El ministro de Relaciones Exteriores británico, Boris Johnson sugirió este jueves que a su gobierno le sería muy difícil rechazar un pedido de apoyo de Estados Unidos en alguna acción militar contra Siria en respuesta a un ataque químico, y hasta podría hacerlo sin la aprobación del parlamento.

En declaraciones a Radio 4 de la BBC, el ministro dijo que, ante un pedido de Estados Unidos, podría pasar por alto la Cámara de los Comunes.

Johnson agregó que sería «muy difícil decir que no» si la administración de Donald Trump pidiera apoyo al Reino Unido en alguna acción contra el gobierno sirio si su presidente, Bashar al Assad, lanzara un ataque químico, y agregó que la primera ministra, Theresa May, opina igual.

En ese sentido, el canciller británico agregó que los parlamentarios no tendrían necesariamente porqué votar sobre una propuesta de acción conjunta. Según Johnson, Al Assad había matado a sus propios ciudadanos con armas que fueron prohibidas hace casi 100 años.

El líder laborista, Jeremy Corbyn, no cuestionó la acusación contra el gobierno sirio, pero aseguró que los bombardeos no serían de utilidad, instó al ministro a buscar una solución política, y sugirió que correspondía que intervengan las Naciones Unidas.

Corbyn, que criticó el último ataque con misiles estadounidenses contra Siria, dijo que si hay una solicitud de Estados Unidos para que el Reino Unido respalde la acción militar, «todas las partes tendrían que ser consultadas».

Los demócratas liberales y el Partido Nacional Escocés (SNP) también pidieron a Johnson que los parlamentarios sean consultados antes de que el gobierno decida tomar cualquier acción militar a instancias del presidente de Estados Unidos.

El portavoz de relaciones exteriores del SNP, Alex Salmond, agregó que los comentarios de Johnson eran «significativos» y «también peligrosos», argumentando que el gobierno necesita buscar aprobación parlamentaria para cualquier acción militar.

A su vez, Tim Farron, líder liberal demócrata, afirmó que «la idea de que los conservadores son cada vez más dependientes de Donald Trump es aterradora», y añadió que «una intervención unilateral e ilegal sería totalmente contraproducente».

No obstante, fuentes cercanas a la secretaria de relaciones exteriores señalaron que todo esto es una situación hipotética y que Johnson no descartaría una votación parlamentaria si Estados Unidos solicitara apoyo.

Estados Unidos atacó con misiles una base aérea siria a principios de este mes, días después de un ataque químico que dejó 80 muertos y cientos heridos.

Por otra parte, hoy la ONU urgió a consolidar el alto el fuego en Siria, especialmente en el área de Ghouta Oriental, en las afueras de Damasco.

Según el encargado de las cuestiones humanitarias del organismo multilateral, Stephen O’Brien, hay en esa zona unas 400.000 personas que desde octubre del año pasado los equipos humanitarios no pueden alcanzar.

En el área, en poder rebelde y asediada por las fuerzas gubernamentales, los civiles están a atrapados en medio de continuos bombardeos, ataques aéreos y lucha terrestre, según la ONU.

Tanto el Reino Unido como Francia pidieron a Rusia más presión sobre Damasco para que facilite la asistencia a la población de esta y otras zonas sitiadas.