El presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, explicó en un mensaje a la nación de 11 minutos, su decisión de «pasar la antorcha» al tiempo que abandona la carrera presidencial, pero seguirá gobernando hasta el último día de su mandato. El mandatario afirmó, en ese sentido, que seguirá defendiendo sus ideales, destacando la defensa de los derechos civiles, las denuncias contra «el odio y el extremismo», contra la violencia política, contra la violencia armada o contra la crisis climática. Un mensaje muy a tono con la estrategia de campaña que ya comenzó a desplegar su vice, Kamala Harris, a la sazón su elegida para candidata por los demócratas.
Biden había considerado que su «historial como presidente» merecía un segundo mandato por razones que incluían «ambición personal», pero decidió «dar paso a una nueva generación». «Es la mejor manera de unir nuestra nación», expresó el presidente de 81 años desde el Salón Oval de la Casa Blanca durante un discurso en la franja de mayor audiencia televisiva.
Las preocupaciones sobre su edad y su aptitud mental alcanzaron un punto de máxima alerta después de su desastrosa actuación en el debate del 27 de junio, lo que llevó a más de 30 legisladores demócratas a instalarlo públicamente a que dimitiera.
Tras anunciar su retirada, ofreció todo su apoyo a la nominación de la vicepresidenta como candidata presidencial demócrata e instó a los miembros de su partido a unirse para derrotar al ex presidente Donald Trump.
«Durante los próximos seis meses me centraré en hacer mi trabajo como presidente. Eso significa que seguiré bajando los precios para las familias trabajadoras y haciendo crecer nuestra economía. Seguiré defendiendo nuestras libertades personales y nuestros derechos civiles, desde el derecho al voto, hasta el derecho a elegir –en referencia al aborto–«, dijo Biden.
Biden justificó su decisión de retirarse de la carrera para un segundo mandato porque «la defensa de la democracia es más importante que ninguna ambición personal», y señaló que cree que es «el momento» de dar paso a «voces» más jóvenes, en referencia a Harris, a quien ha calificado de «experimentada», «fuerte», «capaz» y de «gran compañera» tanto para él como para el país.
«He decidido que la mejor manera de avanzar es pasar la antorcha a una nueva generación. Es la mejor manera de unir a nuestra nación (…) No se trata de mí, se trata de vosotros, de vuestras familias, de vuestro futuro. Se trata de nosotros, el pueblo. Nunca podemos olvidar eso, y yo nunca lo he hecho. He dejado claro que creo que Estados Unidos está en un punto de inflexión», agregó.
Biden dijo que seguirá insistiendo en la necesidad de una reforma del Tribunal Supremo en un momento en el que el órgano judicial avaló la inmunidad parcial de Trump en su periodo como presidente. En el plano internacional, el inquilino de la Casa Blanca argumentó que Estados Undos, durante su gestión, «no está en ninguna guerra» y que seguirá adelante con la coalición internacional para «impedir que (el presidente de Rusia, Vladimir) Putin se apodere de Ucrania y haga más daño», y prometió seguir fortaleciendo la OTAN, para evitar que China supere a Estados Unidos y para poner fin a la guerra en la Franja de Gaza que permita la liberación de los rehenes y «llevar la paz» a la región de Medio Oriente.