El caso de la «vacunación VIP» lo dejó en un segundo plano, pero antes de presentar su renuncia por el escándalo, el entonces ministro de Salud, Ginés González García, había roto el silencio que se autoimpuso el Gobierno sobre la continuidad de las primarias en este año electoral. Hasta entonces, el jefe de Gabinete Santiago Cafiero siempre mantuvo la prescindencia del Ejecutivo sobre el tema. Sólo había advertido que la decisión final dependía de la situación sanitaria de agosto. Esta semana, el renunciante funcionario había tomado el guante y reveló la intimidad de los cálculos epidemiológicos de la Casa Rosada, que están cada vez más lejos de la suspensión de las primarias (como impulsa un grupo de gobernadores del norte) y muy cerca de la alternativa que mayor acuerdo reune entre oficialistas y opositores: postergar las PASO lo más lejos posible del invierno, considerado como el próximo epicentro de un eventual pico de contagios.
«Es un riesgo muy innecesario» dijo el exfuncionario cuando le preguntaron sobre la posibilidad de realizar las primarias en agosto. Aunque anticipó que «si todo va bien» en «agosto o septiembre» estarían «vacunados todos los argentinos, menos los menores de 18 años», la declaración sonó ambigua porque, en parte, le daba pasto al operativo anti-PASO impulsado por los mandatarios del Norte Grande, pero al día siguiente el viceministro de salud bonaerense Nicolás Kreplak se sumó a las dudas de Ginés sobre agosto, aunque, ratificó el interés de su jefe político, el gobernador Axel Kicillof, de concretarlas y solo sacarlas de la zona de riesgo sanitario que implicará el invierno.
“En agosto es probable que haya una alta tensión en el sistema de salud, podemos estar en un momento de muchos casos en ese mes”, pronosticó Kreplak y luego le dio forma a su planteo. «Si se puede posdatar un poquito, me parece que desde lo epidemiológico sería lo mejor para posponer y hacerla más adelante», le dijo a FM La Patriada. «Preferiría que no sea en agosto», remarcó sin mencionar a septiembre como la fecha que barajan en La Plata y también ahora en la Casa Rosada.
Con las primeras palabras de las autoridades sanitarias en el aire, comenzó a circular la alternativa de que las primarias sean optativas y no obligatorias. La idea, originalmente, fue adjudicada a los gobernadores norteños, encabezados por el tucumano Juan Manzur, el chaqueño Jorge Capitanich (PJ) y el jujeño Gerardo Morales (UCR). El borrador del «plan», que fue vendido como una alternativa en estudio de los mandatarios anti-PASO, propone que solo incorporen boleta los partidos que tengan competencias internas con el objetivo de reducir los riesgos epidemiológicos. La iniciativa no solo bajaría los peligros sanitarios, sino también la concurrencia en un tercio.
Así como comenzó a circular en los escritorios del Congreso y de Balcarce 50, hay dudas sobre su autoría. Cerca de Manzur explicaron a Tiempo que no es impulsada por el «Norte Grande». Una alta fuente vinculada a ese puñado de mandatarios la criticó. «La optatividad implica dejar una decisión sanitaria en manos de la política», detalló la fuente. «Este jueves hubo una reunión en Tucumán entre Manzur y Capitanich y en ningún momento hablaron de la optatividad», remarcó el funcionario que defiende el proyecto de suspensión de las PASO que presentó el diputado nacional del Frente de Todos, Pablo Yedlin. Sin embargo, confirmó que cada vez toma más fuerza la posibilidad de la postergación como mejor acuerdo posible: «Entre continuar como están y no hacer nada, creemos en la postergación como mal menor», aclaró la fuente para confirmar que los impulsores de las primarias estarían sumando acuerdos a favor de postergarlas para la primavera. Esa hoja de ruta rescata el proyecto que presentó la diputada nacional por la CABA, Carla Carrizo (UCR), que fue la primera en impulsar una ratificación de las primarias y su realización en septiembre.
Si ese calendario se confirma, la decisión obligaría a redefinir la fecha de las generales de octubre o mantenerlas el mismo día, con un lapso de tiempo más corto entre las PASO y el examen final de medio término. «