Sobre el final de 2023, Mujer Cebra lanzó Clase-B, el sorprendente -en varios sentidos- álbum que rápidamente fue consagrado por el público y la crítica como una de las mejores producciones del año. El trío propone una revisita al rock alternativo (en inglés) de los ’90 y sorprende por su lírica, pero quizás más que nada para una actitud, que en palabras de su vocalista, guitarrista y compositor Santiago Piedra puede resumirse así: “No laburamos sobre las expectativas, sino sobre lo que va pasando y que todo sea una especie de sorpresa.”
Así que “la verdad que sí”, que fue sorpresa para él -y Gonzalo Muhape (bajo) y Patricio García Seminara (batería), un power trío que apunta a estar a la altura de la rica historia que esa formación tiene en el rock argentino)- que Clase-B fuera elegido uno de los discos del año. “Estamos muy contentos con el resultado del disco, pero la verdad es que al no haberlo tocado mucho en vivo no tuvimos muchos más indicios. Así que la verdad es que cuando vimos que aparecía en varios ránkings entre los mejores discos del año yo por lo menos me comí una mezcla de felicidad y asombro.”
La sorpresa fue compartida, claro, pero tampoco era para estar totalmente asombrado: después de todo, desde sus inicios Mujer Cebra se había dedicado a “la búsqueda de un puñado de buenas canciones, y Clase-B es un disco de canciones. Creo que tiene algo de frescura, de una búsqueda de canciones sin pensar tanto en cómo se va a ver o cómo va a sonar, sino que vaya surgiendo. Creo que por ahí viene un poco la mano.”
Puede decirse que Mujer Cebra no tiene mapa previo, de esos que establecen un itinerario con metas a cumplir o lugares a llegar. “Pensamos mucho en los arreglos pero es un disco que tiene mucho la canción como estructura, como tocar con un par de guitarras, que ya sea eso, y por último sí la parte más de cómo suena.” Las crónicas y críticas hablan de un sonido del rock alternativo de los ’90, en una especie de viaje al pasado que no es retro y menos nostalgioso, sino que responde también a esa idea más fresca de que se recurre a lo que se tiene a mano.
Mujer Cebra y las influencias
“Obvio que lo escuchamos de toda la vida, pero creo que se notan más nuestras influencias de más chicos que lo que fuimos escuchando después o ahora.” Y recurre a la expresión púber de: “Fuá, quiero sonar así.” La onomatopeya encierra a Nirvana y Pearl Jam a la cabeza, aunque sus líricas más rockeras son bien del siglo XXI: frases menos elaboradas desde su «explicación» pero totalmente entendibles para el ecosistema que las recibe reiteración: a la manera de quien entra en trance; pocas pero muy eficaces. Casi el antagónico del trap y la música urbana.
“La gente que nos escucha es por lo general más chica que nosotros, pero no tanto. Estamos medio en la vara entre ser millennials o centennials porque tenemos todos alrededor de 30 años. Yo me comí la carrera de los últimos VHS pero viví también el CD, Ares y después Spotify: estamos como en el medio de un par de generaciones que están medio chocadas y es re interesante porque nos conectamos con los dos públicos.”
Tal vez no todos los de esas generaciones estén chocados, pero quien escuche (de la generación que sea) “Si el mundo deja de girar, para algunos todo sigue igual” (de la canción “Otoño imperdonable”) sabrá de inmediato en gente de qué edad está inspirada.
“Creo que la idea de zombie es una persona que se la ve completamente metida en la sociedad pero no le importa nada, o que hay música que no dice nada -y está re bien-, pero que es también como una idea necia”, reflexiona Piedra.
En relación a las expectativas por lo que vendrá, el cantante y guitarrista explica cómo es su perspectiva: “No suelo comerme las expectativas. Arrancamos haciendo la música más que nada para nosotros y de alguna manera terminó dándonos un resultado que es paulatino y constante, y de a poco se va armando algo. No laburamos sobre las expectativas, sino sobre lo que va pasando y que todo sea una especie de sorpresa. Creo que las expectativas de llegar a un lugar y pensar que te vas a comer alguna que no es son armas de doble filo. Me sirve tener los pies en la tierra y que cada pasito que se va dando sea bien ganado”, concluye Piedra. «
Mujer Cebra «Clase-B»
- «Y no me digan nada».
- «Invisible».
- «El veneno».
- «Nuevos miedos».
- «El fuego es para quemar».
- «Desaparecer».
- «Otoño imperdonable».
- «Fantasma».
- «Nadie va a decidir por vos».
- «Esperando solo».
- «Donde termina el silencio».