La caja de Vidal no alcanza. Como ya lo había hecho en campaña y después de ganar, Kicillof habló de las graves condiciones en que recibe la provincia y, tras repasar los indicadores de la economía como pobreza, desempleo, inflación, dijo que Cambiemos «negó los problemas». Pero además retrucó los números que Vidal brindó en su rendición de cuentas, una semana antes de terminar su mandato y del dinero para pagar salarios y aguinaldos. «Se habló de que dejaban una caja de 25 mil millones de pesos. Pero el problema no es cuánto queda en la caja, sino las necesidades que hay que atender con lo que queda en la caja. Y esa cifra no alcanza ni para los próximos 30 días», advirtió. Y precisó en este sentido que «los sueldos y obligaciones de deuda totalizan 40 mil millones de pesos a pagar en los prox 35 días» y que a eso se suma «la deuda con proveedores que estimamos en 50 mil millones de pesos».
La deuda provincial. El gobernador apuntó que la deuda se quintuplicó en los cuatro años de gestión de Vidal y que pasó de 9300 millones de dólares a ser de 12.300 millones de dólares, contrariando el discurso de Cambiemos. Aclaró que la provincia «tiene voluntad de cumplir los compromisos, pero necesita tener una estructura de deuda sostenible. La situación financiera de la provincia es hoy delicada, nos vamos a poner inmediatamente en contacto, vamos a entablar un diálogo con los acreedores, para entablar una solución para este problema». En este punto, incluso parafraseó al ex presidente Néstor Kirchner. «La provincia tiene una deuda en dólares, en educación, en trabajo, en producción. Dijo Alberto, ´si no crecemos no podemos pagar´. Dijo Néstor: ´Los muertos no pagan sus deudas´», recordó.
Tarifas. Uno de los anuncios que se llevó la mayor cantidad de aplausos fue el anuncio de la marcha atrás en la suba del 25% en la tarifa de luz que había anunciado Vidal después de las elecciones de octubre y que iba a regir a partir de enero. Incluso en la primera reunión por la transición, le pidió a la mandataria que lo derogara, pero no lo hizo. «El aumento de tarifas lo vamos a dejar sin efecto», anunció y explicó: «No es porque no haya voluntad de respetar contratos, tenemos que revisar lo actuado y por eso convoco hoy a las empresas del sector para trabajar en un esquema que sea justo, sostenible y razonable».
En este punto también anunció que le pidió al gobierno nacional que deje sin efecto la creación del Ente Metropolitano Regulador del Servicio Eléctrico (EMSE) creado tras el traspaso de las concesiones de Edenor y Edesur al ámbito de la provincia y de CABA. «Queremos que se vuelva a foja cero, pero no a favor de una empresa, sino a favor del pueblo de la provincia. No vamos a convalidar ninguna maniobra», dijo.
Guiño a docentes. El discurso también se refirió a los docentes y, aunque no habló de la paritaria, sí dejó sentado cuál será su política hacia ese sector. «No esperen ver a un gobernador que se enfrente y ataque a los maestros y maestras. Hay que defender la escuela pública, hay que defender a la universidad, a la ciencia, a la investigación, a quién se le ocurre enfrentar a los maestros cuando son parte de la estructura básica de nuestra familia de nuestras ciudades?», sostuvo y buscó diferenciarse de la gestión anterior. Incluso realizó un homenaje a Sandra Calamante y Rubén Rodríguez, la vicedirectora y el portero muertos en la escuela 49 de Moreno a raíz de una explosión de gas. Adelantó que pondrán en marcha un plan de obras urgentes para que las escuelas estén listas para el inicio de clases.
Emergencia económica. Al enumerar las medidas que tomará en estos primeros meses, Kicillof apuntó que Buenos Aires se sumará al plan «Argentina contra el hambre» debido a que está en emergencia alimentaria. Graficó la situación con estadísticas: mientras que en 2016 el 17% de los niños iba a los comedores escolares, hoy lo hace el 40%. también aseguró que el 63% de los niños bonaerenses están por debajo de la línea de pobreza. «Desde el primer día nos declaramos en lucha contra el hambre», dijo y anunció, en este marco, que enviará a la Legislatura bonaerense un proyecto de emergencia económica que comprenderá a todas las áreas y apuntó en especial también a la salud, educación e infraestructura.
Presupuesto 2020. Igual que Alberto Fernández en Nación, anunció que no enviará ahora el proyecto de ley de presupuesto 2020 a la Legislatura sino que lo hará una vez que ingrese el proyecto nacional al Congreso. «Ni bien esté publicado el presupuesto nacional nos vamos a poner a trabajar para que la Legislatura pueda trabajar y tengamos nuestro presupuesto», señaló.
Género. También se refirió a la cuestión de género y al Ministerio de las Mujeres, de las Políticas de Género y de Diversidad Sexual que se suma al organigrama provincial y que conducirá la histórica dirigente de la CTA, Estela Díaz. «Es un nuevo ministerio, queremos un gobierno austero, pero no podemos dejar de atender esta situación emergente», explicó. Una de sus primeras medidas será aprobar el protocolo de aborto no punible que Vidal se negó a aplicar.
Unidad. En su mensaje, Kicillof también habló de la unidad, no sólo del Frente de Todos, sino de todos los bonaerenses como base para comenzar a sacar adelante a la provincia. «Empieza un nuevo ciclo y lo que vamos a hacer es encarar cada uno de los problemas y las dificultades que tiene la provincia con el apoyo, suspendiendo mezquindades. Lo que me da certeza de que lo vamos a ir revirtiendo es saber que vamos a contar el con el apoyo de los y las bonaerenses», dijo y también le habló a los intendentes que lo seguían desde los palcos del recinto: «No venimos a gobernar desde el centro sino con todos y cada uno de los municipios y con cada uno de los intendentes e intendentas».
Por último, recordó que en 2020 la Provincia cumple 200 años y pidió trabajar «por una provincia más justa, más solidaria» y pidió «que nadie nos venga a decir que la provincia no es viable».