Este martes Javier Milei expuso por primera vez durante el Debate General de la 79° Asamblea General de las Naciones Unidas. Con un discurso que buscó lograr alto impacto, el presidente anunció que el país dejará de lado el rol de neutralidad en conflictos internacionales y apuntó contra la renombrada Agenda 2030, a la que calificó como “un programa de gobierno supranacional de corte socialista”.
En esta línea, el libertario advirtió que la firma de este pacto internacional, al que país decidió no adherirse en su renovación al 2045, “pretende resolver los problemas de la modernidad con soluciones que atentan contra la soberanía de los estados-nación, y violentan el derecho a la vida, a la libertad y a la propiedad de las personas.” Además, afirmó que esta es una agenda “que pretende solucionar la pobreza, la desigualdad, y la discriminacion con legislación que las profundiza.”
Milei y la ONU «socialista»
En tanto, el presidente apuntó directamente contra la ONU. “Pasamos de una organización que perseguía la paz a una organización que le impone una agenda ideológica a sus miembros, sobre un sinfín de temas que hacen a la vida del hombre en sociedad”, lanzó sin rodeos el mandatario. Además, advirtió que la institucionalidad de la ONU fue reemplazada por “un modelo de gobierno supranacional de burócratas internacionales que pretenden imponerle a los ciudadanos del mundo, un modo de vida determinado.”
Además, criticó el rol que adoptó el organismo durante la pandemia de Covid 19. “Hemos visto cómo una organización que nació para defender los derechos del hombre ha sido una de las principales propulsoras de la violacion sistemática de la libertad, como por ejemplo con las cuarentenas a nivel global durante el año 2020”, sostuvo.
Decidido a profundizar las diferencias con los estados latinoamericanos, el libertario reprochó a la ONU la permanencia de Cuba y Venezuela en la asamblea. “En esta misma casa, que dice defender los derechos humanos, han permitido el ingreso al consejo de derechos humanos a dictaduras sangrientas sin el más mínimo reproche”, lanzó.
Internas diplomáticas en viaje a New York
El mandatario viajó acompañado de una reducida comitiva integrada por su hermana y secretaria general, Karina Milei; el ministro de Economía, Luis Caputo; la ministra de Seguridad Patricia Bullrich y la canciller Diana Mondino.
A pesar de intentar alinearse y hacer equilibrio diplomático en una gestión dispuesta a romper lazos con los principales socios comerciales del país, la ministra de Relaciones Exteriores atraviesa su peor momento en el gobierno. Dentro de Casa Rosada no disimulan su descontento con la gestión internacional que encabeza la economista y, aunque no se apresuran a dar fechas, admiten que su continuidad pende de un hilo.
En medio del discurso de Milei ante la ONU, se anunció un nuevo acuerdo con el Reino Unido para reanudar los vuelos a las islas Malvinas vía Córdoba, modalidad que se había discontinuado en 2018.
El último capítulo de esta disputa interna se dio durante el discurso del propio presidente. A pesar de estar previsto lo contrario, el embajador argentino ante las Naciones Unidas, Ricardo Lagorio, no pudo acceder al recinto donde se encontraba el presidente. La orden habría sido dada por Karina Milei, dispuesta a ganar la batalla contra la funcionaria.
Así se lo hizo saber en las últimas semanas a la propia Mondino, cuando decidió que el ahora ex legislador, Nahuel Sotelo, se haga cargo de la Secretaría de Culto y Civilización, que dejó vacante el eyectado Francisco Sánchez. El veinteañero, que tuvo un breve paso por la legislatura bonaerense desde donde pudo desplegar sus dotes para la rosca, responde sin intermediarios al Jefe a quien le hace conocer de primera mano cada uno de los movimientos que se dan dentro de la Cancillería.
Los encuentros del presidente en la Gran Manzana
Antes de su discurso ante la Asamblea, el presidente mantuvo una escueta agenda que consistió en encuentros con empresarios, una visita a la Bolsa de Valores de Nueva York -que incluyó la clásica ceremonia de tocar la campana para dar inicio a la jornada de mercado- y un tercer encuentro con Elon Musk. Tal como ocurrió durante las otras dos reuniones, el libertario sólo se llevó del magnate una foto con puños en alto y una palmadita en la espalda por su plan económico al que apoya sin inversiones concretas.
“Elon le prometió al presidente que va a invertir. Nos dijeron que están evaluando diferentes sectores para seleccionar la mejor opción”, dijeron ante este medio desde el riñón del libertario. Así también lo confirmó el propio magnate, quien aseguró en su cuenta de X (ex Twitter): “mis empresas están buscando activamente formas de invertir y apoyar a Argentina”.