La Delegación Argentina en Solidaridad con el Pueblo Boliviano -integrada entre otros por Juan Grabois (CTEP), Daniel Catalano (ATE), Agustín Lecchi (Sipreba), Roberto Carlés, Pablo Pimentel y Mauricio Rojas (APDH), Victoria Freire (Observatorio de Género y Políticas Públicas de la Ciudad), Daniel Catalano (ATE), Marianela Navarro (FOL) y Luis Arias- dieron a conocer las graves violaciones a los derechos humanos constatados durante s estadía en el vecino país.
En la conferencia en la sede del Sindicato de Prensa de Buenos Aires (SiPreBa), también adelantaron que en los próximos 15 días va estar elaborado el informe completo que será entregado a los distintos organismos de Derechos Humanos. Según lo que pudo constatar la comisión, formada por referentes de organizaciones sociales, sindicales y de derechos humanos hubo casos de torturas, desapariciones forzadas, detenciones arbitrarias, violaciones y otros delitos contra la integridad física, psíquica y sexual de los bolivianos.
Los casos se perpetraron en la masacre de Sacaba, en Cochabamba, donde murieron seis personas. Según el informe, allí hubo también centenares de heridos y detenciones arbitrarias tras el accionar de las fuerzas armadas. También en la masacre de Senkata, en la ciudad de El Alto, en donde hubo nueve muertos.
“Hemos tomado más de ciento veinte denuncias que constataron violaciones a los derechos humanos de los ciudadanos. Fue una jornada muy dura donde muchas de las personas que aportaron sus testimonios estaban atemorizadas por denunciar en ese contexto. Entre las situaciones más complejas que vimos, fue enterarnos que había personas heridas y que todavía no habían sido atendidas en hospitales por miedo a ser denunciados. Aún en ese marco, logramos tomar las denuncias”, informaron.
Con respecto a distintas desapariciones forzadas, el informe sostiene que existen hay una gran cantidad de detenidos en dependencias estatales que no puede ser localizadas ni contactadas por sus familiares. “Esta delegación logró constatar situaciones de tortura en espacios públicos y dependencias estatales. Asimismo, constatamos diversos casos de violaciones y abusos sexuales graves propiciados por integrantes de las fuerzas armadas y de seguridad”, sostiene el informe.
Por último, el documento arroja: “El terror que se vive en ese país es nefasto pero el grado de ensañamiento no tiene límites. Hemos visto casas quemadas de familias enteras por compartir una postura política”, denuncian.
Los integrantes de la delegación fueron atacados cuando llegaron al aeropuerto de Santa Cruz, en Bolivia, donde fueron víctimas de amenazas explícitas por parte del ministro de gobierno defecto Arturo Murillo y el accionar de grupos de choques civiles, como de las fuerzas de seguridad.
El informe completo:
