Al igual que Nación, el Gobierno porteño avanza con un feroz ajuste y profundiza el vaciamiento de las políticas públicas para los sectores más vulnerables. En las últimas horas, el GCBA confirmó el cierre de uno de los hogares convivenciales que aloja a más de 20 niños, niñas y adolescentes que, por algún motivo, están separados de sus familias.
Desde la Junta Interna de ATE del Consejo de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes señalan que, a los magros salarios de los trabajadores y trabajadoras que se ubican por debajo de la línea de la pobreza, ahora se suma la vulneración directa a las niñeces con el vaciamiento de los programas, la falta de recursos y el cierre de uno de los hogares porteños.
Se trata del Hogar «Curapaligüe» ubicado en la calle Curapaligüe N° 571, del barrio de Parque Chacabuco. Un edificio muy antiguo que necesitaba reformas y mantenimiento urgente y que el GCBA dejó prácticamente en estado de abandono.
«El Gobierno porteño anunció el cierre de este hogar y argumenta que el edificio tiene problemas estructurales. La gestión venía planteando desde comienzos de año una mudanza para hacer una obra estructural o para mudar el Curapaligüe definitivamente. Pero de un día para el otro, la idea de la mudanza se cambió por el cierre del hogar y la tercerización del mismo», explicó a Tiempo Lucas Vaglio Giors, delegado del Consejo de niños, niñas y adolescentes por ATE Capital.
Desde el GCBA, respondieron que la reparación de todo el edificio implicaba mucho dinero. «Por esta razón, terminaron definiendo tercerizar el hogar; o sea, cerrarlo y tercerizar la política pública derivando a los pibes a hogares co-gestionados por el organismo», agrega.
El Hogar Curapaligüe daba asilo a 22 pibes y pibas de 3 a 18 años de edad, y en los últimos días 11 menores fueron derivados a un hogar y el resto a otro, bajo criterios que no fueron informados a las y los trabajadores. Pero el cierre del Curapaligüe no solo representa un brutal ajuste que afecta seriamente las políticas públicas a los sectores más vulnerados, además, pone un manto de incertidumbre sobre la continuidad laboral de casi 50 trabajadores que tiene el Hogar.
«Desde el Gobierno dijeron que todos los trabajadores van a ser derivados a otros dispositivos. En este momento estamos atravesando ese proceso en el cual están teniendo reuniones las autoridades para definir a dónde irían a trabajar», suma el delegado de ATE y recuerda que este miércoles a las 12:30 habrá una radio abierta en la legislatura para informar sobre este nuevo ajuste de Jorge Macri.
No es la primera vez que ocurre
En 2022, la Defensoría del Pueblo de la CIudad solicitó información al Consejo de los Derechos de Niños, Niñas y Adolescentes, en referencia al cierre de los hogares «Descanso Miquelina» y «Pequeños Sueños». En ese sentido, se consultó respecto de los motivos por los cuales se procedería al cierre de los dispositivos y, en caso de tratarse de motivos presupuestario, si se solicitó ampliación de las partidas. Asimismo, se requirió información respecto de la cantidad de niños, niñas y adolescentes alojados/as y su estado de situación.
Respecto al traslado de la población en particular, se consultó si el mismo garantizará la cercanía a sus espacios de vida cotidiana (escuelas, nosocomios de salud) y si se garantizó el derecho a ser oído de los niños, niñas y adolescentes alojados/as.
Finalmente, se consultó respecto de cómo se garantizará la continuidad laboral de las y los trabajadores.
Desde la Defensoría manifestamos nuestra preocupación por el cierre de estos dispositivos que alojan a infancias y adolescencias que han atravesado múltiples situaciones de vulneraciones de derechos y que han desarrollado en estos hogares su centro de vida.
Pedido de informes
Las legisladoras porteñas María Bielli y Claudia Neira integrantes del bloque parlamentario Unión por la Patria, presentaron dos pedidos de informes sobre el cierre del Hogar convivencial Curapaligüe (Curapaligüe 571) y el Espacio Educativo de Primera Infancia «Floparch», ambos ubicados en la comuna 7.
El texto se refiere a la situación del Hogar «Curapaligüe», ubicado en la calle Curapaligüe 571, que tenía como objetivo proporcionar atención integral y alojamiento a niños y adolescentes de entre cero y diecisiete años, sin distinción de género, como parte del Programa de Red de Cuidados Alternativos, bajo la dirección del Consejo de Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (CDNNYA).
Si bien se conocían las condiciones edilicias del hogar, que habían llevado a intervenciones judiciales, existe preocupación por el bienestar de los menores que allí residían, quienes estaban bajo medidas de protección excepcionales o especiales según las leyes nacionales vigentes.
En relación al Espacio Educativo de Primera Infancia «Floparch», se indica que más de 60 familias llevan a sus hijos, con edades entre 45 días y 3 años. Este establecimiento era gestionado conjuntamente por el Gobierno de la Ciudad y una asociación civil local. Sin embargo, enfrenta problemas administrativos que amenazan su funcionamiento. Los trabajadores del espacio han señalado que no han recibido sus salarios en los últimos dos meses y no han obtenido respuestas de las autoridades pertinentes.