Roberto Lavagna intentó retomar el rumbo de su campaña que se enfocaba a tratar de aspirar el voto del macrismo desencantado y despejar cualquier posible vinculación con un futuro Gobierno de Alberto Fernández, por eso fue tajante: “El 10 de diciembre voy a ser Presidente o nada”.
Lavagna aprovechó una entrevista radial para intentar reencausar su campaña tras el debate del último domingo que lo único más cerca de Fernández que de Macri. Sin embargo, Lavagna aclaró: “Esto no significa que Consenso Federal no esté dispuesto a sentarse a una mesa de diálogo”.
En declaraciones a radio La Red, señaló además que se sintió «incómodo» en el debate realizado el domingo “porque era poco lo que se podía contribuir en términos de disminuir la fuerte polarización que predomina en la política argentina hace ya varios años”.
Para Lavagna, “es preferible que sea más flexible el debate y que haya tiempos distintos”, aunque analizó que habiendo “seis candidatos se hace difícil manejarlo» y «es mejor que haya algo a que no haya nada».
El ex ministro de Economía manifestó que “hubo datos que no fueron correctos” y se quejó de que a la hora de hablar de derechos humanos no se hable «del hambre, que es el principal problema hoy”. Lavagna agregó: “Cuando nos invitan a hablar de los derechos humanos hablemos de los juicios a los militares, de las minorías de Ecuador o Venezuela, creo que, tanto por derecha como por izquierda, pareciera haber una confusión muy grande”.