Cinco trabajadores que integran la Comisión Interna de Laboratorios Craveri fueron detenidos este miércoles por la Policía de la Ciudad. Se trata de Horacio Wassermam, Darío Fonticelli, Walter Benítez, Facundo Gutiérrez y Martín Mendoza, quienes se encontraban realizando una medida de fuerza por 47 despidos dentro de la empresa. Seis horas después fueron liberados.
Minutos antes de la detención, el delegado Wasserman había denunciado la situación en el programa radial La mañana con Victor Hugo: «Esto sucede en un contexto económico complejo, donde los trabajadores estamos siendo las principales víctimas del ajuste para maximizar las ganancias de de la patronal». El trabajador denunció también que el dueño de la firma, Juan Craveri, hizo circular una comunicación interna donde explicaba que eran ellos quienes impedían el funcionamiento normal de la empresa: «Se nos acusa de romper el mobiliario y por tal motivo a partir de la fecha no permitirán el ingreso de la representación gremial a la empresa».
El viernes pasado, la empresa envió los telegramas de despido, por lo que los trabajadores estaban con medida de fuerza desde el lunes 1 de abril. Los trabajadores detenidos fueron trasladados desde la sede de la empresa, en Arengreen 830, hacia la Comisaría 6° de Caballito.
El recorte, de acuerdo a la información obtenida, está atado al nuevo esquema que impuso el PAMI para adquirir medicamentos y también a la devaluación de la moneda local, entre otros factores. Entre esos otros factores, Juan Craveri acusó al gobierno por los despidos: «Desde que empezó este Gobierno nos puso en la mira y nos ha tomado como enemigos».
El año pasado, el laboratorio había vendido su producto estrella, Tetralgin, al grupo Roemmers. Sin embargo, esto no resultó suficiente para resolver su desfasaje financiero.
Los problemas de Craveri no son nuevos y ya en el 2018 se realizaron varias maniobras para continuar funcionando. Esto no fue suficiente para paliar la crisis: de hecho, los trabajadores denuncian que llevan «más de 12 meses cobrando los salarios en 3 cuotas».
En julio, la firma había abierto un procedimiento preventivo de crisis y habilitó retiros voluntarios, que no fueron aceptados por los empleados.