Más allá de la convocatoria por decreto que hizo el viernes el gobierno nacional a sesiones extraordinarias, ni en la Casa Rosada ni en el Congreso hay precisiones de cuándo podrían concretarse. Si bien la fecha que fijó el Ejecutivo daba comienzo a la convocatoria la semana del 20 de enero, en el Parlamento la mayoría de los legisladores continúa con su descanso en el marco del receso estival.
Fuentes de la Jefatura de Gabinete comentaron a Tiempo que, posiblemente, la semana que viene el jefe de ministros Guillermo Francos convoque a una reunión con los jefes de los bloques propio y dialoguistas. El objetivo sería comenzar a diagramar el temario que tiene como meta principal el tratamiento del proyecto que propone eliminar las PASO. También está en la lista la nueva propuesta de Ficha Limpia -que redacta el equipo del ministro de Defensa, Luis Petri-y la agenda de la titular de la cartera de Seguridad, Patricia Bullrich, con reiterancia y juicio en ausencia.
Lo cierto es que puertas adentro del Congreso no se ve ninguna chance de que se abran los recintos en el mes de enero en ninguna de las dos Cámaras. En Diputados, el hemiciclo está en obra de refacción desde hace unos días y desde la oficina de Martín Menem informaron a Tiempo que estiman que estará listo “aunque todavía le falta” en el mes de febrero.
Por esta razón, el decreto que firmó Milei ingresó por la mesa de entradas del Senado, cuyo recinto si está en condiciones de poder sesionar durante este mes. En la Cámara que preside Victoria Villarruel aseguraron a este medio que “todavía no hay nada” y que incluso hay senadores que tienen pedidas sus vacaciones para la segunda quincena de enero.
Mucho ruido y pocas nueces
Dentro del Palacio ven la convocatoria como una forma de presionar al Poder Legislativo que Milei consideró en su momento un “nido de ratas” y mostrar que también se “trabaja en enero”, sobre todo con un presidente que ha dicho que no se toma vacaciones porque ama lo que hace.
No se trata de soplar y hacer botellas. Tratar los proyectos que incluyó el Ejecutivo en el temario tomará varias semanas. De los siete hay tres que deben iniciar su recorrido por Diputados (dos cuentan con dictamen). Uno es el de juicio en ausencia, que propone una modificación al Código Penal en el artículo 104 que establece que “el imputado tendrá derecho a hacerse defender por abogado de la matrícula de su confianza o por el defensor oficial, siempre que ello no perjudique la eficacia de la defensa y no obste a la normal sustanciación del proceso”.
La iniciativa que propone derogar las PASO en estas elecciones legislativas aún tiene que ser debatida en las comisiones de Asuntos Constitucionales, Justicia y Presupuesto y Hacienda. el camino de aprobación tomará más tiempo.
El otro proyecto con dictamen es el de reincidencia y reiterancia, que consiguió dictamen el 25 de septiembre y busca terminar con “la puerta giratoria” en las comisarías para los presos. La propuesta fue cuestionada por integrantes del Instituto de Estudios Comparados en Ciencias Penales y Sociales (INECIP) que, en diálogo con Tiempo advirtieron que agravará la situación de absoluta emergencia que tienen las comisarías de la Ciudad de Buenos Aires y de todo el país.
Por otro lado, tanto el proyecto de ley antimafias como el pliego del juez Ariel Lijo para integrar la Corte Suprema de la Nación tienen que pasar sólo por Sendo. Para el nombramiento de jueces, según indica la Constitución, el oficialismo necesita los dos tercios de los presentes para poder aprobar al postulante de la Casa Rosada y para esto tendrán que ponerse a prueba acuerdos con el espacio más opositor del Senado, el bloque de Unión por la Patria.
Finalmente, están pendientes de ingreso al Congreso el de ficha limpia que prometió Milei a sus socios del PRO, luego de frisar el tema en diciembre, y el de compensación e índice de actualización de quebrantos. Toda una novedad en el temario.