-Tengo un llamado en línea, Buen día.
-Buen día. Soy Susana, de Boedo. Llamo porque estoy indignada. No hay ningún derecho de que todos los pobres tengamos derecho nada más que dar sangre, cómo se muere la gente, cómo pasa hambre y no podemos ver el partido. Yo no soy de Boca pero soy argentina. Y por lo menos un momento de distracción. Y no nos podemos ver. Estoy segura que en España no hay una persona que no esté mirando el partido.
-No lo dude. No lo mira el que no quiere. En España se da por televisión abierta. Le cuento algo más: el Real Madrid tiene su propio canal de cable. Y no lo pasa. Sí lo pasan por televisión abierta a toda España.
-Reclamo porque estoy indignada, realmente. Tengo 62 años. Prendemos el televisor y sólo vemos miseria y tristeza, que ya tenemos bastante…

La conversación, al aire, no fue este jueves sino el 28 de noviembre de 2000. Boca jugaba contra Real Madrid por la Intercontinental en Tokio. Primera hora del día. Lo trasmitía Telefe, los derechos eran de Cablevisión. En el programa Desayuno, por la TV Pública, se emitieron algunas imágenes del partido, desde las pantallas incrustadas en el decorado.
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Este jueves pasado, a las 21, muchos buscaron el partido de la Selección y descubrieron que los que no tenían cable estaban fritos. Nuevamente un país para los que tienen posibilidades, pero para los vulnerables, nada. Parece mentira que también están tirando abajo viejas luchas, con las que estuve fuertemente involucrado. La mafia de Magneto y Clarín me robó 250 mil dólares a lo largo de estos años con el juicio por ese partido del 2000. Y todavía siguen presionando, hostigando, pidiendo cárcel, aunque les parezca mentira.
Pero el tema no es éste, sino que habíamos conseguido allá por el 2000 y más aún con la discusión del partido Boca-Real, que los grandes acontecimientos le lleguen a toda la gente. Y nadie me diga que «Telefe lo transmitió y que era televisión abierta, que es lo que marca la ley»: lo real es que no llega a todo el país. Telefe no los cubre a todos. Por otra parte la Televisión Pública tiene la responsabilidad: ¿si no televisa el partido de su Seleccionado campeón del mundo y bicampeón de América, para qué está? No puede creerse que sean tan vacíos en la mirada que tienen hacia la gente. Sí, son una casta de crueldad. Efectivamente alcanza con esto. Tenemos que tomar conciencia a cada rato de lo que nos tiran encima.
¿Por qué el partido de la Selección contra Chile no fue por la TV Pública? ¿Por qué no se lo dieron a toda la gente? ¿Porque la tratan de una manera tan desigual? ¿Qué le costaba la TV Pública pasar el partido? ¿Qué le molestaba, qué lo perturbaba? Ni siquiera tienen que hablar de gasto porque estoy seguro de que sí, en las presiones que se dan, mafiosos como son de un lado y del otro, se dirían: “No, vos dame el partido, porque yo después yo te doy lo que quieras… Por caso, te compro, Clarín, unos 9 mil millones de pesos de libros…”. O le dan el aumento de la pauta bajo cuerda o le liberan las tarifas, caramba… Lo que es liberarle las tarifas a estos ladrones: implica una ganancia de 200 mil millones de dólares en pocos años y no estoy exagerando a lo Milei. Eso es lo que van a amasar como fortuna.
Mirá si no le podés pedir el partido para toda la gente. Es que no les interesa. Les interesa despreciar a la gente, mostrarse en un lugar en el que solamente un psicólogo podría presentar una idea sobre por qué Milei se porta de esta forma, como servil de las corporaciones. Qué le hicieron, pobre muchacho, para que tenga tanto desprecio, tanto odio en el alma, para que ni siquiera esto del partido de fútbol de tu Seleccionado se lo des a la gente por la TV Pública, que es la única manera de tener una cobertura total en todo el país.
Qué similitud con lo que nos decía aquella señora en noviembre del 2000. Es pura miseria y desolación, lo que vemos: hasta un ratito de deporte, de alegría, te la privan.
Porque además, justamente, el 6 de noviembre del 2000 se publicó en el Boletín Oficial, la Ley 25.342, qué establece que las «asociaciones deportivas y/o los titulares de los derechos de transmisión televisiva de encuentros de fútbol donde participe la Selección Nacional Argentina, organizados por la Federación Internacional de Fútbol Asociado, la Confederación Sudamericana de Fútbol o el Comité Olímpico Internacional deberán comercializar esos derechos, garantizando la transmisión en directo de dichos encuentros a todo el territorio nacional”. Lo dice la ley.
Y más adelante se avanzó a que los partidos que son trascendentes, aunque no fueran de la Selección, también tenían el derecho de verlos todos los habitantes del país. Porque hay fenómenos deportivos que exceden el hecho de que simplemente esté jugando la Selección. Lo establece, nada menos, la Ley de Servicio de Comunicación Audiovisual, N° 26.522, en el Art.77: Macri quiso impedirlo y ahora es la excusa que tiene este gobierno de Milei.
Pero la TV Pública emitió una excusa banal, tonta, en un comunicado. Adujo que no iba a poder transmitir el partido porque no llegó con la negociación ni con Torneos ni con Telefe. Pero sí que se «preocupará» de negociar para los próximos partidos que sean importantes y relevantes en función del artículo de esa Ley de Medios, que hoy tienen cajoneada y nadie le hace el menor caso, como bien explicó en mi programa de radio, mi compañero Sergio Altieri. Y si de compañeros, se trata, una acotación de Adrián Stoppelman: «Aunque no lo parezca, esto es el Mundial de fútbol. Un partido de Eliminatorias es parte del Mundial».
Es una irresponsabilidad total la que tiene el gobierno y la Televisión Pública en el tratamiento en que aliviaría, por un rato, los otros problemas que tiene la gente. Pero no son más despreciables porque no se puede…