Mientras todo el mundo habla de “la vacuna”, es decir, la ansiada inmunización contra el Covid-19, sea rusa, yanqui, china o la de Oxford, existen muchas otras vacunas, cuya aplicación, gratuita y obligatoria, perdió niveles de cobertura en estos meses a causa de la pandemia.
En un contexto de aislamiento preventivo y con muchas familias temerosas de los focos de contagio que, suponían, podían ser los hospitales, la asistencia a los vacunatorios mermó y muchos chicos, sobre todo, no recibieron en tiempo y forma las dosis que prevé el Calendario Nacional de Vacunación. Y esto a pesar de la disponibilidad de las distintas vacunas en todo el país y los protocolos de seguridad activados en los establecimientos donde se aplican inmunizaciones.
El Ministerio de Salud de la Nación y las autoridades sanitarias provinciales municipales tomaron temprana nota de esa situación y, ya en la fase de distanciamiento en varios distritos, sobre todo los más populosos como el Conurbano bonaerense, el panorama lentamente comienza a revertirse.
Este miércoles, el ministro Ginés González García y su par bonaerense, Daniel Gollan, participaron del operativo que se realizó en el partido de Malvinas Argentinas, destinado a completar los esquemas del Calendario Nacional afectados como consecuencia de la pandemia de coronavirus.
“Aseguramos tener todas las vacunas del calendario con disponibilidad para todas las provincias. Hicimos un gran esfuerzo, ya que en este contexto, y viendo el faltante que había de años anteriores, logramos poner en orden la provisión de vacunas en todo el país”, dijo Ginés, quien junto a la secretaria de Acceso a la Salud, Carla Vizzotti, supervisó el operativo en el vacunatorio de la Maternidad Municipal “María Eva Duarte de Perón” y el trabajo en territorio desplegado en el barrio San Pascual.
Ya en octubre, puntualizaron desde Salud, la cartera sanitaria nacional había distribuido 36.756.250 dosis de las vacunas del calendario, lo que significa más de 85% del requerimiento planificado por las provincias para 2020. Pero la pandemia hizo descender dramáticamente el porcentaje efectivo de cobertura. De aquí que, en el marco del Consejo Federal de Salud (COFESA), los ministros del área de todas las provincias acordaran intensificar las actividades de vacunación.
El calendario de inmunizaciones es una herramienta central para evitar la propagación de enfermedades, y durante los cuatro años anteriores, la administración de millones de dosis menos (contando las que la gestión macrista dejó vencer en depósitos) creó las condiciones para la reaparición de enfermedades como el sarampión, que no circulaba en la Argentina hacía 19 años.
Sólo en la Ciudad de Buenos Aires, el protocolo de regreso a las aulas se topó con un problema: más de 50 mil chicos no cumplían el requisito de tener las vacunas al día, lo que obligó al gobierno porteño a apurar una campaña de vacunación para llegar a los chicos de 5 y 6 años y de 11 que, básicamente por la pandemia, no recibieron las dosis recomendadas para sus edades: los más pequeños, la segunda dosis de la triple viral (contra el sarampión, la rubeola y las paperas), el segundo refuerzo de la triple bacteriana celular (difteria, tétanos y tos convulsa) y el refuerzo de la vacuna inactivada contra la polio, y los mayores, la vacuna contra el virus del papiloma humano (VPH), el refuerzo de la triple bacteriana acelular y la dosis única contra el meningococo.
En el distrito más rico del país, en un año normal recibe las vacunas correspondientes un 25% de los chicos por trimestre. Según las autoridades porteñas, el aislamiento social y la suspensión de las clases provocaron que la cobertura de inmunizaciones bajara al 5 o 6% del total durante el segundo semestre.
Las estrategias desplegadas en todo el país para garantizar la inmunización son muchas: los centros de salud que permitan la vacunación cercana a los domicilios permanecen abiertos, pero también se han generado más espacios de vacunación; se está procurando evitar el redireccionamiento de vacunadores y el personal de registro de las inmunizaciones hacia otras actividades sanitarias, ahora que la curva descendente de la pandemia parece brindar un respiro a los trabajadores de la salud; y también se dispuso que cuando los grupos prioritarios (niños, embarazadas y personas con factores de riesgo) se acerquen a la consulta médica por cualquier motivo, sean derivados a los vacunatorios a fin de iniciar o bien completar los esquemas.
El Ministerio de Salud de la Nación recibe consultas sobre el Calendario Nacional de Vacunación en el teléfono gratuito 0800-222-1002, eligiendo la opción 5.