El Consejo del Salario que fija el valor del haber mínimo se iba a reunir el pasado jueves. Las organizaciones sindicales agrupadas en el Plenario del Sindicalismo Combativo (PSC) habían fijado una movilización para esa fecha que mantuvieron a pesar de la postergación oficial generada, según las propias autoridades del Ministerio de Producción y Trabajo, por la renuncia del entonces ministro de Economía Nicolás Dujovne y su reemplazo por Hernán Lacunza.
La reunión con las centrales sindicales y las cámaras empresarias se realizará finalmente durante este viernes y tendrá su punto cúlmine a las 15 horas cuando se espera que se defina la actualización de Salario Mínimo Vital y Móvil hoy en $12.500. Durante el último ejercicio el incremento del mínimo fue de apenas un 25%. Tomando en cuenta que la inflación interanual registrada en junio fue del 55,8% la pérdida del poder adquisitivo de ese haber fue de alrededor de un 20%.
Los gremios agrupados en el PSC, encabezados por el Sindicato del Neumático, la AGD UBA, el ceramista del Neuquén y la Unión Ferroviaria de Haedo además de una decena de sindicatos docentes de la provincia de Buenos Aires y el porteño Ademys con las organizaciones piqueteras independientes, anunciaron que, nuevamente, se movilizarán a la cartera laboral con el propósito de elevar un pliego de reclamos “para que la crisis no la paguen los trabajadores”.
En un texto consensuado entre esas organizaciones gremiales señalan que reclamarán “un aumento de emergencia y un salario mínimo de $ 35.000”. Para ellos “la concentración es una continuidad de la inmensa movilización y de la jornada nacional de trabajadores ocupados y desocupados del pasado 22 protagonizada por los mismos convocantes junto a otros sectores combativos y antiburocráticos y enfrenta la tregua de las centrales sindicales (CGT y CTA)”
Para los firmantes de la convocatoria, que el jueves a las 8 am harán una conferencia de prensa en la sede del gremio docente Ademys, “tanto el gobierno de Macri como Alberto Fernández, con toda la liga de los gobernadores, ponen el acento en la defensa de los empresarios capitalistas y los acuerdos con el FMI, mientras con cada devaluación se licuan los bolsillos obreros y se pierden puestos de trabajo”.
Por eso, siguen, “el sindicalismo combativo marchará con la exigencia de un inmediato paro activo nacional de 36 horas”. Para el caso de los docentes universitarios y los docentes de nivel primario y secundario afiliados a Ademys “han convocado al paro de 24 horas, sumando los propios reclamos, fundamentalmente ser considerados en el bono de $ 5.000 y adelantamiento de cuotas paritarias (AGD) o reapertura de la paritaria (Ademys)”.
Además de los reclamos ya puntualizados los sindicatos exigen la reapertura de las paritarias, libres y con cláusula de actualización automática, el reparto de las horas de trabajo sin afectar el salario y la prohibición de despidos. Proponen la ocupación de toda fábrica que cierre o despida, la apertura de sus libros contables y el control obrero de las mismas.
A nivel de un programa de alcance más general postulan la ruptura con el FMI, el no pago de la deuda externa, la nacionalización de la banca, el comercio exterior y los recursos estratégicos bajo control de los trabajadores y usuarios.