La implementación del Plan Bandera en la provincia de Santa Fe fue una de las primeras medidas que tomó el gobierno de Javier Milei. Tras el desembarco de las fuerzas federales en el territorio, se registró una merma de más del 60% en los homicidios dolosos. Sin embargo, la violencia desatada solo en la ciudad de Rosario y sus alrededores en las últimas 24 horas pone en duda el éxito del programa del ministerio de Seguridad.
Hace poco más de un mes, Tiempo dialogó con el periodista y diputado provincial por el Frente Amplio por la Soberanía, Carlos del Frade, quien concluyó que más allá del descenso en las estadísticas de la violencia callejera, las bandas narcos habían crecido. Para el especialista se da un doble fenómeno en simultáneo: “la reducción de los homicidios en un 65%, y por el otro lado la dispersión de bandas, de pandillas, que van apareciendo permanentemente porque el negocio continúa”.
Los cinco casos
Entre el domingo y el lunes, hubo cinco asesinatos mafiosos en Rosario y la región. El último de los crímenes, ocurrió a las 21 del lunes, en el barrio de La Tablada, cuando al menos dos hombres llegaron en un auto y le dispararon no menos de 12 disparos a la víctima, de 57 años, identificada como José Miguel Herrera González, de nacionalidad chilena que había ido al kiosco a hacer unas compras.
El domingo por la tarde, en Villa Banana, una familia que tomaba tereré a la sombra de un árbol terminó con tres de sus integrantes asesinados y dos heridos, tras ser acribillados a balazos en el playón municipal. Unas horas antes, otras cinco personas habían sido baleadas en las inmediaciones. Ambos ataques fueron cometidos en moto.
El domingo por la noche, en Empalme Graneros, fue ejecutado de un balazo en la cabeza Lautaro Joel Álvarez, de 18 años. El lunes por la mañana, los allegados de la víctima prendieron fuego el auto del supuesto homicida.
Todos estos episodios estarían vinculados con el narcotráfico y con la venta de drogas en pequeña escala. Cabe destacar que por el triple crimen de Villa Banana, los investigadores detuvieron a cuatro sospechosos.
“Nos hay que dormirnos”
El ministro de Justicia y Seguridad de Santa Fe, Pablo Cococcioni, se manifestó en torno al nuevo baño de sangre en las calles rosarinas: “No hay que dormirnos en esto, hay que seguir atacando para neutralizar a todos los que hoy están provocando hechos de violencia”, expresó.
«Evidentemente hay un problema serio de violencia que desde el Estado no podemos permitir», aseguro el funcionario, quien añadió que «esto demuestra que hay que avanzar de manera más agresiva”.