Las negociaciones para alcanzar una tregua en Gaza se reanudarán la semana que viene después de que la delegación del grupo palestino Hamas dejara anoche El Cairo sin un acuerdo, informaron este jueves medios egipcios.
«Hamas demostró la flexibilidad necesaria para llegar a un acuerdo que implique un cese integral de la agresión contra nuestro pueblo. Sin embargo, la ocupación continúa evadiendo las obligaciones de este acuerdo, especialmente las referidas a un alto el fuego permanente, el regreso de los desplazados, la retirada de la Franja y la satisfacción de las necesidades de nuestro pueblo», señaló Hamas en un comunicado, que el día anterior había establecido una serie de puntos básicos para una nueva tregua durante una reunión en El Cairo entre una delegación del grupo con los equipos de los países mediadores, Qatar, Egipto y Estados Unidos.
«La delegación de Hamás ha abandonado El Cairo para consultas sobre la tregua y las negociaciones se reanudarán la semana que viene», afirmó una fuente egipcia de alto rango al canal Al Qahera News, cercano a la Inteligencia egipcia.
El informante anónimo indicó que, igualmente, «las consultas continúan entre todas las partes para alcanzar una tregua antes de Ramadán», que se espera que comience el 10 o 11 de marzo, según el calendario lunar.
Las negociaciones, por tanto, se podrían reanudar el próximo domingo dado que es el primer día de la semana en Egipto, aunque las fuentes no han dado más detalles.
Con esta información todo apunta a que será difícil que el pacto entre Hamás e Israel tenga lugar antes del inicio del mes sagrado para los musulmanes.
Anoche, fuentes palestinas conocedoras de las conversaciones confirmaron a EFE que la delegación de Hamás partió de la capital egipcia y que ahora espera la respuesta de la parte israelí.
Dichas fuentes palestinas, que pidieron el anonimato por la sensibilidad de este asunto, afirmaron que las negociaciones llegaron a un «peligroso punto de inflexión que amenaza la posibilidad de su éxito y de alcanzar un acuerdo final».
Respecto a uno de los puntos del borrador, siempre de acuerdo a las fuentes dado que Israel y Hamás no se han pronunciado oficialmente sobre esta información, el grupo palestino consideró que la retirada de las tropas israelíes de la Franja de Gaza es «poco claro y ambiguo» porque Israel ofrece retirar al este del enclave sin especificar los lugares, mientras que el grupo islamista exige que sea a través de zonas concretas y claras.
En cuanto al alto el fuego, la fuente destacó que Israel no brindó ninguna garantía sobre esta exigencia de Hamás y de todas las facciones de palestinas.
En estos encuentros en El Cairo no participó Israel, después de que Hamás dijera que no podía proveerle – según argumentó, por problemas logísticos causados por la guerra – con una lista de nombres de los rehenes que siguen aún con vida.
Según filtraciones, algunos de los 134 cautivos están en manos de otros grupos o milicias incomunicadas en el enclave, y de ellos más de una treintena ya estarían muertos, en lo que Hamás culpa a bombardeos israelíes.
Cinco meses de conflicto
El último capítulo del conflicto Israel-Palestina estalló el 7 de octubre tras un ataque de Hamás contra Israel que causó unos 1.200 muertos y 250 secuestrados.
Desde entonces, el Ejército israelí ha desplegado todo su poder por aire, tierra y mar sobre la Franja, y en cinco meses de guerra ha ocasionado más de 30.700 muertos, 72.150 heridos y unos 7.000 desaparecidos en la Franja de Gaza.
Crisis humanitaria sin precedentes
Los supervivientes en Gaza, entre los que se encuentran dos millones de desplazados -casi la totalidad de la población-, se enfrentan a una crisis humanitaria sin precedentes, entre la destrucción generalizada de las viviendas, el colapso de los hospitales, el brote de epidemias y la escasez de agua potable y alimentos que han alcanzado niveles de hambruna.