«Generalmente me dicen rubio. Fue muy loco porque le puse al espectáculo Un rubio peronista hace ocho años y, con el paso del tiempo, muy pocos saben que me llamo Gustavo: casi todos me llaman por el nombre del espectáculo. Siempre jodo y digo que soy la Mimí Maura del stand up». Berger (Gustavo) acaba de presentarse en un párrafo con la destreza de todo gran standapero: dijo su nombre, el nombre que lo define y el del espectáculo que lo convirtió en un destacado en el rubro, y como si fuera poco enseña que no es el único caso en el que el público bautizó a un artista: es lo más común del mundo creer que Mimí Maura es el nombre con el que nació la cantante Midnerely Acevedo.

Una vez hecha la introducción, el rubio Berger vuelve a contar la historia que sus seguidores ya conocen: a la primera función fueron 40 personas, pero en la tercera había sólo 12, y cuando estaba por dar las hurras el sistema a la gorra que había implementado empezó a ofrecer los resultados buscados: «Creo que fueron algunas de las primeras plazas, a las que iba en mi calidad de militante, en las que me di cuenta de que funcionaba: la gente se acercaba y empezaba a pedirme fotos, algo que hoy todavía me parece muy loco: que alguien quiera una foto conmigo. Y después algo que me sorprendió mucho fue cuando fui a ver a Marilina Ross con mi mamá –que a ella le encanta– y me dice: ‘Ah, yo te vi en la tele’. Justo había estado en 6,7,8 y fue fuerte que alguien que de chiquito siempre veía en el escenario de pronto supiera quién era yo».

Berger y otros desmienten esa idea hoy instalada de que el stand up filoperonista haya surgido durante el macrismo. «Cuando lo estrené fue netamente por una necesidad de expresar mis ideas. Yo ya venía haciendo humor en bares y en eventos empresariales, que es lo que hacemos casi todos los humoristas cuando empezamos. Fue una apuesta y creo que lo que tiene es que es genuino lo que cuento que me pasa. Por eso también hay críticas a nosotros mismos, aunque siempre desde una posición ideológica clara. Sentía que tenía que tomar posición para defender algo que creía que valía la pena y que lo estaban atacando sectores poderosos. El humor es una forma de defender convicciones. Y la gente que venía al espectáculo venía en esa sintonía también. A partir de que ganó Macri la gran diferencia es que la gente vino a hacer catarsis, se convirtió en un espacio en el que nos juntábamos entre pares a descargar las broncas de lo mal que nos estaba haciendo el gobierno. Y, obviamente, hacer humor contra un gobierno es mucho más fácil. También se sumó gente que no era del palo, por llamarlo de alguna manera. Antes venían sólo los peronistas en cofradía».

Y así como influyen los tiempos políticos, también lo hacen los culturales y sociales. «Hoy por hoy, el trap y el rap toman el lugar de aquellos cantautores de protesta, cuentan lo que pasa, y en la comedia surgió el stand up como posibilidad de expresar con humor lo que nos pasa». Y el hecho de que ahora «muchos estén haciendo grandes teatros», para Berger, indica que el género está en su mejor momento. «Un poco obedece a que la gente busca más reírse con algún tipo de contenido», y a la propia evolución del género, que ya lleva casi 20 años: «Cuando arrancó nos conocíamos todos, íbamos a todos los shows de los colegas, y hoy veo a pibes y pibas que ni conozco. Y varios están muy bien y traen cosas nuevas».

Cosas nuevas que incluyen el cambio en el humor por cuestiones culturales, en especial las relacionadas con el género. «Estoy cómodo con los tiempos que corren y lo celebro –define–. A veces reviso materiales para atrás y digo: esto no lo podría hacer hoy. Por ejemplo, cuando tenía 20 años hacía un monólogo en el que cuestionaba las excusas que ponían las chicas para no bailar con uno. Y con el tiempo y gracias a la lucha del movimiento feminista terminamos entendiendo que no es no, y si vos no querés bailar conmigo no tengo por qué cuestionarte. Una vez que lo entendí, ese material dejó de parecerme gracioso».  « 


¿Cuándo?

Un rubio peronista despide el año con «Volvimos». Viernes 27 y sábado 28, a las 21; domingo 29, a las 20. Hipólito Yrigoyen 4265.