Tras la confirmación de Donald Trump del lanzamiento de la guerra tarifaria los mandatarios de los países apuntados advierten medidas económicas y políticas para enfrentar los alcances de una disputa comercial que atenta con impactar severamente en la economía global.

La imposición de aranceles del 25 por ciento a las exportaciones de México y Canadá y hasta del 20% a China ya están vigentes y motivaron la reacción de, entre sus pares, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, quien convocó para este domingo a una Asamblea Popular a la histórica plaza del Zócalo de la Ciudad de México, para informar a la ciudadanía los pasos a seguir ante la «medida unilateral» de Estados Unidos.

«Hemos decidido responder con medidas arancelarias y no arancelarias», anticipó Sheinbaum en conferencia de prensa el martes. «De ninguna manera el propósito (es) iniciar una confrontación económica o comercial que desafortunada y lamentablemente es lo opuesto a lo que deberíamos de estar haciendo; es decir, integrar más nuestras economías», destacó.

«No hay motivo, razón ni justificación que soporte esta decisión que afectará a nuestros pueblos y naciones», expresó la mandataria mexicana, y puso en valor los últimos esfuerzos de su Gobierno para cumplir con algunas de las demandas en materia de seguridad que ha estado reclamando Washington.

«Cooperación y coordinación, sí. Subordinación, intervencionismo, no. A México se le respeta, somos naciones iguales», remarcó e instó a las autoridades de Estados Unidos a hacerse cargo de su propia crisis de consumo de drogas, entre ellas fentanilo. Trump justifica su decisión por su supuesta laxitud para hacer frente al tráfico de estupefacientes y a la inmigración irregular.

China toma «contramedidas»

El Gobierno de China advierte que tomará «contramedidas» contra el aumento de los aranceles a los productos chinos desde el diez al 20 por ciento, con el argumento de que Pekín no ha tomado «medidas adecuadas» para abordar el flujo de opioides sintéticos, incluido el fentanilo.

«China está muy insatisfecha con esto y se opone firmemente a ello. Tomará contramedidas para salvaguardar firmemente sus propios derechos e intereses», declaró un portavoz del Ministerio de Comercio chino a través de un comunicado, antes de instar a Washington a retirar «de inmediato» sus aranceles unilaterales, que ha calificado de «irrazonables e infundados».

Al igual que los otros gobiernos, el de China asegura que estas acciones «dañan a otros y a sí mismos». «Esperamos que EEUU vea y maneje los problemas de manera objetiva y racional, y regrese al camino correcto de resolver adecuadamente las diferencias a través del diálogo igualitario lo antes posible», manifestó.

Los aranceles «violan las normas de la Organización Mundial del Comercio y socavan el sistema de comercio multilateral», asegura el gobierno chino. «No solo no pueden resolver sus propios problemas, sino que también causarán daño a la cooperación económica y comercial entre China y EEUU, y al orden comercial internacional normal».

La cartera ministerial subrayó que «China es uno de los países con las políticas de control de drogas más estrictas y la implementación más completa en el mundo», mientras que afirmó que ambos países han «llevado a cabo una cooperación extensa y profunda en materia de control de drogas», por la cual han «logrado resultados notables».

Canadá en reciprocidad

El primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, anunció que aplicará aranceles de represalia a los productos estadounidenses. «Canadá no dejará que esta decisión injustificada quede sin respuesta», dijo el mandatario luego del anuncio de Trump del lunes.

«Si los aranceles estadounidenses entran en vigor esta noche, Canadá responderá, a partir de las 00.01 (hora local), con aranceles del 25 por ciento contra 155.000 millones de dólares de productos estadounidenses, comenzando con aranceles sobre 30.000 millones de dólares de forma inmediata y sobre los 125.000 millones restantes en 21 días«, afirma un comunicado de la oficina del primer ministro canadiense.

Asimismo, asegura que sus aranceles «permanecerán vigentes hasta que Estados Unidos retire dicha medida» y destacó que «debido a los aranceles» de Trump, los estadounidenses «pagarán más» y, «potencialmente, perderán miles de puestos de trabajo«.

Además indicó que estas medidas «violarán el mismo acuerdo comercial que negoció Trump en su último mandato» y defendió que las autoridades canadienses cumplieron con las medidas de seguridad negociadas en las últimas semanas con la Casa Blanca, producto de lo cual las incautaciones de fentanilo cayeron un 97 por ciento en solamente un mes, llegando a un mínimo de 0,03 libras (1,36 kilogramos).

BB con Europa Press