El frasquito de vidrio es amoroso y de tan chiquito cabe en una sola mano. Contiene caña con un brotecito de ruda. Y la tapa de corcho amarra un tubo de papel que en su interior describe la “leyenda” y brinda las respuestas a la costumbre de tomar tres tragos en ayunas de este brebaje y la costumbre de los guaraníes. El potiche no está solo sino que permanece ordenado junto a otros dentro de una caja cuadrada, también amorosa, sobre el mostrador junto a un cartel hecho a mano que anuncia el precio y de qué se trata. Claudia, Luis y Mariano inauguraron un nuevo local sobre Avenida San Martín en Paternal, en CABA, esos negocios que ofrecen desde nueces, pasas, aceites hasta galletitas sin tac. En este mes de julio, “vendimos más que el año pasado”, cuenta Claudia a Tiempo mientras sostiene el frasquito. Se sonríe cuando se le consulta si es por la coyuntura que vendieron 150 frasquitos de caña con ruda. Pero para ella, el éxito quizás se debe a que arrancaron más temprano que en 2023 a ofrecerla.
Lo cierto es que en el jardín de cada casa o mismo en una maceta con tierra en un balcón, la gente celebra el mes de la Madre Tierra como cada agosto desde tiempo inmemorial y en toda América. Algunos con caña con ruda, otros con chicha o aguardiente pero todos con agradecimiento “por lo recibido y por lo vivido, para pedir protección, buenas cosechas, conciencia en tiempos tan difíciles que estamos viviendo, con una sociedad tan materializada y que pierde la armonía con nuestra Pachamama”, le dice a Tiempo Rosa Nieves Ramos, de la comunidad Diaguita de Quimivil, donde está El Shinkal, en Catamarca. Además, invita hacia fin de agosto a vivir la experiencia de la celebración en su territorio, en este sitio arqueológico.
“Agradecemos y pedimos sabiduría”
El Norte quizás para un viajero es atrapante en cada mes por su gente, por sus celebraciones auténticas. En Tucumán, está Sebastián Pastrana en Amaicha del Valle con la Casa Amancay y Turismo Rural Comunitario, como lo hacía su padre. Ofrece una celebración “bien familiar y las puertas siempre están abiertas”.
Casi llegando a Bolivia, en Jujuy, sobre la Ruta Nacional 40 es Graciela Gaspar -estuvo con el Papa Francisco hace poco más de un mes- quien deleita a los extranjeros y argentinos que pasan por Cieneguillas. Allí desarrolla el proyecto @Kippus con emprendedores de toda la zona, en la puna jujeña de textiles con lana de llama y tintes naturales entre otros productos.
Para Graciela Gaspar, la celebración de la Pachamama es durante todo agosto. “Siempre agradecemos y pedimos sabiduría, salud, fuerzas”, le explica a Tiempo, y agrega “en tiempos difíciles se pide mucha sabiduría”.
Es en cada rinconcito de América donde el mes de agosto es el momento en que se rinde homenaje a la Madre Tierra. En Salta cada localidad tiene su celebración, en este momento unas cincuenta actividades pueblan el calendario y todas están vinculadas con las tradiciones ancestrales para celebrar el mes de la Pachamama.
“Miles de turistas nos eligen año a año por la amabilidad de nuestra gente, por nuestros paisajes y nuestra arqueología pero sobre todo por nuestra cultura -dice la secretaria de turismo provincial Nadia Loza-. Por eso siempre tratamos de visibilizar nuestra tradiciones y en esta oportunidad con la Pachamama en el mes de agosto con más de 50 actividades en 21 municipios de las siete regiones turísticas. También es una excusa para que los salteños puedan recorrer la provincia y participar de estas celebraciones a nuestra madre Tierra”, señaló el martes al presentar el calendario de celebraciones.
Hay un lugar imperdible: San Antonio de Los Cobres en la Puna salteña donde se desarrolla la Fiesta Nacional de la Pachamama de Los Pueblos Andinos. Este sábado realizan la 29 edición, con diversas actividades junto con el cacique Miguel Siares de la Comunidad Collas Unidos que presentará y desarrollará el ritual en la estación del Ferrocarril Gral. Belgrano, del Tren a las Nubes. El inicio de la ceremonia del Chayaco, a cargo de miembros de la comunidad Collas Unidos. Siempre hay representantes de otras comunidades como Wichis, Tobas, Chorote, Chulipi, Guaraníes, Tapiete, Chane, Diaguita Calchaquí del territorio salteño y danzas y música de sikus, coplas de la Pachamama y bailes de las distintas etnias.
Las distintas ceremonias pueblan el mapa americano. También las hay en el AMBA. En Florencio Varela, conurbano bonaerense, van por la 30ma edición de la Fiesta de la Pachamama y este domingo a las 10, la cita es en el Museo Histórico Provincial Guillermo Enrique Hudson (calle 1356 entre avenida Hudson y 1379), donde se realizará en ritual en la casa natal del escritor Guillermo Hudson, con comidas y bebidas típicas, locro, tamales, humita, empanadas jujeñas, salteñas y santiagueñas, rosquete, chicha y música tradicional de grupos folklóricos en vivo. Es gratis. Lo organiza la gente de la Asociación Amigos del Museo y el municipio. La cita es con la tierra. Con la Madre Tierra. Siempre.