La Ley 223, de creación del  Sistema Escolar de Convivencia en las escuelas secundarias de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires fue sancionada el 5 de Agosto de 1999. Ha cumplido 20 años de vigencia. LLegó para comenzar a democratizar el sistema educativo y  comenzar a cerrar puertas de salida de la escuela, evitando la pérdida de alumnos, facilitar los procesos de enseñar y aprender, fortalecer los niveles de participación de los jóvenes y hacer de las escuelas medias y técnicas, instituciones  inclusivas.

 El  “Regimen de Disciplina” tradicional junto con sus sanciones llamadas “amonestaciones” constituían un dispositivo que favorecía el abandono  escolar : los jóvenes acumulaban sanciones y quedaban excluidos sin ningún intento de diálogo, ni contextualización alguna de la falta registrada.  

La   convivencia escolar no se reduce  al comportamiento , a lo disciplinario solamente.Por ser marco de múltiples procesos que se desarrollan en las escuelas forma parte de la Formación de Ciudadana. En este contexto la escuela fortalecerá una convivencia democrática que reconozca a sus alumnos como sujetos de derecho que acceden y completan su educación obligatoria,  formándose en el pensamiento crítico, la toma de decisiones y el compañerismo. Las relaciones de convivencia forman parte de la escuela en una comunidad que incluye en todos los órdenes de la vida. 

La Ley 223 mantiene su vigencia, a pesar de los intentos del Ministerio de Educación de la  Ciudad de Buenos Aires de derogarla y /o modificarla, los /as estudiantes reafirman permanentemente su derecho a participar como miembros del Consejo de Convivencia y reclaman ser llamados al diálogo frente a situaciones de conflicto o de otro tipo. Cabe destacar que también un importante sector de los docentes hacen suyo  lo establecido por la norma citada y ratificada por la Ley 26.206 de Educación Nacional de 2006.

La escuela secundaria , presenta además, otros aspectos que atender y modificar, otras  puertas por las que continúan perdiéndose alumnos. El problema es de carácter estructural y como tal debe atenderse, es decir en conjunto .Citaremos solo algunas.

 La  meritocracia  es uno de los fundamentos de la cultura neoliberal ha    contribuido a desnaturalizar los valores que cada persona posee, instaurando otros que aportan a la configuración cultural del neoliberalismo. Ha golpeado las subjetividades orientando a creer que los/as mejores son solo los/as más inteligentes y/o talentosos sin que importe la historia, la vida, los recorridos, los contextos sociales, económicos, familiares, culturales  en los que les ha tocado vivir a cada uno /una. La Filosofía neoliberal deja por sentado que los que tienen problemas o a quienes la vida se les hizo más difícil, están “fuera de carrera” o simplemente no están habilitados ni para ser ni para estar, es decir están demás . Sirven para observar y vivir en la incertumbre y “disfrutar” de ella. Falso concepto ya que la historia nos permite apreciar que la acción de los proyectos colectivos nacionales y populares que tienen como meta la justicia social, constituyen una buena estrategia para derribar incertidumbres y encontrar convicciones. 

En la secundaria pendiente, el “mérito” guardará estrecha relación con los contextos mencionados y no dependerá del fomento de competencias individualistas, desiguales, discriminatorias  tal como ha pretendido instalar la meritocracia del actual gobierno. Se ponderarán saberes e inteligencias, pero se trabajará para que todos y todas tengan su posibilidad. Valores como la solidaridad, la cooperación, el compañerismo y otros serán igualmente considerados.

Otra característica de la secundaria que favorece el abandono , es la  repitencia. Hace que los /as estudiantes recursen materias que ya aprobaron y pierdan un año  de sus vidas repitiendo. En principio ,debe reemplazarse por un sistema que permita a los/as jóvenes continuar al siguiente año con las disciplinas aprobadas y simultáneamente y siempre concurriendo a la escuela, realizar trayectos educativos que les permitan aprobar las materias pendientes.Como puede apreciarse, es  el sistema de evaluación y promoción el que hay que modificar.

La situación  que se les plantea a  alumnos/as que además de estudiar, trabajan, sobre si continuar o no con sus estudios, determina que la política educativa del Estado en relación con las becas cubra el total de lo que los jóvenes perciben en el trabajo, para que puedan ir a la escuela y dispongan  de tiempo para estudiar. 

Los altos niveles de pobreza actuales  y la política llevada a cabo por el gobierno de Cambiemos con recortes a la cantidad y calidad nutritiva de los alimentos que se suministran, requieren del Estado una revisión de lo actuado en los 4 últimos años en la provisión de insumos alimenticios  y la puesta en funcionamiento de servicios y /o viandas acordes con una correcta y nutritiva alimentación en las escuelas secundarias medias y técnicas que lo necesiten. 

Debe continuarse y aumentarse la política de infraestructura abandonada en 2016.Se construirán  escuelas, dotando a las mismas de los espacios necesarios para el estudio y para el funcionamiento de salones aptos para cocina/ comedor y salas  para la atención de hijos e hijas de adolescentes que concurren a la escuela y no tienen con quien dejarlos.

La jornada extendida será una realidad en las escuelas que la necesiten. Se pondrán en marcha talleres de derechos humanos, TICS, educación sexual integral u otros como  complemento de los contenidos curriculares, así como de prácticas deportivas y /o artísticas y tutorías de apoyo escolar.

El  modelo institucional de la escuela secundaria tiene que modificarse, flexibilizar sus estructuras a partir de una mayor participación no solamente en la conducción sino en el asesoramiento, supervisión y  gestión escolar en general, en la búsqueda de una escuela que enseñe, integre , incluya y se actualice garantizando los accesos al conocimiento y las nuevas tecnologías. Se fortalecerá la acción de las tutorías y entrega de materiales de trabajo, libros y computadoras, en el marco de programas organizados y  que vinculen efectivamente a los jóvenes con el trabajo como hecho social dignificante.

La  escuela secundaria se vinculará con el trabajo  a partir de la articulación de las orientaciones del ciclo superior con la formación profesional y la educación técnica a partir de cursos certificados de oficios, que sumen al título de bachiller una calificación laboral al terminar el 5to.año.

Tanto la escuela media como técnica tendrán con carácter voluntario posibilidad de realizar prácticas educativas o pasantías  como complemento de su formación académica.

La Formación Docente será de vital importancia para recuperar la educación ya que se van a retomar planes probadamente eficaces y se avanzará con nuevos, ya que el  sistema educativo necesita docentes debidamente formados y progresivamente dedicados solamente a 1 o 2 escuelas, lo que mejorará sus condiciones de trabajo y fortalecerá su integración con las instituciones educativas. 

El Estado articulará acciones, tenderá  puentes con áreas de salud y acción Social para que alumnos y alumnas que no tengan acceso a ningún servicio médico, dispongan de una cobertura básica a llevarse a cabo en las instituciones que el Estado determine. 

Estas son  algunas propuestas para una primera etapa de gobierno en las escuelas secundarias que requerirán posteriormente su correspondiente profundización y organización. Harán posible una secundaria  que prepare para el presente y el futuro en una Nación que se organiza en Comunidad a partir del pensamiento, la decisión política y el bienestar de la ciudadanía .