La actividad industrial se contrajo un 6,8% en febrero y enlazó el noveno registro negativo en forma consecutiva, informó la Unión Industrial Argentina (UIA) en su Informe de Actualidad Industrial.
El indicador de febrero mostró una suba del 0,7% en la comparación contra enero, un mes condicionado por las paradas de plantas para efectuar tareas de mantenimiento.
La entidad adelantó que la tendencia empeoró en marzo y advirtió por la combinación entre el aumento de los costos de las empresas y la contracción de la demanda.
La advertencia de la principal referente del sector fabril, que acompaña los proyectos de reformas estructurales del gobierno nacional, se suma a los reclamos que previamente venían destacando las pymes industriales.
En ese sector vienen confirmando la tendencia de la que habla la UIA. El domingo la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (Came) reportó una caída de las industrias pymes del 11,9% en marzo.
El Indice de Producción Industrial Pyme que elabora la entidad, con datos de 413 empresas, reportó derrumbes de sectores como la industria papelera (27,4%) y la industria química y plástica (20,7%).
Las causas de esas caídas fueron el sensible enfriamiento de la demanda del mercado interno como consecuencia del atraso salarial y una merma de la producción para bajar el uso de insumos difundidos cuyos costos se dispararon.
La UIA coincidió en subrayar la disminución de la demanda y la hizo extensiva a la demanda de otras industrias y de la construcción, el rubro más afectado de la economía, según el último Estimador de la Actividad Económica del Indec.
Aunque el informe es de febrero, la entidad fabril adelantó que en marzo se registró “una baja mensual de magnitud y se estima que se aceleró la contracción interanual”.
Los datos que se conocen son el de la industria automotriz, que cayó casi 30%, y los minerales no metálicos, que se contrajeron 41,2%. En el mismo mes, la demanda de energía eléctrica retrocedió un 13%, y las importaciones se desplomaron 27,9%, entre otros datos.