No hay tiempos para la salida de un disco, pero desde la primera canción a la última, Retrato de familia, de Teresa Parodi parece llegar en el momento justo. El álbum, que tiene una impronta colectiva y del que participa no sólo su familia de sangre sino también su familia musical, está disponible desde hoy en las plataformas digitales y desde el 18 de diciembre en las disquerías.
“Yo creía que mis nietos no escuchaban mis canciones”, dice Teresa Parodi frente a un grupo de periodistas y amigos que asistieron a la escucha del disco. Cuenta que son temas profundos que atraviesan su historia y la de su familia. “Si no es colectivo no se puede hacer, no puedo pensar la música de otra forma”, agrega la cantautora. Y recuerda uno a uno a quienes participaron de este disco, desde los músicos a la producción.
En el álbum editado por Sony Music, además de los músicos estables que acompañan a la correntina, Juan Manuel Colombo en guitarra, Fernando Correa en acordeón y Facundo Guevara en batería y persecución, aparecen las colaboraciones de sus familiares. Camilo Parodi (bajo), Emilia Parodi (piano, teclados, sintetizador y arreglos), Ezequiel Parodi (guitarra) y Lautaro Parodi (guitarra, ronroco y charango) Federico Parodi (guitarra eléctrica), Luciana Parodi (coros), Joaquín Parodi (saxo).
La producción musical estuvo a cargo de Manu Sija. Y también están los coros de Amanda Linares y la guitarra de Juan Falú.
Del paisaje al ser humano
La voz de Teresa es una de las voces referentes de nuestra música popular. Su tonada correntina no se ha perdido y es el hilo que hilvana cada melodía desde la más profunda sensibilidad. También sigue intacta su poética, ligada a la esencia humana, al contacto con su tierra y a las luchas de su pueblo.
“Vengo de tus humedales, tierra mía dónde iré si no llevo en mi guitarra tu selva de verde piel”, dice Teresa en “Flor abierta”, el primer tema del disco que se planta como una anticipación de todo lo que queda por escuchar.
Le sigue “Paisaje”, un chamamé que, afirma, “brotó de manera casi espontánea como estampidos de letra y melodía que irrumpieron y los dejé hacer”.
La voz inconfundible de Fernando Barrientos es la primera que aparece en el disco representando a los invitados. “Vidala del amor sincero” emociona desde las primeras melodías, pero golpea cuando los versos unen en forma única las voces de Parodi y Barrientos.
El espíritu de lucha femenino
Casi como una proclama, “Donde quieran que van”, es uno de los cortes del disco que se conocieron en noviembre. Se trata de una canción celebratoria de la lucha del movimiento de mujeres y el recuerdo, según ella lo dijo, de sus referentas y recuerda a Mercedes Sosa, María Elena Walsh, Violeta Parra y Ramona Galarza.
De la mayor representante del chamamé, Parodi recupera la anécdota en la que “la novia del Paraná” recibió la propuesta de parte del productor Fernando López, de cantar otros géneros que “vendían más”. Cuenta que Galarza se levantó y se fue diciendo que entonces no era ella. “Escuché eso en una entrevista que le hicieron a Ramona, ahí pensé que si ella podía yo también tenía que poder”, reflexiona Teresa y menciona el machismo que reinaba en el mundo del chamamé.
Esas mujeres se reflejan en los versos de la canción, pero también en sus invitadas: ttiene la participación de Lula Bertoldi, Ivonne Guzmán, Nadia Larcher, el grupo de cantoras Otra Ronda y la uruguaya Ana Prada, que completan un coro fuerte y conmovedor.
Retratos de mujeres y sus historias
“Este disco no es ‘pum para arriba’”, comenta sonriente Parodi. “Hay temas fuertes, como ‘La mamadre’, ése les aviso…”, agrega. La canción, donde el piano y el violín son los protagonistas toma el término de Pablo Neruda, que solía llamar de ese modo a su madrastra.
No es casual la aparición de la figura femenina en el tema cinco del disco, que le da paso a “Siempre viva”, un hermosísimo homenaje a Hebe de Bonafini, una de nuestras Madres de Plaza de Mayo, presidenta de la Asociación Madres de Plaza de Mayo que murió el 20 de noviembre de 2022.
Para este homenaje, como no podía ser de otra manera, Teresa eligió a sus compañeros de años de ruta y travesuras musicales como lo son León Gieco y Victor Heredia. “Ellos no necesitan que los presente”, comenta la correntina entre risas.
Con aire de tonadas, la zamba “Cantinga Dominga”, se abre paso como un retrato necesario de mujeres solitarias y luchadoras. “Es un tema inspirado en una mujer que luchaba contra sus penas. Surgieron de experiencias vividas”, explica Teresa en la gacetilla de prensa que acompaña la presentación del disco.
Luego, se abre paso “Canción para un solo acorde”, un tema que irrumpe con cadencia rioplatense y funciona como el pase perfecto entre la historia de Dominga y la de la canción siguiente: “Los dos solitos”.
Teresa recuerda a su amiga Mercedes Sosa y a Fabián Matus, el hijo de la cantora tucumana. Cuando murió Fabián, el periodista Mariano Del Mazo tituló su nota en Página 12, “Los dos solitos” recordando la anécdota que el mismo Fabián cuenta en el libro La Mami, publicado en 2016. “Estamos vos y yo solos, Fabiancito. Vos tenés que hacerte cargo de tus cosas porque estamos los dos solitos”, le dijo la cantora a su hijo el día que se separó de Oscar Matus.
“Leí esa nota y me quedé con el título”, cuenta por su parte, Parodi. La canción, musicalizada por Popi Spatocco está en el disco Mercedes Florecida interpretada por Nahuel Pennisi y Nadia Larcher. “Pero yo también la quería cantar”, dice Teresa respecto a la inclusión del tema en Retratos de familia.
La guitarra de Juan Falú, otro tucumano que acompaña la vida musical de Parodi, abre paso a las últimas canciones del nuevo disco de Teresa con “Zamba para Natalia”. Luego le siguen “Canción con luna”, una bonita composición que llega acompañada de la voz de la colombiana Marta Gómez.
Un disco que es refugio
“La música es el retrato de nuestra familia; atravesó generaciones, se volcó hacia distintas formas, pero es sin duda nuestro lenguaje común, el idioma en el que hacemos pie. Retrato de familia es más que un disco para mí: es un encuentro circular entre mis canciones, mis hijos, nietas, nietos y todas las personas amorosas que hacen posible mi música y que por eso también son mi familia”, consigna Teresa en la gacetilla de presentación.
Para el cierre de Retratos de Familia, eligió, “Quiero la vuelta”, que tiene como protagonista un hermoso solo de saxo de su nieto Joaquín. “Que quede claro que quiero la vuelta”, dice entre risas hacia el final la cantautora.
“Les dije que no era un disco ‘pum para arriba’”, comenta Teresa. Desde el fondo, Sergio Ponfil, representante de Sony Music la corrige: “es pum para adentro”. Y es cierto.
“Las reuniones familiares son esos estallidos, a veces hechos de silencio, donde encontramos refugio. En nuestro caso, siempre está ese momento sagrado en el que aparecen las guitarras y nos ponemos a cantar”.
Retratos de familia recupera no sólo la tradición musical y poética de un país que parece roto. La escucha colectiva en ese martes caluroso y pesado fueron un refugio. Diciembre nunca es fácil en Argentina. Por eso, este disco llega en el momento justo en el que la voz clara y de brillante interpretación de Teresa, los arreglos y su sonrisa honesta de tarea cumplida (una vez más) nos invita a transitar nuestra humanidad a recuperar nuestras propias musicalidades.
El disco se puede escuchar en forma digital desde hoy en YouTube o en Spotify y desde el 18 de diciembre se puede conseguir en las disquerías en formato físico.
