La paritaria de los docentes universitarios se encuentra empantanada a partir de la propuesta de las autoridades educativas de un aumento del 15% en cuatro cuotas que van desde junio a octubre con una cláusula gatillo que se aplicará recién en diciembre de 2019.
Las estimaciones de las propias organizaciones sindicales sostienen que, durante 2018, y a pesar de la enorme huelga que sacudió las unidades académicas durante el segundo cuatrimestre, el salario de los profesores perdió casi 20 puntos de poder adquisitivo.
Ileana Celotto, secretaria general de la Asociación Gremial Docente de la UBA (AGD-UBA), sindicato de base de la CONADU(H), aseguró que lo que buscan es que “nosotros perdamos frente a la inflación presente y ellos dejan una hipoteca para que la pague el nuevo gobierno. Pero qué garantías hay de que el próximo gobierno honre los compromisos, cuando se planteará la ruta del déficit cero frente a cuentas públicas estalladas por la magnitud de los intereses de la deuda”.
Por ese motivo, todas las federaciones que agrupan a los docentes de nivel superior coincidieron en una medida de fuerza que, en principio, durará 48 horas el jueves y viernes de esta semana. Al mismo tiempo coinciden en la realización de una movilización a Plaza de Mayo de la que participarán la Conadu Histórica, la Conadu y FEDUN. A la misma se sumaron también las organizaciones estudiantiles como la Federación Universitaria de Buenos Aires (FUBA).
El paro involucra a las 57 universidades nacionales que incluyen a 190 mil docentes y 1,6 millones de estudiantes además de los colegios pre universitarios como el Nacional Buenos Aires y el Carlos Pellegrini.