El Banco Central perdió 1755 millones de dólares de sus reservas este viernes, con lo que las divisas en custodia de la autoridad monetaria cayeron en casi 4000 millones de dólares sólo en los últimos cinco días.

Según la información proporcionada por el BCRA, las reservas alcanzaban a 43.503 millones de dólares este viernes. La semana financiera arrancó el lunes pasado con 47.448 millones de dólares en las reservas.

Las reservas caen porque se acentúa la demanda de dólares, en un cuadro en el que el Banco Central es el único oferente.

El sector privado también debería liquidar dólares de las exportaciones que realiza. Así quedó estipulado el 1 de septiembre, cuando el Banco Central impuso plazos reducidos para que las empresas realicen esas ventas. Sin embargo, entre los operadores hay consenso en el sentido de que esas divisas no aparecen.

La brusca baja de las reservas es un tema candente en los días previos a las elecciones generales de este domingo. En el gobierno aseguran que hay contactos “permanentes” entre el equipo económico de la administración macrista y el de Alberto Fernández.

En tanto, en las oficinas de Fernández se despegan de la especie y aseguran que se enteraron “por los diarios” de las últimas decisiones económicas y financieras del gobierno.

Lo cierto es que una reducción de las reservas en el nivel de este viernes –y en el acumulado ya que desde las PASO se perdieron 22 mil millones de dólares- golpea tanto al actual gobierno como al entrante.

En cualquier caso condiciona la capacidad de decisión de ambos ya que quienes tienen los dólares y no los liquidan o aquellos que impulsan la corrida cambiaria contra el peso pueden imponer condiciones a cambio de que aparezcan los dólares o amaine la demanda.

A pesar de la dilapidación de reservas por parte del Banco Central para sostener el valor del dólar, su precio subió este viernes a 65 pesos desde 63,34 del día anterior.

Con todo, la excepcionalidad de esta última semana superó todas las medidas del Banco Central. El dólar arrancó la semana en $60,73 lo que marca una suba del 7 por ciento en estos últimos cinco días.

En el gobierno aseguran que la intervención de la entidad que dirige Guido Sandleris en el mercado cambiario obedece a la necesidad de darle “estabilidad” a la cotización del dólar ya que su suba genera inflación y trastoca la relación entre todos los precios de la economía.

Pero, también es cierto que esa estabilidad con libertad de giros de dólares al exterior es un aliciente para la fuga de capitales ya que contiene el encarecimiento del valor del dólar medido en pesos.

Este escenario plantea serios interrogantes sobre qué pasará con el valor del dólar este lunes 28, tras las elecciones. Para algunos analistas, los inversores y especuladores ya descontaron un triunfo en primera vuelta de Fernández. Y agregan que la comunicación entre Macri y Fernández en la noche del domingo, más las decisiones que se tomen en consenso, podrían llegar a calmar la fuga.

A la luz de lo que sucedió este viernes, parece difícil que los inversores y especuladores apuesten de nuevo al peso, al menos por los próximos días.