El mítico violinista de tango Fernando Suárez Paz, que integró el Quinteto Nuevo Tango de Astor Piazzolla, falleció este sábado a los 79 años debido al agravamiento de su estado general de salud por el que llevaba internado hace varios meses en el Sanatorio Trinidad de la localidad bonaerense de Pilar.
Familiares del músico informaron sobre la muerte del artista nacido el 1 de enero de 1941 y que con su violín unió la música académica con el tango ya que integró tanto la Sinfónica Nacional y la Filarmónica porteña como las agrupaciones Sexteto Mayor y de Horacio Salgán, Aníbal Troilo, Mariano Mores, Atilio Stampone, Leopoldo Federico, Néstor Marconi y Raúl Garello, entre otras.
En su paso de una década, entre 1978 y 1988, por la agrupación de Piazzolla grabó 18 álbumes en diferentes partes del mundo, además de la banda sonora de numerosas películas, muchas de ellas premiadas por su música.
Estableció una gran relación con Astor, a tal punto que este le dedicó su tema “Escualo” y como fruto de la marca que le dejó ese vínculo estético y musical, el “Negro” lideró también desde 1996 su propio quinteto, consagrado a la música del bandoneonista, autor y arreglador marplatense, con el que publicó dos álbumes: “Milonga del Ángel” y “Por amor a Astor”.
Con dicha formación bajo su mando e impronta, acompañó espectáculos del bailarín Julio Bocca en gira por ciudades de Estados Unidos.
A inicios de 2001 viajó a Europa con el Dúo Assad y recibió el Premio Grammy 2002 por el disco que le dedicara a Piazzolla y en julio de 2002 tuvo a su cargo la apertura del ciclo “Astor Triunfal”, en el Teatro Colón, en recuerdo del artista a 10 años de su deceso.
El 21 de septiembre de ese mismo año Suárez Paz tocó acompañado por la Orquesta Filarmónica en el Teatro Colón, el “Concierto en Canto Negroriano”, dedicado a su figura y dirigido por su compositor Gabriel Senanes.
Su ductilidad forjada también en las sonoridades académicas le permitieron ser concertino de importantes batutas que actuaron en el país, como las de Burt Bacharach, Lalo Schiffrin, Michel Legrand y Waldo de los Ríos.
También fue reconocido por la crítica internacional por su destacada intervención junto al vibrafonista Gary Burton en festivales de jazz de Europa, Japón y Estados Unidos.
En 1991, fue nombrado miembro de la Academia Nacional del Tango en el cuadro de la Generación Intermedia, grabó como solista el “Concierto de Nácar”, de Piazzolla, acompañado por la Orquesta Filarmónica de Buenos Aires dirigida por Pedro Ignacio Calderón y concretó su primer disco como director y solista de su grupo de cuerdas, dedicado a la obra de Piazzolla: “Cuerdas Para Piazzolla/Strings for Piazzolla”.
Hacia 2003 la Legislatura porteña lo distingue como Ciudadano Ilustre de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y un año más tarde formaliza un dúo con su amigo, el pianista Osvaldo Requena, que desfiló por diferentes salas y publicó un disco con repertorio propio, tradicional y contemporáneo.
El instrumentista se despidió de los escenarios en 2017 y en marzo de ese año su trayectoria fue reconocida en el espectáculo “Leonardo Suárez Paz. De hijo a padre. Homenaje a Fernando Suárez Paz” que se desarrolló en el Centro Cultural Kirchner.