El peronismo bonaerense y el kirchnerismo protagonizaron un acto cargado de fervor y con una significativa sintonía en los discursos para conmemorar el Día de la Lealtad, aquel 17 de octubre de 1945 en que nació el movimiento fundado por Perón. Fue este miércoles, en el estadio cubierto del club Ferro de la localidad de Merlo. Frente a una multitud en la que se veían intendentes, concejales y legisladores, tanto nacionales como provinciales, los dirigentes que hablaron ratificaron su voluntad de construir la unidad más amplia posible para vencer a Cambiemos en las elecciones del año próximo. Hubo menciones constantes a Cristina Fernández. También a Néstor Kirchner, de quien se reivindicaron los logros de su gobierno. El futuro electoral de la senadora y ex presidenta es, hoy, una de las incógnitas del ambiente político.
Con un estilo algo más decontracté, el intendente anfitrión, Gustavo Menéndez (Merlo), exhortó a construir el frente electoral más amplio y representativo posible para vencer al macrismo en 2019. En su discurso, el jefe comunal desdramatizó el hecho de que el peronismo a nivel nacional haya realizado varios actos para recordar la fecha más importante de su calendario. “Hicimos muchos actos, no sólo uno”, fueron las palabras de Menéndez, quien es titular del PJ a nivel provincial.
Las otras convocatorias importantes para recordar el 17 de octubre se realizaron en la capital de Tucumán, donde el gobernador Juan Manzur recibió a Sergio Massa y a Daniel Scioli ante una muchedumbre, y en la ciudad de Corrientes, donde el titular del partido, José Luis Gioja, compartió tribuna con el jefe del bloque del FpV-PJ Agustín Rossi. El ala combativa de la CGT había hecho su propia recordación, al mediodía, en la sede porteña del SMATA.
El encuentro en Merlo reunió a todo el peronismo de la provincia de Buenos Aires, con legisladores bonaerenses, concejales e intendentes sentados en las primeras filas. También se hicieron presentes dirigentes de las agrupaciones que no forman parte del PJ pero que sí integran Unidad Ciudadana. El kirchnerismo estuvo bien visible con la presencia en un lugar protagónico del diputado Máximo Kirchner, quien ya tiene decidido renovar su banca en la Cámara Baja por el distrito bonaerense. Máximo, que en agosto cerró el plenario nacional de Unidad Ciudadana realizado Ensenada, esta vez no pronunció ningún discurso.
El acto comenzó con unas palabras del intendente de Esteban Echeverría y vicepresidente del PJ bonaerense, Fernando Gray, quien además se hizo tiempo para tener una participación relámpago en la movida de Manzur en Tucumán. “Hay que cuidar las cosas. Vinieron estos, con caras bonitas, con timbres y globos, y nos han destruido», cargó Gray en referencia obvia a la gestión de Mauricio Macri. “Este gobierno se queja de las cadenas de Cristina, pero aquellas eran cadenas de felicidad. Éste (por Macri), cada vez que habla, nos saca algo”, agregó.
La lista de oradores siguió con la dirigente de Cañuelas, Marisa Fassi, en representación de las mujeres; el diputado y ex alcalde de La Matanza, Fernando Espinoza; el jefe comunal de 25 de Mayo, Hernán Ralinqueo, y el propio Menéndez, a cargo del cierre.
«A partir de 2019 el gobierno va a ser de nuevo del pueblo. Que no le quepa dudas a Macri, a Vidal y a toda la derecha argentina», vaticinó a su turno Espinoza. Un rato antes, en diálogo con los periodistas, Espinoza había planteado su confianza en la realización de “una gran primaria” que definirá los nombres de los candidatos a presidente y gobernador. “El acuerdo (del peronismo) se va a basar en una gran primaria en la que estén presentes todos los que quieran ser precandidatos, a presidente, a presidenta, a gobernador, a gobernadora. Porque acá no se proscribirá a nadie”, aseguró.
Entre las sillas dispuestas en los primeros metros se pudo ver a los intendentes Jorge Ferraresi (Avellaneda), Martín Insaurralde (Lomas de Zamora), Ariel Sujarchuk (Escobar), Gabriel Katopodis (San Martín), Mario Secco (Ensenada), Juanchi Zabaleta (Hurlingham), Leonardo Nardini (Malvinas Argentinas), Aníbal Regueiro (Presidente Perón), Juan Ustarroz (Mercedes), Juan De Jesús (Partido de la Costa), Mariano Cascallares (Almirante Brown), Walter Festa (Moreno), Hernán Yzurieta (Punta Indio) y Gustavo Arrieta (Cañuelas), entre otros.
En los espacios reservados para dirigentes también se ubicaron los diputados nacionales Andrés “Cuervo” Larroque, Eduardo “Wado” De Pedro, Mayra Mendoza, Axel Kicillof, Cristina Álvarez Rodríguez, Rodolfo Tailhade y Walter Correa. Desde la Legislatura bonaerense habían llegado las jefas de las bancadas de Unidad Ciudadana Florencia Saintout y Teresa García. También se vio al senador bonaerense Darío Díaz Pérez, al diputado bonaerense Walter Abarca, al histórico apoderado partidario Jorge Landau, al ex diputado nacional Mario Cafiero, al dirigente Martín Sabbatella. La representación sindical tuvo su parte con Hugo Yasky (CTA), Roberto Baradel (Suteba), Omar Plaini (canillitas), Francisco “Barba” Gutiérrez (UOM Quilmes) y Mario Manrique (secretario adjunto de SMATA).
Una ausencia que no pasó desapercibida fue la de la intendenta de La Matanza, Verónica Magario, en cuyo entorno dan por hecho que competirá por la gobernación bonaerense el año próximo. Según pudo saber Tiempo, Magario no pudo asistir por una cuestión vinculada a la salud de un familiar directo.
El encuentro se organizó bajo la consigna “Otro camino es posible”. Ese camino, al menos en la provincia de Buenos Aires, implica una participación protagónica de CFK. Sea como candidata, sea como armadora electoral. Los caminos para la unidad se topan con un problema cuando la discusión se traslada a todo el país: los gobernadores por ahora se muestran renuentes a una alternativa electoral con predominio del kirchnerismo. Pero en el conglomerado del PJ, como se sabe, todo puede cambiar. Sobre todo si hay chances de llegar al poder.