La empresa Cargill suspendió desde este jueves y por el plazo de diez días la operación de sus dos plantas de molienda de granos ubicadas en la localidad de Villa Gobernador Gálvez, provincia de Santa Fe, y en Bahía Blanca, en el sur bonaerense.
Desde el ámbito sindical, el gremio enmarcó la medida en un «lock out patronal», en tanto, del lado de la empresa, en los accesos a ambas plantas, los trabajadores encontraron esta mañana un cartel que señalaba que, a raíz de «la reanudación de los paros intermitentes e irregulares» y de «manifestaciones de amenazas», no estaban dadas las «condiciones de seguridad» para operar, con lo cual se disponía una suspensión de las tareas por un plazo de, en principio, diez días.
En declaraciones formuladas a Télam, el prosecretario general del sindicato Obreros y empleados Aceiteros de Bahía Blanca, Diego Márquez, aseguró que la medida constituye un «lock out patronal por diez días sin goce de sueldos».
«Por cuestiones de mantenimiento, según nos habían dicho, la fábrica hacía 24 horas que no operaba y, cuando fuimos a trabajar, nos dijeron que se suspendieron las actividades en la empresa», relató el dirigente sindical.
En este sentido, confirmó que el argumento de la empresa para disponer la suspensión de las tareas fueron las medidas de fuerza que los trabajadores estaban desarrollando «para defender compañeros que fueron despedidos».
«Vamos a hacer una denuncia ante el Ministerio de Trabajo por el lock out patronal», anticipó Márquez, quien precisó que en la planta de Cargill en Ingeniero White se desempeñan 87 trabajadores.
El gremialista comentó además que, cuando fueron a trabajar, encontraron en la puerta un cartel que comunicaba la decisión de la empresa.
En el texto, sin logo ni membrete, se señalaba que «la reanudación de paros intermitentes e irregulares y de duración variable, durante distintos momentos del día y en diferentes áreas de trabajo, unido a las manifestaciones de amenazas sufridas dentro y fuera de las plantas y de violencia física y verbal fuera de las mismas por personal de la empresa, hacen que no estén dadas las condiciones necesarias para operar en un marco de seguridad física para las personas, ni para los equipos, instalaciones y procesos».
«Por tal motivo, se suspenden las operaciones en este establecimiento y, consecuentemente, la prestación laboral sin goce de haberes, a partir de las 7 del 19 de abril del 2018 y en principio hasta las 7 del 29 de abril, oportunidad en la cual deberán presentarse a trabajar en sus distintos horarios de ingreso de acuerdo al cronograma de turnos que corresponda», agrega el comunicado pegado en el ingreso de la planta de Ingeniero White y también en la de Villa Gobernador Gálvez.