Desde su lanzamiento en 2023, el Observatorio de Economía Urbana del Centro de Economía Política Argentina (CEPA) es conocido por sus investigaciones sobre la situación de los inquilinos de la Ciudad de Buenos Aires, la ejecución del presupuesto que lleva adelante el Gobierno de la Ciudad, y la presión tributaria en el ámbito porteño, además de la cuestión de la coparticipación.
Su coordinador, el economista Juan Pablo Costa, asegura que «el observatorio nace como una iniciativa del CEPA porque no coincidimos con la mirada que dice que la ciudad es un territorio perdido para el campo popular. Consideramos que la ciudad tiene una tradición progresista y popular que debemos recuperar y que quizá un aporte que podemos hacer desde un centro de estudios es poner números y análisis sobre la situación de la ciudad, un diagnóstico, mostrar con datos la realidad que vive la mayoría de los vecinos de la ciudad».
Costa observa que este interés en conocer y comprender la realidad económica, social y política de la capital de Argentina parte desde una posición muy concreta: «El objetivo es poder aportar una mirada desde el campo popular, nos reconocemos como parte del campo popular, no somos una consultora sino que somos militantes del campo popular y desde allí queremos aportar una mirada con rigurosidad técnica y metodológica sobre la Ciudad de Buenos Aires».
Inicios
Los primeros informes del observatorio fueron publicados en el año 2018. Analizaban la situación de los inquilinos porteños y del mercado de alquileres. Si bien se trata de una problemática acuciante en todas las grandes ciudades del país, es especialmente grave en la Capital Federal por su magnitud dado que más de un tercio de los hogares de la ciudad lo conforman inquilinos.
Esa realidad llevó al CEPA a comenzar a realizar estudios sistemáticos de esta problemática. El tiempo solo agravó las cosas, con los problemas que ha tenido el mercado del alquiler (retracción masiva de viviendas), vinculado con los debates de la ley de alquileres, finalmente derogada por el gobierno de Javier Milei.
El observatorio tomó una mayor dinámica y adquirió una forma más desarrollada en los últimos dos años, con 2024 especialmente fuerte alrededor de una serie de debates. «Uno de sus principales hitos fue haber logrado desarrollar una encuesta a inquilinos que tiene la particularidad de ser muy representativa de todas las comunas de la Ciudad», explica Costa. El objetivo fue conocer la realidad de los inquilinos, tanto en materia de precios del alquiler como en condiciones en un momento complejo de se mercado.
El otro elemento que impulsó la actividad del Observatorio fue el desarrollo de un análisis en clave histórica de la evolución de la ejecución del presupuesto de la Ciudad, del gasto público de CABA.
«Se trata de estimaciones muy precisas vinculadas al conflicto entre la Ciudad y la Nación sobre la coparticipación», agrega.
Futuro
De cara a las actividades de este año, Costa dice que los integrantes del Observatorio trabajan en nuevos informes e investigaciones vinculados a vivienda y a la actividad comercial en la ciudad.
Los estudios sobre vivienda estarán vinculados tanto a los alquileres como al mercado inmobiliario y la construcción, además del alquiler temporario. También seguirán líneas de investigación sobre pobreza y las canastas de consumo. «Son distintas temáticas, incluyendo la cuestión del transporte, que en la ciudad son claves», asegura.
Con cualquiera de estos estudios está garantizado un diagnóstico preciso de la Ciudad para trabajar las soluciones para sus vecinos.
Una radiografía de la situación habitacional
El Observatorio de Economía Urbana cuenta entre sus integrantes con Juan Pablo Costa como coordinador y Alejandra Fernández Scarano, Juan Manuel Ortiz, Juan Videla, Ezequiel Paz, Carlos Vacarezza, entre otros, como investigadores en las distintas áreas.
Este equipo produjo el año pasado un informe que causó mucho impacto. En los primeros días de julio de 2024, el CEPA publicó el primer relevamiento de inquilinos de la Ciudad.
Allí surgió que entre 2003 y 2023, la cantidad de hogares inquilinos en la Ciudad de Buenos Aires pasó del 24% al 36% del total.
En el mismo período, la cantidad de hogares propietarios cayó del 64% al 51%. Según el relevamiento, el 60% de los inquilinos tiene entre 30 y 44 años, y más del 45% vive solo.
En ese cuadro, reveló en otro estudio de octubre pasado que la ejecución del Instituto de la Vivienda porteño sufrió un recorte del 23%, «llevando la inversión en este organismo al nivel más bajo de la serie». Agregó que de esta manera la inversión en vivienda «llegó al mínimo desde 2020».