“¡Sturzenegger, la puta que te parió / Sturzenegger la puta que te parióóó / S-tur-zenegger, la puta que te parió!”. El 25 de febrero pasado, antes del empate sin goles con Estudiantes en el clásico de La Plata por la Copa de la Liga 2024, la platea de Gimnasia recibió así a Federico Sturzenegger, ya hoy ministro de “Desregulación y Transformación del Estado”. “¡Chorro! ¡Traidor!”, le gritaron. “Siempre el presidente Milei va a proponer mayores libertades -dijo Sturzenegger, seis meses más tarde, en su pantalla amiga de La Nación +-. Si los dueños de los clubes son los socios, les damos más libertad para que elijan si quieren traer capitales. Yo soy de Gimnasia Esgrima La Plata. Imaginate, si no traemos capitales, no sé dónde estamos”. Esta semana, el gobierno de Javier Milei con Sturzenegger le “sugirió” a Foster Gillett, el empresario estadounidense que visitó la Argentina invitado por los propagandistas gubernamentales y no de las sociedades anónimas deportivas (SAD), un par de clubes de Primera para “invertir”: Gimnasia o Independiente, club cooptado por el PRO de Mauricio Macri. Si Sturzenegger quisiera votar en una asamblea de socios de Gimnasia, no puede: no cumple el requisito de los tres años de antigüedad como mínimo, ya que es socio desde hace dos.

El sábado del fin de semana pasado, en el 1-1 de Gimnasia ante River por la Liga 2024, se vieron carteles en las inmediaciones del Bosque: “No a las SAD. Gimnasia es de los socios”. En panfletos se leyó: “Cuidemos a Gimnasia”. Y una bandera rezó: “La hinchada de Gimnasia le dijo NO a las SAD”. El mismo sábado, en el 1-0 frente a Rosario Central, hinchas de Independiente desplegaron banderas en el Libertadores de América: “Club tomado. Grinde$$i viejo meado” y “El Rojo no se vende”. Néstor Grindetti, presidente de Independiente, ex candidato a gobernador bonaerense por el PRO, es un delfín de Macri. “El principal problema lo tiene Sturzenegger, porque cuando sos socio adherís a un Estatuto, y él se hizo socio y ahora quiere cambiar un Estatuto al que adhirió”, lo cruzó Mariano Cowen, presidente de Gimnasia. “Si mañana sale mal, ¿quién se hace cargo? ¿Por qué vendría una SAD a Gimnasia? ¿Por el Bosquecito o el hockey? No, por el fútbol profesional, nada más. Hay una intromisión de la política y el Estado nacional en materia deportiva que es una de las premisas que tiene FIFA, la de la no intromisión. Los socios votaron en asamblea el modelo de club que quieren tener; en el caso nuestro es muy claro en el artículo 2 bis del Estatuto”. Más allá de lo dirigencial, si la imposición de las SAD en el “cueste lo que cueste” del gobierno –vía decreto y resolución de la Inspección General de Justicia (IGJ)– se topa con un dique de contención, será levantado por los hinchas y los socios de los clubes.

Si el gobierno se había reunido con el grupo-SAD estadounidense 777 Partners como el primer interesado en desembarcar en la Argentina -al que luego trató de ocultar por su desmembramiento mundial después de ser demandado por fraudes y por operar con esquema Ponzi-, ahora iluminaron a un sujeto: Foster Gillett, a quien lo “acercaron” a Gimnasia La Plata e Independiente. Gillett, junto a su padre George Gillett y al empresario Tom Hicks, administraron entre 2007 y 2010 al Liverpool: el club no ganó ningún título y, al borde de la quiebra, fueron echados y vetados para la compra de clubes por la Corte Suprema del Reino Unido. Habían prometido un nuevo estadio Anfield y comprar jugadores de su bolsillo: no pusieron ni siquiera un ladrillo y cargaron préstamos bancarios millonarios a nombre del club. ¿Por qué Gillett aceptó la invitación del gobierno argentino? Hicks, su socio en el desfalco del manejo del Liverpool, fue accionista del fondo de inversiones Hicks Muse Tate & Furst, que controló la empresa Cablevisión y Torneos y Competencias en el país.

En la plataforma Reddit, un usuario argentino preguntó por los Gillet en el foro “r/Liverpool FC”. “Le enviamos nuestras condolencias”, respondió Periklis90. “No escuchaban a los hinchas, invertían poco en el equipo y no entendían la cultura del Liverpool -escribió The_Unpopular_Truth-. Se centraban únicamente en las ganancias”. Derelict2: “No quiero sonar dramático, pero no puedes dejar que él sea el dueño de tu club. Su padre nos endeudó enormemente con el Royal Bank of Scotland, intentó desmantelar el club y casi nos lleva a la quiebra y somos uno de los clubes más grandes del mundo. Si intentara hacer eso con un club más pequeño, como el tuyo, podría destruirlo por completo”. Rmp266: “El único propietario que recuerdo que libró una batalla legal para INTENTAR llevar a su club a la quiebra”. Specific-Record2866: “Deténganlo. Eso es todo. Protesta, bloquéenlo. Lo que sea”. En su promoción mediática, un periodista del diario Clarín, inquisidor, le preguntó a Foster Gillett durante una entrevista: “¿Maradona o Messi?”. Respondió: “Mascherano”. Gillet agregó que proyecta “algo parecido al Manchester City” en Argentina y que el club en el que invierta tendrá a “los mejores jugadores del mundo”. Monorriel.

El Club de Gimnasia y Esgrima La Plata, asociación civil fundada en 1887, venció el jueves 1-0 a Barracas Central en Lanús y accedió a los cuartos de final de la Copa Argentina, instancia en la que se medirá con el ganador de Boca-Talleres. El gol lo marcó -en su despedida, porque fue transferido al Bologna de Italia a cambio de cinco millones de dólares y el 15% de una futura venta- Benjamín Domínguez, 20 años. Del barrio platense de Los Hornos, formado y educado por Gimnasia, al que llegó a los 14, besó la camiseta del club. A pesar de su corta edad, jugó 87 partidos en el Lobo. Sin poder contener las lágrimas, Benja Domínguez dijo: “Soy muy querido, muy afortunado. Me voy tranquilo, con el cariño de la gente. Los chiquitos, cada vez que me ven, se vuelven locos. Eso no tiene precio, me lo llevo en mi corazón para siempre. El club me dejó demasiados valores. Gimnasia me formó como persona, el 80%”.

El martes, en Avellaneda, Racing había redondeado un global de 8-1 ante Huachipato de Chile para meterse en los cuartos de final de la Copa Sudamericana. El fútbol-SAD de Chile, con denuncias de multipropiedades, fue puesto como ejemplo por Macri: “Es un modelo que no sólo funciona bien en Europa, también en Uruguay, en Chile y en Brasil”. Huachipato, club-SAD desde 2015, salió campeón de la Primera División 2023 y, un día después, sus dueños lo pusieron a la venta. Las principales figuras fueron transferidas: Wálter Mazzantti (Huracán), Felipe Loyola (Independiente) y el arquero Gabriel Castellón (Universidad de Chile). Hoy se ubica en el puesto 13 entre 16 equipos, a un punto del descenso. “Hermanos de Argentina, no cometan nuestro error”, advirtieron en Tiempo José Bezanilla y Álvaro Burgos, de la Fundación Clubes, acerca de la experiencia de las SAD en Chile.

Que las empresas formen sus equipos de fútbol, que hagan su campeonato de empresas y que a la gente que le gusta ser hincha de empresas, se haga hincha de empresas. Y dejen a los clubes, que son clubes. Si tienen muchas ganas de avanzar sobre el negocio, armen su negocio, sus empresas, sus sociedades anónimas, y entren a escena”, pidió el escritor Martín Kohan, socio de Boca y simpatizante de Defensores de Belgrano. En la misma línea, la pregunta es: ¿o será que quieren apropiarse de la historia de otros?