El jefe de Gabinete, Guillermo Francos, vaticinó este domingo que en la Ciudad de Buenos Aires el Pro y La Libertad Avanza «no irán juntos», y desafió al partido de Mauricio Macri al señalar que «en la cancha se ven los pingos».

«Pareciera que en la Ciudad La Libertad Avanza y el PRO no irán juntos», expresó Francos en una entrevista por Radio Rivadavia, en la que dio respuestas contundentes solo 48 horas después de que el jefe de Gobierno porteño, Jorge Macri, anunciara el desdoblamiento de las elecciones en la ciudad.

Francos dijo que ese desdoblamiento le parece «mal», y expresó: «Yo creo que hay muchos preocupados de que el Presidente (Javier Milei) tenga mucha adhesión popular, y que esta se pueda volcar en el resultado electoral y birlar mayorías».

«Al separar la elección sin una decisión conjunta (entre el Pro y LLA), ellos han hecho la conveniencia política del PRO en la Ciudad, que además le genera un costo -que ya demasiados tiene- innecesario y que se podía evitar», señaló Francos.

Consultado sobre si el Pro es favorito para imponerse em la Capital, donde gobierna ininterrumpidamente desde 2007, el jefe de Gabinete respondió que «siempre está por verse eso. Yo creo que en la cancha se ven los pingos».

«Habrá que esperar un poco. Nosotros tenemos confianza», dijo en referencia a cuál de las fuerzas sería la favorita por los porteños a la hora de poner el voto en las futuras elecciones.

«Pareciera que en la Ciudad de Buenos Aires no vamos a ir juntos. Yo creo que al separar la elección, sin una decisión conjunta, me parece que ellos han hecho la conveniencia política del PRO en la Ciudad. En el caso particular de CABA me da la sensación de que cada uno irá por su lado», sentenció.

Incómodo tras la decisión de su primo, Macri evita romper puentes con Milei

Al expresidente lo sorprendió el anuncio del desdoblamiento electoral en CABA y dejó abierta la posibilidad de una negociación por las PASO nacionales. Las señales que confunden al PRO.

A Mauricio Macri le quedó un sabor agridulce de la última semana política. Su primo Jorge, por el contrario, vivió el vértigo de adelantar una pelea para intentar preservarse de un ataque mayor. El alcalde porteño aprovechó el último viernes del año para confirmar la decisión que venía ventilando su entorno. Desdobló las elecciones porteñas de las nacionales, las fijó para el domingo 6 de julio y buscará eliminar las PASO locales.

Mauricio siguió el tema desde el country Cumelén, en Villa La Angostura, desde donde llamó para intervenir en la pulseada bonaerense y colaborar para  que el gobernador Axel Kicillof se quede sin Ley de Presupuesto hasta el año próximo. El expresidente combina vacaciones con rosca política. Pudo incidir en la Legislatura bonaerense, pero quedó atrás de las decisiones que tomó su primo, jugado a profundizar la contienda con el Gobierno.

La previa de la decisión que anunció el alcalde porteño fue la pulseada que protagonizaron su primo y Javier Milei. El fundador del PRO se había quejado del destrato de la Casa Rosada y amagó con construir una oferta electoral sin aliarse con La Libertad Avanza. El presidente le contestó desde una entrevista y dijo que iban juntos en todos los distritos o en ninguno.

Macri tomó el guante a medias y dijo que estaba de acuerdo, pero «cuidando la República» y poniendo todas las cartas sobre la mesa. El gesto, casi desdibujado, no coincide con el anuncio de Jorge para evitar que se nacionalicen las elecciones porteñas, ante una eventual competencia para los comicios legislativos entre el PRO y La Libertad Avanza, donde el oficialismo corre el riesgo de quedar muy debilitado en la Legislatura.