“Esperamos que aunque sea una vez el gobierno de la Ciudad cumpla con la Ley y no apele un fallo”, lanza Leonardo Giménez, un asiduo usuario de la ciclovía de la calle Tucumán, una de las más utilizadas y que la administración porteña tiene en mente desmantelarla.

El lunes pasado Tiempo puso en tapa la denuncia de cientos de usuarios y usuarias de la ciclovía de la calle Tucumán que une los barrios de Almagro, Balvanera y San Nicolás. Por este tema, el Observatorio del Derecho a la Ciudad (ODC) presentó una acción de amparo para evitar que el macrismo elimine esta ciclovía.

Entre los argumentos presentados en la justicia, el ODC considera que “los trabajos de remoción, por ahora, afectaron al trayecto de la ciclovía desde Tucumán N° 1400 al 1600. Los trabajos de remoción de la ciclovía se realizaron sin ningún cartel de obra que indique la normativa (resolución o disposición) que dispuso el desmantelamiento y la remoción de la ciclovía de la calle Tucumán”.

Tras las repercusiones y el rechazo de gran parte de los ciclistas, el Juez Guillermo Scheibler dictó una medida precautelar.

“Asimismo, a fin de garantizar el objeto de la presente acción en virtud el principio precautorio que rige en la materia (art. 4°, ley 25.675), en uso de las facultades atribuidas a los jueces por el artículo 32 in fine de la ley 25.675, corresponde ordenar a la demandada, GOBIERNO DE LA CIUDAD DE BUENOS AIRES, como medida precautelar que por donde corresponda disponga la inmediata paralización de las obras de remoción de las ciclovías ubicadas en las calles Tucumán y Marcelo T. de Alvear de esta ciudad”, ordenó el magistrado

Esta decisión es “hasta tanto se acompañen a la causa las actuaciones administrativas solicitadas en el punto IX del presente proveído y se resuelva respecto de la medida cautelar solicitada”

Asimismo, requirió en el término de 48 horas, la remisión de la totalidad de las actuaciones administrativas (estudios, informes, actos administrativos, etc.) que dieron origen a las tareas de remoción de las ciclovías ubicadas en la calle Tucumán de esta ciudad.

¿Destruir lo que está bien?

Durante el discurso de apertura de sesiones ordinarias de la Legislatura, el jefe de gobierno porteño Jorge Macri, manifestó que “hay que dar un paso más y revisar la razonabilidad” de las ciclovías. En su momento, el jefe de Gobierno había apuntado sobre unas 30, entre las que se encontraban la bicisenda de la Avenida Córdoba, Libertador y de la calle Roseti que, según la propia administración macrista, señaló que obstruían el tránsito.

“La red de ciclovías y bicisendas debe ampliarse y no reducirse”, destacaron desde el observatorio que conduce el abogado Jonatan Badiviezo. Desde lo jurídico, el ODC denuncia que destruir esta ciclovía es ilegal porque viola uno de los derechos fundamentales del sistema de transporte público.

“Estamos ante una violación del Derecho a la Movilidad de la población. Entre los propósitos más destacados del Sistema de Transporte Público de Bicicleta se encuentran la consolidación de una movilidad ambientalmente sustentable, y la optimización de la circulación y fluidez del tránsito, mediante la desincentivación del uso del automóvil particular en total concordancia con los lineamientos propuestos por el Plan Urbano Ambiental de la Ciudad de Buenos Aires, aprobado por la Ley N° 2930”, agregaron desde el ODC.