El pasado 29 de febrero, el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) emitió su Pronóstico Climático Trimestral para el período marzo-abril-mayo de 2024. Allí se observa con claridad que el SMN preveía temperaturas menores a las normales para un área enorme de la Argentina, desde la Patagonia, en el sur, hasta Santiago del Estero y Chaco, por el norte.
“El pronóstico indica las probabilidades previstas para cada categoría (Superior, Normal e Inferior), en cada región señalada y para el trimestre pronosticado”, observa el informe.
Sin embargo, el gobierno salió a echarle una parte de la culpa por la falta de gas que se siente desde el lunes a un otoño inusualmente frío, cosa que es cierta, y no previsto, algo que es falso.
El secretario de Energía, Eduardo Rodríguez Chirillo, así lo expresó en un posteo en la red social X: “Estamos en el otoño más frío desde 1980, no pronosticado y con fuerte demanda de gas”.
Más cerca en el tiempo, el SMN pronosticó en su boletín del 26 de abril que en el trimestre mayo-junio-julio seguirán las temperaturas por debajo de lo normal en buena parte de la provincia de Buenos Aires y en Entre Ríos.
Es importante tomar en cuenta que los pronósticos emitidos en estos boletines apuntan a remarcar las tendencias más gruesas que marcarán el período. El SMN advierte en ese sentido que “Se debe tener en cuenta que las previsiones climáticas se refieren a condiciones medias durante el periodo analizado y no contemplan aquellas singularidades de los eventos de escala subestacional, como por ejemplo intensidad de sistemas frontales, olas de calor o de frío, bloqueos atmosféricos u otros condicionantes del ‘tiempo’ que producen aumento o disminución de la precipitación y la temperatura, todos ellos de corta duración”.