Los 38 diputados y diputadas del bloque de La Libertad Avanza se reunirán este martes luego del receso invernal. Suelen hacerlo a la hora del crepúsculo y es posible que en esta oportunidad vuelvan a elegir ese horario, pero será sin asesores, debido a la sensibilidad del temario y los entripados que acumula. El encuentro será el primero luego del escándalo que sacude al bloque desde que seis integrantes de la bancada fueron al penal de Ezeiza, en una camioneta de la Cámara Baja, para visitar a condenados por delitos de lesa humanidad, entre los que estaba el exmarino Alfredo Astiz. 

Desde hace tres semanas se respira un estado asambleario en el bloque que preside el cordobés Gabriel Bornoroni. El disparador fue la visita que realizaron seis diputados al pabellón de «lesa» de la cárcel federal y las consecuencias todavía no se han cristalizado. Aunque la incursión fue realizada en un vehículo oficial, el titular de la Cámara Baja insiste que no estaba al tanto, pero igualmente prefiere no hacer nada al respecto. Sin embargo, una parte de sus compañeros de bloque considera que la incursión fue un error y no lo quieren convalidar. Otro sector está dispuesto a respaldar alguna instancia disciplinaria y dos de los seis visitantes consideran que fueron engañados por su colega entrerriano Beltrán Benedit, que organizó la visita, pidió la camioneta pero no les habría dicho el cometido del recorrido con destino final en el penal de Ezeiza.

El bloque de Unión por la Patria quiere armar una comisión investigadora para sancionar a los visitantes, en el marco del artículo 188 del reglamento y el 66 de la Constitución que habilita la suspensión. El primero en plantear que estaba dispuesto a acompañar la propuesta del peronismo, fue el diputado puntano de LLA, Carlos D’Alessandro, que repudió la recorrida. En la reunión de este martes se esperan sus críticas, pero no será el único. Su colega santafesina, Rocío Bonacci es parte del grupo de visitantes y sostuvo que fue «engañada» por Benedit. En una entrevista que le concedió al programa Jacke Mate, transmitido por Cablevisión Rosario, dijo que la convocatoría había sido pensada para conocer las condiciones de las cárceles, pero que cuando estaba llegando al penal se enteró del cometido de la visita. No solo se despegó. También sostuvo que Menem y la Casa Rosada estaban al tanto y se mostró a favor de crear la comisión para deslindar responsabilidades. Ella contó que les había advertido que «se iba a armar lío» y que no «comulga con las ideas» del organizador del viaje.

Además de Benedit y Bonacci, también se subieron a la camioneta los diputados de LLA Guillermo Montenegro, María Fernanda Araujo, Alida Ferreyra y Lourdes Arrieta, que recién habría caído en la cuenta del lugar donde estaba cuando se comunicó con su padre excombatiente de Malvinas. En ese momento la diputada mendocina, de confesión evangélica, vivió la misma incomodidad que Bonacci. 

Este lunes un rumor comenzó a recorrer distintos despachos. Distintas autoridades legislativas no ocultaron su sorpresa cuando supieron una propuesta de la diputada Marcela Pagano, que también forma parte del bloque oficialista. Le planteó a otros espacios que lleven una ofrenda floral a la Iglesia de la Santa Cruz, en el barrio porteño de San Cristóbal, para desgraviar a las monjas francesas Leonie Duquet y Alice Domon, que fueron secuestradas en diciembre de 1977 por el Grupo de Tareas 332, donde estaba Astiz. Luego fueron torturadas en la ESMA y desde entonces están desaparecidas.

Ante las consultas de Tiempo, cerca de Pagano eligieron el silencio, pero los bloques que recibiero la propuesta confirmaron su existencia. La idea muestra el nivel de discusión interna en el bloque, pero también significa una desautorización para Menem, que está empeñado en evitar que el escándalo prospere. Falta una semana para la sesión del 7 de agosto y la discusión de este martes en el bloque oficialista anticipa que el escándalo podría escalar con velocidad en los próximos días.

El oficialismo tenía 41 bancas hasta abril, cuando se desató otro escándalo por la presidencia de la Comisión de Juicio Político. Fue electa Pagano y Menem buscó anular la reunión. La controversia derivó en la expulsión de Oscar Zago como presidente del bloque de LLA. El legislador se fue del bloque y armó el espacio «Movimiento de Integración y Desarrollo» junto a otros dos colegas. El espacio sólo tiene tres bancas, pero impulsa el armado de un interbloque con el PRO y LLA para contener una diáspora que ya está en pleno desarrollo.

El interbloque que propone Zago no es la idea que cocina la Casa Rosada para cruzar a LLA con el PRO. Sin embargo cuenta con el respaldo del titular del bloque amarillo, Cristian Ritondo. Sin romper, el MID podría contener a los malheridos del bloque que preside Bornoroni y el escándalo con Astiz podría acelerar los tiempos. Pagano estaría dispuesta a pegar el salto, pero cuando el interbloque esté listo.

El origen de la incursión que organizó Benedit también genera desconfianza entre los demás diputados oficialistas. La idea de conocer las condiciones en las cárceles surgió como una forma de abordar el debate para bajar la imputabilidad juvenil. Sobre esa inquietud  Benedit promovió el recorrido por Ezeiza y se encargó de pedir la logística. Hasta ahora dos de los seis visitantes sostienen que no les explicaron a quiénes iban a ver. Es el caso de Arrieta y Bonacci, que posiblemente ampliará en la reunión los detalles que contó este sábado a la televisión rosarina. Además de Astiz, la comitiva de seis legisladores oficialistas visitó a los condenados por crímenes de lesa humanidad Ricardo Cavallo, Raúl Guglielminetti, Carlos Suarez Mason, Gerardo Arraez, Honorio Martinez Ruiz, Agustin Oyarzabal Navarro, Juan Manuel Cordero, Mario Marcote, Miguel Angel Britos, Adolfo Donda y Antonio Pernias.