El presidente de VenezuelaNicolás Maduro acusó concretamente al gendarme argentino Nahuel Gallo de participar de una operación que tenía el objetivo de asesinar a la vicepresidenta de Delcy Rodríguez. Además, involucró al gobierno argentino señalando que era parte de la “conspiración” lo que implica un agravamiento de la crisis entre ambos países.

“Algunos chillaron, como los argentinos, pero yo puedo decirlo hoy: nosotros a esa gente la estábamos esperando. Gracias a Dios, siempre tenemos que agradecerle a él, tenemos una inteligencia muy buena; ellos venían desde el sur de América con planes específicos para intentar atentar contra la vida de la vicepresidenta Delcy Rodríguez”, afirmó abiertamente Maduro, durante una transmisión de la televisión estatal venezolana.

“Es mentira que tiene una novia aquí, ese señor tiene su esposa en Argentina”, señaló el mandatario en referencia al gendarme Gallo, quien ingresó ilegalmente a Venezuela, caminando por la frontera sur, fue detenido hace y casi un mes después, se encuentra en una prisión de alta seguridad, a pesar de los reclamos de sus familiares, y del gobierno argentino. “El Gobierno argentino está involucrado en los planes violentos de atentar contra la paz de Venezuela, así lo denuncio”, dijo Maduro. Previamente, el ministro de Interior y Justicia, Diosdado Cabello, había acusado al gendarme de ingresar a Venezuela en una misión de espionaje.

La respuesta del gobierno argentino estuvo a cargo de la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, quien en su cuenta de X publicó: “Escuchame bien, Maduro: tus mentiras no te van a salvar. Acusar sin pruebas a Nahuel Gallo de un complot ridículo solo expone la desesperación de tu régimen asesino, que está llegando a su fin. Al delirio de un asesino de su propio pueblo no hay palabras con que responderle. La Argentina no va a tolerar más este atropello. ¡LIBERÁ A NAHUEL YA!”.

Claramente las acusaciones de un lado y del otro no favorecen a la resolución del conflicto, así como tampoco parece haberlo hecho la reunión bilateral en la Casa Rosada porteña del presidente Javier Milei con el dirigente opositor Edmundo González Urrutia, a quien el argentino reconoció como “presidente electo de Venezuela”. La charla fue considerada como “inoportuna” por la propia familia del gendarme.

Nicolás Maduro comenzará el próximo viernes un nuevo periodo presidencial, a pesar de las controversias que provocaron las elecciones del año pasado en las que se consideró vencedor frente a su adversario, Edmundo González Urrutia, quien debió abandonar Venezuela y se encuentra ahora de gira por los Estados Unidos, tras visitar Sudamérica recogiendo adhesiones.

El gendarme argentino fue detenido el 8 de diciembre de 2024 al intentar ingresar a Venezuela desde Colombia. Gallo, de 33 años, se desempeñaba en Mendoza y, supuestamente, había viajado para reunirse con su esposa e hijo en Caracas. El gobierno argentino denunció la detención como arbitraria y exigió su liberación inmediata, calificando el hecho como una violación de los derechos humanos. La Cancillería presentó una denuncia ante la Corte Penal Internacional.