La actividad económica registró el cuarto mes consecutivo de caída en febrero pasado. El Indec informó este martes que el retroceso fue del 3,2% respecto del mismo mes de 2023.

De los 15 sectores en los que el organismo divide la actividad económica, el peor desempeño fue de la actividad de la construcción, con un derrumbe del 19,1% respecto al nivel que mostró en febrero de 2023. En este índice pesó con fuerza la eliminación de la obra pública y la parálisis de las inversiones privadas.

En enero, el indicador de la construcción marcó un retroceso del 17,2% respecto de un año atrás.

Otra actividad muy golpeada fue la industria manufacturera. Son múltiples las voces provenientes de este sector, especialmente desde el segmento pyme, que advierten sobre un fuerte retroceso de la actividad fabril respecto de un año atrás. En ello pesa la abrupta caída del consumo interno, principal mercado de la industria ligera argentina.

La profundización de las condiciones económicas adversas sigue golpeando a la actividad industrial. El domingo pasado, la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), informó que la producción de la industria pyme retrocedió 11,9% interanual en marzo.

Respecto del dato del Indec de febrero pasado, la actividad industrial cayó un 8,4% en relación al registro de febrero de 2023. De esta forma, acumuló 10 meses consecutivos de retrocesos. Otros seis sectores (comercios, hoteles y restaurantes, transporte y comunicaciones, intermediación financiera, inmobiliarias y servicios sociales) también cerraron febrero en rojo.

En el otro extremo, la pesca mostró un extraordinario salto del 31,6% en su desempeño en relación a un año atrás. Detrás se ubicó la explotación de minas y canteras, con una expansión del 11,7% interanual.

Otros cinco sectores económicos mostraron crecimiento, entre ellos la agricultura, ganadería, caza y silvicultura, con un incremento del 5,5% respecto a un año atrás.