creativo. También aparece un amigo de él, un gran pensador. Se encuentran y hablan de la vida y de la arquitectura. También aparecen algunos clientes que cuentan cuál fue su experiencia con él. Además, muestra su experiencia en Cuba. Él dice que cuando todo el mundo se estaba escapando de la isla, él estaba llegando. Viajó solo en un avión. Allí descubrió su método porque los albañiles le proponían cosas que estaban ligadas a su acervo, a su cultura. Quizá hubiera querido ver más obras de él, pero yo hice un película referida a Salamone y hay gente que me dice lo mismo. A veces una elige concentrarse más en algunos aspectos y dejar otros en segundo plano.

-Hoy se proyecta una película sobre, Tudo e projeto, sobre la vida del arquitecto brasileño Paulo Mendes de Rocha.

-Sí, es uno de los más importantes del mundo y el mayor arquitecto vivo de Brasil. Nació en 1923 y es alguien que tiene escuela, que hace una arquitectura muy interesante. Pertenece a la familia de los documentales que hacen los hijos de los arquitectos. Quien dirige el documental es su hija Joana a lo largo de diez años. Son entrevistas que ella le hizo durante todo ese tiempo a través de las cuales se muestra su vida y su obra. Para mí la mirada de los hijos resulta siempre muy interesante.

-La que se proyecta el viernes 21 a las 19 es tuya y está referida a Salamonie, ¿no es asi?

-Sí, mi película es el retrato de una obsesión. Durante 6 años me dediqué muchísimo a investigar con un gran compromiso con las fuentes, con la verdad. Salamone no era arquitecto, sino ingeniero civil. Durante varios años trabajó como un arquitecto fabuloso y luego se dedicó al pavimento y las obras viales. En sus mejores años hizo una obra brutal, enorme, por lo que estamos buscando un Guiness Record para él. Se murió sin dejar nada escrito, sin decir cuáles eran sus obras. Hoy hay muchos mitos sobre él y se siguen descubriendo obras que construyó y que no estaban registradas. El mito más fuerte que existe sobre él es que era fascista. Yo mismo comencé a hacer mi película sobre el arquitecto fascista. Se decía que era fascista por su relación con el gobernador Manuel Fresco que le encargó muchas obras. También se habla del hombre oscuro que hacía mataderos y cementerios.

-¿Y tu investigación para la película lo desmiente?

-La verdad es que Salamone no aparece con Fresco casi en ningún lado, salvo en algunas fotos que encontré. Además tengo el testimonio de una persona cuyo padre era camisa negra y que asegura que Salamone no era fascista. La verdad absoluta no se va a saber, pero yo me encontré con una parte de la verdad.

-La monumentalidad de sus obras en el medio de la pampa absolutamente horizontal quizá alimentó esa idea.

-Sí, la monumentalidad habla del rol del Estado y ahí Fresco y Salamone sí van de la mano.

-Juan Forn publicó una nota sobre él que creo que contribuyó mucho al descubrimiento de Salamone.

-Sí, yo leí esa nota y me hice “salamónico”. Había escuchado hablar de él en la facultad de arquitectura donde estudié muchos años sin recibirme de arquitecto. El tema de Salamone me quedó picando y cuando leí la nota de Forn salí a ver sus obras y a las fotos que se expusieron en la galería del San Martín.

Programación

Viernes 7 de agosto a las 19 horas: Tudo é projeto

Viernes 21 de agosto a las 19 horas: Mundo Salamone

Viernes 4 de septiembre a las 19 horas: Puerto Madero I y II

Dónde: Youtube/cpauorg

Entrada: libre y gratuita

Informes: [email protected]