El gobierno de la Ciudad de Buenos Aires tiene casi 20 mil trabajadores y trabajadoras estatales monotributistas. Cuentan con salarios muy precarizados, pero realizan las mismas tareas que sus compañeros de planta permanente. Eso no es todo. Según cifras oficiales del gremio ATE Capital, el conjunto de estatales perdió el 22% del salario en 2023 y la paritaria de este año no acompaña la pérdida de poder adquisitivo.
Por esta razón, bajo la consigna “en la Ciudad sí hay plata”, la asociación sindical se moviliza este martes hacia el Ministerio de Hacienda porteño (Martín García 346). Exigen la reapertura de las paritarias y poder discutir una verdadera recomposición salarial.
“Este año, los trabajadores de planta de la Ciudad están 5% por debajo de lo que es la inflación real, mientras que los casi 20 mil monotributistas -que cumplen las mismas tareas- están 10 puntos por debajo de la inflación oficial del GCBA”, explicó a Tiempo Agustina Panissa, secretaria adjunta de ATE Capital.
La referente sindical señaló que este retraso salarial ya se viene acumulando a lo largo de estos últimos años y que los trabajadores monotributistas, que son quienes se encuentran en la peor situación, al mismo tiempo realizan tareas de mayor exposición.
“Ellos llevan adelante tareas en calle, realizan trabajos en dispositivos de atención directa a la población y no tienen aumento desde el mes de mayo. Y a su vez han tenido que padecer el aumento del monotributo decretado en el ámbito nacional por el gobierno de Javier Millei”, recordó Panissa y subrayó que no solamente reclaman que esos trabajadores pasen a la planta, que tengan un aumento real y a la par que el resto de los trabajadores de planta, “sino que también estamos llevando adelante una iniciativa que es que los trabajadores monotributistas que dependen del gobierno de la Ciudad no tengan que pagar Ingresos Brutos. La verdad que es un sinsentido que tengan que pagar por trabajar”.
Por último, la secretaria adjunta de ATE Capital planteó que otro de los reclamos es que la suma fija que consiguieron desde ATE, sea una suma de carácter remunerativo para todos los trabajadores y por todos los conceptos.
“Desde que empezó el año vemos cómo el gobierno de Jorge Macri fue recortando. Hemos tenido varios despidos, que en su mayoría los hemos podido reincorporar, pero que a su vez se está llevando adelante una persecución concreta en los sectores de trabajo: descuentos que no están justificados, descuentos a los días de los trabajadores de planta, a los monotributistas y también descuento de los días de paro. Todo, en el marco de una persecución que busca que los trabajadores no puedan protestar o reclamar por sus derechos”, terminó.
Estatales, entre los más precarizados
Jorge Molina es agente de Prevención del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires y trabaja en ese sector desde el 2018. Es delegado gremial de la Junta Interna de ATE en la Dirección de Prevención del Delito y denunció ante Tiempo que él todavía sigue «contratado». Molina recordó que los reclamos más fuertes de la jornada son «el pase a planta y el aumento salarial de los contratados, que no recibimos desde el mes de mayo».
El cuerpo de agentes de prevención fue creado en 2017 por un decreto. En ese momento, el cupo de agentes era de 740 y la tarea principal, desde aquel entonces, es la cobertura de los senderos escolares: un total de 397 en toda la ciudad.
“Actualmente, somos 1.400 trabajadores, de los cuales 1.300 son agentes; hay 24 supervisores, 16 jefes de equipo y aproximadamente 60 trabajadores en personal administrativo. De este total de trabajadores, solamente tenemos 60 en planta, repartidos en planta permanente y transitoria”, detalló Molina a este medio. Hoy, un agente de prevención está cobrando $ 454.000 pesos en bruto.
El fuerte recorte en niñez y adolescencia
Laura Licera es delegada del sector ATE dentro del Consejo de Derechos de Niños Niñas y Adolescentes de CABA. La representante gremial señaló que el organismo está totalmente en crisis porque, tras la propuesta de retiro voluntario que hizo Jorge Macri, varios trabajadores especializados en el sector aceptaron la propuesta.
“Tras el decreto de Macri que habilitó los retiros voluntarios, quienes quedamos trabajando con experiencia y formación en el trabajo de infancia, cada vez somos menos. Existe una situación de descuentos por supuestas faltas injustificadas en las que, precisamente, no están injustificadas. A mí me llegó una notificación el mes pasado donde se detallan una asistencia injustificada y tenía la asistencia justificada por la vicepresidenta del organismo porque había solicitado algo que está contemplado por Ley que era un permiso de día de trámite personal”, recordó Licera y afirmó: “Alrededor del 80% de compañeros y compañeras de la planta del Consejo de Derechos de niños, niñas y adolescentes, recibió notificaciones de asistencias injustificadas”. Y terminó: “Existe mucho temor ante esta situación y esto produce inacción de los compañeros. Hay mucha persecución con la cuestión del horario, no reconocimiento de la tarea de campo, y no contemplación de viáticos, etc.”.
