Compañeros y compañeros amigos, aquí estamos desde Caracas poniendo el cuerpo. Como lo ponen tantas compañeras y compañeros en la militancia, o en la gestión. Me tocó ponerlo en algún momento desde el corazón mismo del Imperio. Para tratar de transmitirles lo que veo. Con toda sinceridad, yo comprometo mi palabra.
Así que no puedo falsear absolutamente nada de lo que veo y si hubiera una violación de los derechos humanos la denunciaría, desde luego, porque estamos comprometidos con eso. Pero tenemos que salir del clima que impone la prensa internacional y que ha dominado la escena en Argentina sobre la cuestión de Venezuela y todos estos días porque es la misma prensa que instala cosas falsas. Pongo el ejemplo de las excavadoras. Insistían tarde y noche en que tenían que encontrar dinero enterrado, tratando de desenterrarlo en la Patagonia. Esa misma locura es la que instala cosas aquí que no son ciertas.
Lo que yo he visto aquí desde que llegué: me he dedicado a caminar, he caminado solo, he caminado de noche atravesado la ciudad. He entrado a los comercios. He estado tanto en barrios como el Chacao, donde está el corazón de las personas más adineradas y más opositoras, y en los barrios más populares. La situación es de absoluta normalidad. Inclusive no he visto una ciudad uniformada, policial, militarizada. No, no la he visto, les digo sinceramente.
La gente compra, circula, está en los en los restaurantes. Desde luego que hay barrios con pobreza: es un país muy rico, pero al cual se le impide comerciar con el exterior, importar muchos productos, para eso hay que hacer trámites muy engorrosos y encontrar vías porque está profundamente sancionado a nivel internacional en lo económico. Y además se le impide acceder a los recursos de petróleo, del oro, de sus tantos minerales. Indudablemente eso causó hace ocho años una caída muy fuerte de PBI de Venezuela. Y eso generó un malestar, desde luego, que causó inclusive la emigración de muchísimos jóvenes que son los que están en Argentina. Y que por lo tanto, al haber seguido muy desilusionados con la economía de su país, son opositores.
Y eso sí es una fibra muy fuerte que habrá que restañar a medida que se vaya consolidando esta recuperación económica. Inclusive se ha diversificado la producción de alimentos, manufacturas, algunos productos industriales textiles, justamente para compensar la falta de importaciones. Eso ha mejorado en general la situación local.
Lo otro que quiero decirles es que hay una cuestión mínima de realismo. Este señor González Urrutia, cuando terminó la elección aquí, se refugió en la embajada de España, salió del país, viajó por el exterior durante la mayor parte del tiempo, recorrió en distintos países. Era un hombre que estaba retirado de la política. No presentó un plan de gobierno. Por lo tanto: ¿cómo haría para asumir la presidencia de un país, sin equipo sin haber estado, sin conocer la situación del gobierno? Así que es una cosa tan fantasiosa esa asunción de un presidente reconocido por el exterior pero no por la realidad del país. Fíjense que la Cámara de Productores, los industriales, todos están comprometidos con seguir trabajando para la recuperación del país porque es el beneficio de ellos mismos.
Es muy difícil. Ahí me tocó vivirlo con Juan Guaidó, cuando estaba en la OEA. Un presidente de fantasía. Cuando la autoridad, de ser reconocida en su país, es reconocida en las capitales extranjeras, se transforma en algo propio de la colonia, no de una nación soberana.
Lo otro que quería decirles es que habría que discutir lo que hoy se denomina como dictadura. Miren las movilizaciones, tanto la del gobierno como la de la oposición: han sido libres en Caracas. En distintas ciudades hay diferentes estados gobernados por partidos de la oposición, hay bloques opositores en la Asamblea Nacional, va a haber elecciones de gobernadores próximamente y la oposición ya se ha comprometido a participar porque además está gobernando esos estados opositores. Y el presidente Maduro ha propuesto una reforma de la Constitución para que haya más temas sobre los cuales el pueblo tenga que pronunciarse a través del voto, la decisión popular.
Una dictadura, en general, desaloja la calle, impone toque de queda, estado de sitio. No permite las garantías de asamblea y de reunión. Los medios aquí opositores dicen lo que quieren igual o peor que en la Argentina. Todo un dogmatismo y extremismo en las palabras, en el lenguaje descalificador. Desde luego que es un gobierno con muchos problemas pero que a futuro entre la recuperación económica, el clima para la Asamblea Constituyente y las campañas electorales de las distintas vertientes, promete una recuperación que tiene que repatriar a los a los jóvenes. No cabe duda.
Eso es lo que se ha visto aquí. Lo último: esta fake news de Machado ayer jueves. Me mandaban de Argentina lo que se decía en los canales extranjeros, me preguntaban los presidentes extranjeros de derecha. Decían: la han secuestrado a Corina Machado, está detenida. No fue así. En ningún momento estuvo detenida. Instalan el tema para crear el clima de caos, de duda, de incertidumbre.
Por eso yo trato de comunicarme con ustedes. Nunca estamos exentos de que haya apagones. Ha habido cortes, hackeos de todo el sistema digital del país, entre otras cosas. Y fue lo que demoró el resultado electoral.
Esta es la situación a la mañana del viernes 10 de enero, que es donde el día en que se está prevista la asunción del presidente Maduro en la Asamblea Nacional.
Muchísimas gracias, un saludo y un abrazo muy fuerte.
Textual de un video publicado en YouTube desde Caracas.