Estela Díaz es la flamante ministra de las Mujeres, Políticas de Género y Diversidad Sexual de la provincia. Se enteró de que iba a ocupar ese cargo apenas tres días antes de asumir, cuando Axel Kicillof la llamó para contarle que iba a crear esa cartera en espejo a la que conduce en Nación Elizabeth Gómez Alcorta. Hasta entonces, Estela formaba parte de ese equipo y venía de ser secretaria de Género en la CTA y de una extensa militancia feminista. A partir de entonces arrancó el desafío de crear un ministerio desde cero: hoy tiene estructura, pero todavía le falta el lugar físico. En diálogo con Tiempo, Díaz repasa el primer mes de gestión y adelanta cuáles serán los principales ejes de su cartera, que tendrá una perspectiva diametralmente opuesta a la que llevó adelante la ex gobernadora María Eugenia Vidal. Una guía de lenguaje, la aplicación de la Ley Micaela y la creación de un protocolo contra la violencia laboral están en la agenda. Además, los planes para la línea 144 y su visión sobre los refugios para las víctimas.
-¿Con qué se encontraron en materia de género en Provincia? Vidal había creado primero una subsecretaría de Género y luego la transformó en Instituto.
-La redujo, la llamó Instituto para copiar el nombre nacional pero también hizo lo mismo: mucho marketing, mucha foto, mucha escenografía y vaciar lo que es Estado y política pública. Redujo la jerarquía del organismo, redujo la cantidad de espacios de conducción y vació las políticas y precarizó a los trabajadores y trabajadoras del sector. El ejemplo más palpable es lo que pasa con la línea 144, que están tercerizados por un convenio con Provincia NET, y no tienen ninguno de los dispositivos que se supone que tienen que tener quienes trabajan en emergencia: supervisión interna, externa, trabajo con los equipos, período diferencial de descanso. Otro ejemplo: nos encontramos con municipios que no habían retirado las pulseras electrónicas. Eran tres, casualmente de Cambiemos -Lanús, San Miguel y Pergamino- que no las habían venido a retirar cuando estamos hablando de situaciones de alto riesgo. Creo que son ejemplificadoras de la situación en la que está la política de género. Lo otro que muestra el estado en que estaban las políticas en la gestión de Vidal fue cómo nos recibieron los trabajadores y trabajadoras del área. Nos recibieron con aplausos, con lágrimas en los ojos, han sido muy maltratados en estos años. Tengo muchos años y he visto muchos cambios de gestión y nunca vi esto.
-¿Cuáles van a ser los pilares de su gestión?
-Tenemos tres grandes ejes organizadores de la política del ministerio. El primero tiene que ver con la asistencia que es la política para las violencias. Nuestra meta es cambiar diametralmente lo que se venía haciendo. La perspectiva es la integralidad, ahora hay fragmentación, dispersión y una mirada que responde desde la seguridad o la justicia y pensamos que hay que cambiar el enfoque y hay que pensar en todas las violencias: no sólo en la intrafamiliar, hay que pensar en la laboral, institucional, mediática. Todos los tipos y modalidades que marca la ley nacional. El segundo gran eje son las políticas de promoción e igualdad y diversidad sexual. Cambiemos planteó que el organismo rector solo va a trabajar violencia, entonces las mujeres no somos un sujeto protagónico de la sociedad en igualdad sino que somos víctimas y, en realidad, nuestra perspectiva es decir hay discriminación histórica para la mitad de la población y que es un tema de ciudadanía el que estamos discutiendo. Allí vamos a tener además una Dirección Provincial de Diversidad Sexual que va a estar a cargo de Daniela Castro, la primera funcionaria trans de nuestra provincia, donde se trabajarán el acceso a la salud, al trabajo y un programa para la implementación del cupo laboral trans no sólo en el ámbito público sino también en el privado. El tercer eje es la transversalidad y la territorialidad. Vamos a tener un Consejo de la Transversalización de las Políticas de Género en el Poder Ejecutivo, para toda la administración, ministerios y órganos descentralizados.
-¿El objetivo es que cada ministerio tenga su área de género?
-Hay diversas situaciones: hay quienes ya lo definieron en su estructura y quienes van a aplicar las políticas. Esa mesa va a ser de acuerdos para la toma de decisiones, para recomendar resoluciones o decretos hacia el gobernador, para acordar.
-¿Qué temas van a plantear en esa mesa?
-Estamos pensando en tres temas de inicio en esa mesa. Queremos elaborar una guía del lenguaje inclusivo para toda la administración pública. Vamos a sugerirle al gobernador que eso sea un decreto de él, a partir del acuerdo que se construya en esta mesa de articulación de políticas. Queremos hacer la Ley Micaela. Hemos convocado a nuestro equipo de trabajo a Néstor “Yuyo” García, el papá de Micaela, él vino luchando para que esa ley exista y ha caminado el país con la formación y va a estar a cargo de una dirección que tiene que ver con la formación y capacitación. Estamos conformando un equipo muy fuerte porque hay que imaginar la implementación de la ley en toda la provincia, en todos los poderes del Estado. Nos parece una señal muy positiva que el gobierno nacional haya inaugurado la implementación de la ley con una formación al gabinete. Nosotros ya estamos conversando para hacerlo en la provincia. El tercer punto es la creación de un protocolo y dispositivos frente a la violencia laboral. En la Nación lo hay por convenio de paritaria nacional. Esto ya lo estuvimos charlando con los sindicatos, ellos lo están pidiendo.
-¿Qué cambios piensan realizar en la línea 144?
-Vamos a hacer una reforma estructural. Ahora se prorrogaron por tres meses los contratos simplemente para que no se caigan. Es absolutamente irregular la situación, se ha precarizado de una manera alarmante así que ahí estamos pensando cómo van alternando y combinan con algún tipo de tareas como revisión de casos, como tiempo de trabajo en grupos, de cuánto es el tiempo de descanso, de cuánto es el tiempo que tienen para las cartas de llamadas. El trabajo en emergencia tiene un régimen especial y en este caso no lo tiene. Ellas trabajan seis horas cinco días de la semana, estamos revisando eso. Estamos charlando con las trabajadoras y con la línea 144 nacional y también con otros sistemas que atienden las 24 horas como la Oficina de Violencia Doméstica de la Corte. Incluso queremos homologar nuestra línea 144 con el sistema de trabajo nacional.
-¿La reestructuración incluiría contratar más personal?
-Creemos que necesitamos más personal. Son 78 operadoras pero hay algunas con carpetas porque estas condiciones de trabajo afectan la salud y hay un tema crítico en la noche. Se ha reducido el personal y hay días que estamos en un número muy crítico respecto de alguien que tiene que tomar una licencia o que se enferma.
-¿Cuál es el plan para los refugios de víctimas de violencia de género?
-Nosotras vamos a tener una dirección especial para situaciones de alto riesgo y pensamos en una caja de herramientas para estos casos donde el refugio es la última instancia. No nos parece que la respuesta sea más refugios. En la Provincia hay sólo dos, y en condiciones de precariedad gigantescas, y una red de municipales y los que manejan las ONG, pero creemos que hay que tener una caja de herramientas para responder a los casos críticos: hay que trabajar con la red personal y social y comunitaria para las respuestas alternativas. Cuando a una mujer la tenés que llevar a un refugio estás demostrando que fracasó tu política porque no pudiste hacer nada de lo previo ni con el violento ni con dispositivos alternativos, que a ella la tengan con alguna familiar, con una red comunitaria. No es encerrar a la mujer la mejor respuesta. Cuando se corre riesgo de vida hay que hacerlo pero hay que pensar que es excepcionalísimo.
-El Registro Único de Casos de Violencia sigue siendo una materia pendiente. ¿Lo van a crear?
-Es una legislación vieja que nunca se cumplió. Es muy complejo hacer un registro único de casos porque las víctimas entran por distintas jurisdicciones y organismos. Pero vamos a recibir ayuda de una metodóloga, Roxana Ynoub, que trabajó mucho desde el Primer Consejo de las Mujeres, y que va a ser nuestra asistente técnica. Pero tenemos que hacer acuerdos interinstitucionales fuertes porque una víctima puede entrar por Seguridad, Justicia, Salud, Desarrollo Social, un municipio. Es de casos de violencia, distinto del de femicidios que es responsabilidad de la justicia.
-¿Qué expectativas tiene sobre el tratamiento del aborto legal en el Congreso Nacional?
-Ya lo dijo el presidente (Alberto Fernández), tiene un compromiso y va a elaborar un proyecto con el ministro de Salud. Ya es tiempo de aborto legal porque hay un movimiento social enorme que produjo una gran transformación cultural respecto del tema y porque hay un gobierno popular que tiene el compromiso de que sean política pública las cuestiones que el movimiento demanda. Lo hizo creando el Ministerio de las Mujeres y estoy convencida de que lo va a cumplir en relación a esta deuda de la democracia. «
El Consejo Articulador de Políticas de GéneroLa primera actividad institucional del Ministerio de las Mujeres fue la presentación del Consejo Articulador de Políticas de Género y Diversidad Sexual con los municipios. El encuentro se gestó en cuatro días y contó con la asistencia de unos cien distritos tanto del Frente de Todos como de la oposición. «Hubo mucho interés de los intendentes e intendentas, tuvimos mucha aceptación», cuenta Estela Díaz y explica que el mayor pedido es por «la falta de políticas y de lineamientos de intervención, necesitan herramientas».
La ministra explica que en muchos municipios «se está creando el área de género, en otros la están jerarquizando, entonces nos piden ayuda. Los municipios más grandes, en el Conurbano, por ejemplo, elevaron el área a Secretaría, en otros a Dirección y en otros crearon el área donde no estaba. Hay mucho interés de los intendentes e intendentas». El Consejo funcionará periódicamente para coordinar el trabajo a nivel provincial y local. «La territorialidad es clave y está en sintonía con las indicaciones que nos dio el gobernador a todos los ministerios, que La Plata es nuestra sede cabecera pero que el gobierno es con toda la provincia».