Las hermanas sean unidas, porque esa es la ley… ¿Pero qué pasa cuando hay cortocircuitos en la hermandad y el afuera intenta devorarlas? Los mandatos familiares, las violencias cotidianas, las demandas sociales y los cuerpos hegemónicos. Ese es uno de los disparadores que pone en escena Las Galván, fascinante obra escrita, dirigida y protagonizada por Lara Hernaiz y María Rastelli. Comedia dramática, drama cómico, teatro del bueno a secas. El off porteño lo agradece.
Las Galván deja ver sobre las tablas la historia de Cecilia y Patricia, inseparables hermanas nacidas y criadas en los arrabales conurbanos de Quilmes. Un pacto las une: no mentirse nunca jamás. ¿Pero es lo mismo decirse siempre la verdad que no mentirse? “La obra hace reflexionar sobre la hermandad, sobre cómo se sostiene ese vínculo a lo largo de toda una vida, cómo se afrontan las relaciones, los rechazos sociales y familiares, sobre cómo pararse frente a estos desafíos”, cuentan Hernaiz y Rastelli en diálogo con Tiempo.
Plasmada en tres actos, Las Galván hace foco en un tridente de escenas clave en la deriva vital de las hermanas: su infancia, la vida adulta y la vejez: “Habla de los problemas que enfrentan, de la relación con su padre, de la mirada de los otros sobre sus cuerpos, de cómo se acompañan frente a la adversidad, de cómo construyen su relación, su hermandad. Frente a estos dramas se hacen cómplices y así surge también el humor. Hay muchas risas, para sacar al drama del lugar solemne”.
Radar de influencias
Fleabag, El baile de las luciérnagas y hasta Thelma y Louise aparecen en el radar de influencia de la obra. El compañerismo, la sororidad, el amor de hermanas, también los celos y las competencias. Son algunos de los tópicos que atraviesan la propuesta ambientada en una barriada quilmeña, cerca del río y el club cervecero.
Rastelli y Hernaiz trabajan en equipo hace varios años. Las Galván, que puede verse todos los jueves de junio en el Teatro Beckett, es su cuarta producción a cuatro manos y en esta entrega cuentan con el aporte de Sol Beyries en la dirección: “Los textos siempre aparecen desde la improvisación, poniendo el cuerpo en escena. Ese se aprecia cuando hacemos la obra. En el contacto con el público, el ida y vuelta. El público se mete en el drama de las hermanas, se identifica, se angustia, pero sobre todo se divierte.”
La risa como antídoto frente a las dificultades. Las creadoras de Las Galván reflexionan: “Creemos que el humor es muy importante en estas épocas tan difíciles, para desconectarse un rato, pero también buscamos que la obra te deje pensando en temas como los mandatos sociales, el bullying y ese vínculo tan particular y fascinante que se da entre las hermanas”
Las Galván
Jueves de junio, a las 21 horas, en el Teatro Beckett, Guardia Vieja 3556, Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Entradas anticipadas en Alternativa Teatral.