A lo largo de más de cuatro horas, el presidente ruso respondió miles de preguntas que llegaron de todo el mundo a su Línea Directa, la conferencia anual que ofrece un balance público de su gestión. El nudo de esta ronda de respuestas de Vladimir Putin estuvo centrado en Ucrania, como era de esperar, y en el Medio Oriente. Lo destacable es que mientras el mandatario hablaba en Moscú, había un notable cruce de drones y misiles, sobre Kiev, y sobre Kazan, Belgorod, Vorónezh y Kursk. Y a la vez, Tel Aviv sufría un ataque lanzado desde Yemen, lo que representa una escalada bélica con artefactos teleguiados que marcan la guerra de esta nueva generación. De allí que Putin desafiara a «un duelo de alta tecnología» para probar si los sistemas de defensa de la capital ucraniana pueden detener un bombardeo con la última joya de su arsenal, los misiles hipersónicos Oreshnik.
«Veremos qué sucede. Estamos listos para un experimento así. ¿Está lista la otra parte?», dijo Putin en un tramo de ese agotador encuentro televisado. El presidente aprovechó para protestar porque no hubo condenas al acto terrorista que terminó con la vida del general Igor Kirillov y por el que hay un detenido por haber colocado la patineta donde estaban los explosivos. También señaló que está dispuesto a negociar un acuerdo de paz con Ucrania. Los términos no cambiaron desde los que estableció al inicio de la guerra, pero ahora dice que la otra parte debe tener un presidente con mandato legal. Es que el período constitucional de Volodimir Zelenski terminó en mayo y no convocó a elecciones por el conflicto bélico. Por las dudas, afirmó que no tendría problemas en tratar con Zelenski, siempre y cuando sea votado en comicios libres.
Al tiempo que las fuerzas rusas van tomando más territorio en el Donbass, el Ministerio de Defensa dijo que habían sido interceptados drones ucranianos sobre varias regiones. El aeropuerto de Kazan y el de la ciudad de Sarátov estuvieron cerrados por cuestiones de seguridad. En uno de los ataques, sobre la ciudad de Rilsk, murieron seis personas, entre ellas un niño, informó el gobernador Alezandr Jinshtein. El embajador ruso en la ONU, Vasili Nebenzia, dijo que “nuestra reacción a este crimen no va a tardar en llegar”.
Una persona murió y otras 12 resultaron heridas en Kiev en lo que Moscú definió como un bombardeo masivo sobre instalaciones energéticas en respuesta al ataque con misiles de fabricación estadounidense y británica contra la región de Rostov. Entre otros objetivos, fue atacada una estación de la CIA en esa ciudad, informó la agencia TASS.
No tan lejos de allí, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) informaron que hubo un saldo de varias personas heridas por la caída de un proyectil disparado desde Yemen. “Se hicieron intentos infructuosos de interceptarlo”, reconocieron las autoridades. Especialistas que se basan en los videos posteados en las redes sociales afirmaron que, por la velocidad de caída, sería un misil hipersónico Fattah-1 iraní.
Las fuerzas hutíes de Ansar Alá, junto con el palestino Hamás, el libanés Hezbollah y las milicias proiraníes de Irak y Siria, integran el Eje de Resistencia contra el Estado de Israel, fuertemente golpeado por la caída de Bashar al Assad y la toma del poder en Damasco por los yihadistas. «