La historia de las películas de aventuras espaciales está a punto de dar su propio pequeño paso, pero que constituirá un salto monumental para la industria del cine. Es que Tom Cruise, una de las estrellas más grandes del Hollywood contemporáneo, ha decidido unir fuerzas con Elon Musk, uno de los hombres más ricos del planeta, para crear la primera película de acción y ciencia ficción filmada fuera de nuestro planeta. El film, que todavía no tiene nombre y del cual ni siquiera se conoce la trama, tendrá como escenario la Estación Espacial Internacional (ISS, por su sigla en inglés) y contará además con el indispensable apoyo de la NASA. Es que sin la experiencia y la infraestructura de la agencia espacial de los Estados Unidos todo el proyecto sería imposible de llevar a cabo.
Aunque la noticia la dio a conocer hace un mes el portal del espectáculo Deadline.com, recién ahora la extravagante iniciativa tiene también un director a cargo. Se trata del estadounidense Doug Liman, cuya filmografía acumula unos cuantos títulos que justifican su elección. Entre ellos se destacan Identidad desconocida (2002), la primera y estupenda película de la saga del espía amnésico Jason Bourne, y el film de ciencia ficción Al filo del mañana (2014), protagonizado por el propio Cruise junto a la actriz Emily Blunt.
La sociedad entre el actor y el magnate de la tecnología parece perfecta para encarar con éxito un proyecto semejante. En primer lugar porque Musk es uno de los millonarios que más invierte en el intento de llevar el progreso tecnológico más allá de sus límites. De origen sudafricano, Musk construyó su fortuna en base a arriesgar de forma permanente en negocios que desafían las lógicas del mercado. Socio fundador de la empresa de pagos online PayPal, de la automotriz Tesla, fabricante de los primeros autos eléctricos de alta gama, y de la ahora famosa SpaceX, con la que acaba de poner en órbita a la Crew Dragon, primera nave tripulada enviada al espacio con financiación de una empresa privada. Físico de carrera, Musk es además uno de los diseñadores de la Crew Dragon. Cualquier parecido entre él y Tony Stark, el millonario de ficción que tiene una doble vida como el superhéroe Iron Man, no es pura coincidencia.
Más allá de todas estas confirmaciones y detalles de alto impacto mediático, el proyecto aún se encuentra en una etapa inicial, por lo cual su concreción demanda todavía de innumerables y complejos pasos. Entre ellos, asegurar la participación de alguno de los grandes estudios de Hollywood, ya que ninguno todavía ha anunciado respaldar una inversión de tanto riesgo. Por otra parte los involucrados tienen por delante unas cuantas prioridades antes de meterse de lleno con esta película.
Por el momento Musk se encuentra muy atareado, monitoreando que todo salga bien en la misión Crew Dragon, que ayer se acopló con éxito a la mencionada ISS, donde los dos astronautas de su tripulación permanecerán entre dos y tres meses antes de regresar a la Tierra. En tanto que Cruise y Liman tienen varias películas por delante. El actor prepara la presentación de Maverick, secuela de la exitosa Top Gun, cuyo estreno fue reprogramado para fin de año debido a la crisis causada por la pandemia de covid-19. Y a continuación se dedicará a rodar la séptima entrega de la exitosa saga Misión Imposible. Debido a las demandas de su propia agenda, es muy probable que para cuando por fin pueda encarar esta aventura de filmar en el espacio, Cruise ya tenga más de 60 años.