Entre gallos y medianoche, el presidente Javier Milei consiguió reunir a dieciocho gobernadores dialoguistas para firmar en Tucumán el dilatado Pacto de Mayo tras la aprobación de la Ley Bases. Con el decálogo presentado en la apertura de sesiones legislativas, el gobierno se propone relanzar y oxigenar una gestión azotada por el presente económico y los errores forzados de un gobierno sin experiencia.
Mientras los más de 200 invitados eran abrazados por los cuatro grados que se sentían en la capital tucumana, el presidente detalló uno a uno los diez puntos firmados en un discurso que se extendió por más de media hora y cuya lectura se vio afectada por las bajas temperaturas. Durante su exposición, a espaldas de los gobernadores, el mandatario confirmó que mantendrá a rajatabla su plan motosierra y descartó todo tipo de financiamiento en el corto y largo plazo.
Decidido a seguir confrontando con la casta, Milei apuntó contra los ausentes al Pacto. “Hay muchos dirigentes políticos, sociales y sindicales que no están aquí hoy entre los presentes para suscribir este acta fundamental. En algunos casos, porque sus anteojeras ideológicas les impiden reconocer la raíz del fracaso argentino. En otros, por miedo o vergüenza de haber persistido en el error durante tanto tiempo. Y en muchos casos, por obstinación de no querer perder los privilegios que les brindaba el viejo orden”, sostuvo el libertario.
Los dichos del presidente llegan horas después de que su antecesor, Alberto Fernández, le enviara una carta pública en la que explicó los motivos de su ausencia. Misma postura adoptó la ex vicepresidenta, Cristina Fernández, quien en privado agradeció la invitación pero adelantó días antes que no participaría del evento. Igual camino adoptaron los gobernadores peronistas, el bonaerense, Axel Kicillof, el pampeano, Sergio Ziliotto, el formoseño, Gildo Insfrán, el riojano, Ricardo Quintela, y el fueguino, Gustavo Melella.
A diferencia de lo que había sido anunciado en primer lugar por el propio presidente, el documento de diez puntos con tintes refundacionales fue firmado sólo por los caciques provinciales y el libertario, quien consiguió una foto de familia casi completa.
A ellos, se le sumaron los sellos de la hermana y secretaria presidencial presidencial, Karina Milei, el presidente provisional del Senado, Bartolomé Abdala, quien participó en reemplazo de la vicepresidenta Victoria Villarruel, y su par en Diputados, Martín Menem, quién en todo momento mostró la investidura propia de un gobernador, aspiración que no consiguió obtener ante el ausente Ricardo Quintela.
Como había adelantado este medio, el evento se convocó para la medianoche del martes por un error de organización que no previó la posibilidad -que finalmente se concretó- de que la selección argentina de fútbol jugara la semifinal de la Copa América el mismo día de la firma del Pacto, un evento que ninguna estrategia digital ejecutada por el todoterreno Santiago Caputo puede contrastar.
La cita tuvo lugar en la Casa de la Independencia en la provincia norteña y contó con la presencia de jefes provinciales, legisladores y todo el gabinete nacional, incluído el flamante ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger, a quien el presidente saludó con un afectuoso abrazo mientras a escasos lugares de distancia el titular de la cartera de Economía, Luis Caputo, esperaba atento el mismo reconocimiento.
El anfitrión Osvaldo Jaldo no perdió la oportunidad para protagonizar cada uno de los momentos del acto. Devenido en oficialista, el dirigente ¿peronista? fue el primero en firmar el acta de Mayo y se mostró en todo momento junto al presidente, a quien le demostró su apoyo cada vez que pudo mientras los focos lo iluminaban.
Los gobernadores que apoyaron con su firma el decálogo fueron Raúl Jalil (Catamarca); Leandro Zdero (Chaco); Ignacio Torres (Chubut); Martín Llaryora (Córdoba); Gustavo Valdés (Corrientes); Rogelio Frigerio (Entre Ríos); Carlos Sadir (Jujuy); Alfredo Cornejo (Mendoza); Hugo Passalacqua (Misiones); Rolando Figueroa (Neuquén); Alberto Weretilneck (Río Negro); Gustavo Sáenz (Salta); Marcelo Orrego (San Juan); Claudio Poggi (San Luis); Maximiliano Pullaro (Santa Fe); Gerardo Zamora (Santiago del Estero) y el jefe de gobierno porteño, Jorge Macri.
Macri y Rodríguez Saá
Tal como había confirmado unas horas antes, el ex presidente Mauricio Macri también dijo presente en el Pacto, aunque no consiguió llevarse su foto firmando el acta. Con escaso protagonismo y apenas algunas tomas en la trasmisión oficial, el líder del PRO se prestó al evento libertario en medio de las tensiones internas que vive el partido amarillo y la voluntad del oficialismo de incorporar a los “heridos” para conformar un interbloque en el Congreso.
El otro ex presidente que participó del evento fue el puntano Adolfo Rodríguez Saá, quien se adelantó a todos los invitados y llegó a la provincia en la tarde del domingo. “Me parece trascendente porque es un acuerdo que servirá para cambiar tal vez el rumbo de la historia, positivamente para el bien de todos los argentinos», sostuvo quien supo ser presidente interino por una semana tras la renuncia de Fernando de la Rúa en 2001.
La ausencia que más se hizo notar fue la de la vicepresidenta Victoria Villarruel. Consultado por Tiempo, desde el círculo de la presidenta del Senado dijeron que el faltazo se debió a un estado gripal “fuertísimo” que arrastra desde el miércoles pasado y que le impidió, por recomendación de sus médicos, abordar el avión que llevó a toda la comitiva presidencial hasta el norte. A pesar de no participar del tucumanazo libertario, no se descarta que la vice forme parte del Tedeum y el desfile militar de este martes.
Con la firma del Pacto, el gobierno se encamina a conformar el Consejo de Mayo, una mesa de decisiones que transformará en proyectos de ley cada uno de los puntos firmados. El mismo estará conformado por un representante de cada sector social que deberá ser elegido en el corto plazo para comenzar con los encuentros que, según confirmaron a este medio, serán semanales y tendrán lugar en la Casa de Gobierno.