El gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, recibió el 6 de septiembre a representantes de la Mesa Agroalimentaria Argentina (MAA). “Venimos acompañando al sector con distintas políticas, las cuales hemos puesto a disposición, entendiendo la enorme diversidad y la existencia de problemas históricos y estructurales», aseguró el mandatario provincial al finalizar el encuentro.

El ministro de Desarrollo Agrario de la provincia de Buenos Aires, Javier Rodríguez –también presente en la reunión—valoró el encuentro: “La articulación y el diálogo son fundamentales para la construcción de políticas públicas que alcancen a todos los actores de la ruralidad, creemos en un Estado inteligente que esté acompañando a todos los productores, pero en especial a los pequeños y medianos productores de la agricultura familiar”, afirmó.

Por el lado de las organizaciones campesinas, participaron de la reunión Ricardo Garzia y Silvio Antinori de la Federación de Cooperativas Federadas (FECOFE); Omar Príncipe y Sebastián Campo de Bases Federadas (un desprendimiento de la Federación Agraria Argentina); Virginia Crispin Condori y Nahuel Levaggi de la Unión de Trabajadores y Trabajadoras de la Tierra (UTT); Ricardo Sirotiuk y José Umpierrez de la Federación de Organizaciones Nucleadas de la Agricultura Familiar (FONAF); y Diego Montón y Marisol Troya del Movimiento Nacional Campesino Indígena Somos Tierra (MNCI-ST).

Políticas públicas para el alimento

“Fue una reunión muy política. Presentamos las propuestas que venimos formulando desde la MAA. También describimos la situación del sector en la provincia y el país”, explicó Levaggi, de la UTT. “Caracterizamos las políticas de Milei como de ajuste clásico neoliberal y sobre todo de transferencia a los sectores más ricos. Kicillof nos dijo: ´Caminemos juntos, y entiendan que acá hay un actor con el cual pueden interlocutar´”, agregó el dirigente que durante el gobierno de Alberto Fernández se desempeñó como presidente del Mercado Central.

Como parte del diálogo, se abordaron las diferentes líneas de financiamiento que ofrecen el Ministerio de Desarrollo Agrario y el Banco Provincia con tasas accesibles; la necesidad de promover la producción, la diversificación, el agregado de valor y la comercialización de alimentos bonaerenses; se destacó la segmentación del impuesto inmobiliario rural, lo que permitió la baja de la presión tributaria sobre los productores más pequeños y el trabajo que vienen realizando las Chacras Experimentales que promueve la Provincia en materia de innovación científico-tecnológica.

“Hablamos también del puerto de Quequén, una iniciativa para que haya un 30% de cuota de lo que es el turno de la exportación de granos para que lo pueda administrar el Estado en función de los pequeños y medianos productores. Eso es algo muy positivo. Es una propuesta de ellos”, contó Levaggi. “Quedamos con una agenda de trabajo que incluye el fortalecimiento de los mercados bonaerenses de provisión de alimentos, algo que ya venimos haciendo con muchos municipios de la provincia”, agrega.

Dos modelos de campo

“Hay una falta de lectura de la dirigencia política de la necesidad de un modelo agrario distinto, falta comprender que el campo no es uno solo”, reflexiona el dirigente de la Mesa Agroalimentaria. “No está solamente la función de la producción agraria, la exportación y el ingreso de divisas. Hay una función primaria, urgente y necesaria para nuestro pueblo que es la producción de alimentos para su posible acceso”, agrega.

“Hay que salir de esta falacia de que la Argentina produce alimento para 400 millones de personas, cuando vemos que la realidad es otra”, opinó Levaggi. “Hay que dar soluciones reales a la hora de garantizar el plato de cada una de las familias argentinas. Y ahí es donde nuestra consigna máxima, ´el alimento es un derecho´, choca diametralmente con la propuesta de los sectores neoliberales que plantearon que el alimento es una mercancía, que también fue planteada por alguien que fue asesor del gobierno de Alberto Fernández, Antonio Aracre, el CEO de Syngenta”, recordó.

En el encuentro, contó Levaggi, «le propusimos al gobernador que hay que salir a generar mercados por todos lados. Que todas las instancias del Estado generen espacios de comercialización propios de los productores. Ahí es donde por oferta y demanda van a bajar los precios. Porque por el canal ya preestablecido de concentración económica, de negocio minorista, es muy difícil intervenir en la cadena”.

La Mesa Agroalimentaria Argentina ha desarrollado una larga lista de proyectos e iniciativas tendientes a reforzar al sector que representa. A lo largo de 2023 presentaron un “Programa Agrario para el Alimento” con propuestas de leyes a nivel nacional como la ley de Acceso a la Tierra, la ley de Arrendamiento Rural, la ley de Protección de Territorios de Familias Campesinas e Indígenas, la ley de Segmentación Impositiva Agraria, la creación de una Empresa Pública de Alimentos, un Plan Nacional de Abastecimiento Alimentario, un Plan de Financiamiento Cooperativo, un Programa Nacional de Impulso a la Agroecología y un Plan Nacional de Creación de Mercados de Cercanía.