Como sucedió con el legislador porteño Ramiro Marra de La Libertad Avanza (LLA), el gobierno de Javier Milei pasó la guillotina por el cargo de Sonia Cavallo. La hija, de quien fue ministro de Economía de Carlos Menem, presentó su renuncia este lunes como embajadora ante la Organización de los Estados Americanos (OEA) por expreso pedido del Presidente.
Como viene ocurriendo con la salida de distintos funiconarios de la órbita del gobierno, el pedido de renuncia a Sonia Cavallo se parece mucho a una vendetta mafiosa. El mismo tuvo lugar apenas unas horas después de los agresivos dichos del mandatario nacional contra el padre de la funcionaria, el reconocido exfministro menemista y padre de la convertibilidad, al que este lunes Milei calificó de “impresentable” luego de que este pronosticará que el dólar tendrá una suba en su precio y opinó sobre el futuro de la inflación.
Cavallo había afirmado que la brecha entre el tipo de cambio CCL (contado con liquidación) y el tipo de cambio oficial manejado por el crawling peg «tenderá a aumentar», y le sugirió al Presidente «dos de los mecanismos más eficaces para aumentar las reservas netas».
La vendetta de Milei
Al respecto, este lunes por la mañana en una entrevista concedida a la señal de noticias A24 Milei expresó: “El dólar se tiene que caer como un piano. Y le voy a decir más, en especial por el impresentable de Cavallo, y lo digo abiertamente, porque mientras que él era ministro de Economía e insultaba a todo el mundo cuando hablaban de devaluación, el tipo de cambio de la convertibilidad era a hoy de 700 pesos”.
![Cavallo Milei](https://www.tiempoar.com.ar/wp-content/uploads/2023/06/web-20230615-domingo-cavallo-captura.jpeg)
En la misma línea, añadió: «Este programa es muchísimo más exitoso que la convertibilidad porque no tuvimos que tener una hiperinflación previa para hacerlo, porque nosotros la evitamos no la dejamos correr y reventar a la gente para mostrar un programa exitoso”.
Acto seguido, la economista Sonia Cavallo presentó su renuncia sin explicaciones públicas, pero con las diferencias con la gestión libertaria planteadas por su padre como detonante. “Por decisión del presidente de la Nación Sonia Cavallo deja de ser la embajadora argentina ante la OEA”, anunció el vocero presidencial, Manuel Adoni, a través de su cuenta de X.
Por decisión del Presidente de la Nación Sonia Cavallo deja de ser la embajadora argentina ante la OEA.
— Manuel Adorni (@madorni) February 10, 2025
Fin.
La dinámica de expulsión coincide con la del libertario Ramiro Marra, quien, por respaldar el presupuesto en la Legislatura porteña fue acusado por la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei, de cerrar acuerdos con el jefe de Gobierno porteño, Jorge Macri, de espaldas a La Libertad Avanza.
“Dicen que mi hermana tiene una guillotina, y sí la tiene. Si hacen cosas en contra de los parámetros de lo que la gestión defiende, sí, guillotina”, dijo Milei esta mañana para referirse a la salida de Marra, a la que definió como una «ejecución». Aunque también aseguró que fue “una cuestión distrital” y explicó que el Gobierno tiene tres líneas de acción: de gestión, la batalla cultural y la política.
Además, aclaró que él se encarga de encabezar las primeras dos áreas mientras que el debate político lo delega en su hermana, que lo encarna junto al jefe de Gabinete, Guillermo Francos y el asesor Santiago Caputo.
«Yo me ocupo de la gestión y de la batalla cultural, de temas nacionales, y por una cuestión de federalismo no me meto ni con las provincias ni con la Ciudad de Buenos Aires que es donde está la cuestión”, se escudó, y añadió: “La cuestión política la maneja mi hermana, también Guillermo Francos y Santiago Caputo, ese es ala que se ocupa de la política”.
En el caso de Sonia Cavallo, desembarcó en la OEA a principio de la gestión, con Diana Mondino al frente del Palacio San Martín. Como no pertenece al cuerpo diplomático, su nombramiento fue “extendido por el tiempo que dure el mandato del Presidente de la Nación que lo haya efectuado”.
La exdiplomática, que reside desde hace más de diez años en Estados Unidos, mantenía un aceitado vínculo con el libertario, que hablaba de su padre como “el mejor ministro de Economía de la historia”, pero que producto de los diagnósticos de los últimos tiempos se ganó su enemistad.